𝑆𝑐ℎ𝑜𝑜𝑙 𝐿𝑜𝑣𝑒 - 𝑆𝑢𝑛𝑠𝑢𝑛/𝑆𝑢𝑛𝑔𝑠𝑢𝑛.

1:08

La mañana había transcurrido algo silenciosa, el desayuno fue silencio pero no incómodo, el baño los había puesto relajantes.

Sunoo tenía un dolor tremendo en la espalda baja, por lo que cuando bajaron, Sunghoon tuvo que ayudarlo.

Cuando ya estaban fuera de la casa de los Kim, Sunghoon tomó la mochila de Sunoo y se la colgó en el hombro que tenía desocupado y después tomó la pequeña mano del menor.

—Sun... ¿no quieres ir en auto? Puedo ir rápido a mi casa por el auto de mamá. No creo que tenga problema en prestarmelo.

—No, estoy bien. Podemos ir caminando, no está muy lejos la universidad.

—Bien, entra a tu casa. No tardo mucho.

—Pero... te dije que así estoy bien —. Hizo un mohín y miró al mayor.

—Shh, dije que no tardo.

Entonces, Sunghoon metió a Sunoo a la casa y fue corriendo a su casa.

No tardó mucho cuando ya estuvo de vuelta en casa de Sunoo.

Sunoo lo miró desde la ventana y salió.

—Ahora te ves como un niño mimado _. Se burló Sunoo y después miró el auto —. Lindo auto, niño mimado —. Cerró la puerta de su casa y se dio la vuelta.

—Yah, vamos que se hace tarde —. Abrió la puerta del lado derecho para que Sunoo pudiera entrar. Y así lo hizo, se adentró en el auto y Sunghoon también lo hizo.

El camino también fue silencioso. Sunghoon había puesto música clásica para el ambiente. Ambos lo disfrutaban, ya que les gustaba mucho la música clásica y la ópera.

Al llegar, Sunghoon estacionó el auto de su madre y ambos bajaron de él.

Sunghoon tomó la mano del menor y entraron al instituto.

Habían veces en las que Sunoo apretaba con mucha fuerza la mano del mayor, a lo que Sunghoon preguntó:

—¿Qué pasa? —. Sunoo lo miró con un puchero en los labios.

—Duele... mucho —. Le susurró y luego bajó la mirada.

—Oye, ¿no quieres que vayamos a tu casa? Para que descanses un poco. Lo siento —. El menor negó y después rió.

—No te disculpes, tonto. Y no, tenemos que entrar a clases. Además no llevo ni un mes aquí y ya voy a faltar a clases. Mejor vamos.

—Pero Sunoo, es por tu bien.

—No quiero, vamos.

El mayor ya no dijo nada más y caminó con Sunoo hasta su aula. Afuera se encontraban sus amigos charlando. Cuando los vieron, rápidamente Jungwon y Riki se acercaron a él.

—Sunoo, ¿todo bien?

—Ehh, sí... ¿por qué?
 
—¿Viste ayer lo que Sunghoon publicó? Al parecer estaba apunto de ten-

—Cállate Riki.

—Lo siento.

—Como sea. ¿Lo viste?

—Revisé todo hoy en la mañana, así que sí.

—Oh no.

—¿Por qué tan preocupados por eso?

—Nada. ¿Tú cómo estás?

—Ah, ya entiendo.

—¿Qué?

—Ustedes saben que me gusta Sunghoon.

—¡¿Qué?! —. Gritaron los amigos al unísono.

—Cállense. Bueno, les decía, él me gusta, y respecto a lo que subió, bueno... ese era yo.