Epílogo

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Cuando leemos un libro nos adentramos en un mundo completamente diferente en el habitamos. Cuando leemos un libro, vemos otro universo, otra realidad.

O bueno, al menos de esa forma lo veía Jake. Él creía que en el mundo había más de una sola vida. Que, fuera de la realidad en la que se encontraba, había otras personas, y por muy loco que suene, así fue. El castaño tan sólo tuvo que mirar un poco más allá y encontró lo que menos esperaba, el verdadero amor.

Se enamoró perdidamente de alguien que sabía que jamás podría tener, según él y su lógica, un amor imposible. Un amor que por mucho que amara, nunca podría tocar o abrazar. Jake sabía que sería una historia corta y poco duradera, sabía que cuando tuviese que despedirse le dolería como la mierda. Pero, aun así, se arriesgó por ella. Le entregó cada uno de sus sentimientos a través de cartas. Podría decirse que incluso la hiso sentir... especial.

Él sabía que en algún momento tendrían que alejarse para siempre, pero aun así lo dio todo por ella. Porque según Jake, ella valía la pena en cada jodido sentido. Ella era lo más maravilloso que sus ojos color verde habían visto. Ella era luz en oscuridad. Y aunque nunca se lo contó, ella lo salvó de la mejor manera en la que alguien puede hacerlo.

Él se enamoró de sus virtudes, de sus defectos, de sus ojos, su sonrisa, su voz.

Y es muy probable que ahora mismo te estés preguntado, ¿Cómo rayos es posible qué él me haya podido ver y escuchar? La respuesta es sencilla, no hay explicación. Jake simplemente abrió un día las páginas de su libro favorito y te vio. No vamos a negar que al principio se sorprendió y se asustó. Pero luego detalló cada una de las facciones que había en tu rostro y se enamoró.

Fue amor a primera librada. Vale, no, mal chiste, pongamos serios. Como dirían los de tu realidad, fue amor a primera vista.

El oji-verde tan sólo sintió atracción y toque de electricidad en el momento que te vio. Y aunque tú no lo podías ver a él, él a ti sí. Ya sé, ya sé, suena poco raro. Pero él no te veía de esa forma, más bien, quiso demostrarte de todas las maneras posibles que tú eras lo más importante en su vida. Que eras y siempre serás su más grandioso y único amor.

Pero, volviendo al tema inicial, al despedirse, Jake no quiso dar a entender que no te amara, de hecho, despedirse de ti fue su mayor desafío. Sin embargo, hay veces que por amor debemos arriesgarnos. ¿No?

Pero vamos, de una u otra forma, él estará a través de todas las cartas que te envió, estará cuidándote aunque tú no lo puedas ver, será la estrella que cuidará tu camino, porque hay amores que talvez estén destinados a encontrarse en otra vida. Jake siempre permanecerá contigo. ¿Cómo? Pues a través de aquel libro en el que te vio por primera vez, A una realidad de ti.

Fin.

Hola, hola, ¿Cómo están? ¿Cómo les va? ¿Qué tal ha estado su día? ¿Ya comieron? ¿Tomaron agüita? Espero que sí, eh

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Hola, hola, ¿Cómo están? ¿Cómo les va? ¿Qué tal ha estado su día? ¿Ya comieron? ¿Tomaron agüita? Espero que sí, eh.

Bien, primero que nada quiero agradecerles por apoyar este libro. Sinceramente pensé que nadie leería esta historia, y... bueno, mil gracias por darle una oportunidad.

Gracias por todos sus lindos comentarios, gracias por todo. No soy muy buena expresándome, (posiblemente ya se dieron cuenta).  Pero, la verdad es que no tengo palabras suficientes para agradecerles todo su apoyo.

Ustedes son lo más, les amo demasiado.

Y sin más que agradecer o decir, nos vemos en otra realidad;)

Se les ama con todo el amor
—A.C

A una realidad de ti ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora