"Mal Ahí"- Rusarg

3.2

-dou, y esto?

Saca una percha con una blusa celeste de mangas largas con perlitas en el pecho. Digamos que... el argentino no tenia problemas en usar ropa femenina, así que se la llevó al vestidor del fondo, el único vacío, para probársela. 

Tardó unos 3 minutos en sacarse la campera gigante de Rusia, en tratar de colgarla sin que se caiga del gancho en la pared, y sacandose la remera de mangas largas que le dejó corriente en el pelo, algo así como cuando te pasas un globo por la cabeza.

Se puso la blusa rápido, sientiendo el frío de la tela.

-como me odio, lpm...- fue lo que dijo cuando se vió al espejo con aquella prenda color cielo.

Adivinan por que se quejaba? No era por que se sentía gordo, o por que la blusita en realidad no era para alguien como él. Era si no, por el color de su piel, no le gustaba la combinación de celeste con celeste. 

-parece que no tengo nada puesto, boludo. QUIERO SER BLANCOOOO.- simuló un llanto seguido de un puchero mientras seguía mirándose en el espejo, buscando una perspectiva en el que se pueda ver bien.

Parecía una adolescente disconforme con su cuerpo

-argen, estas allí dentro?- se escucha desde el otro lado del probador

-ehh...si si, que pasa?- dijo dando un saltito repentino reconociendo esa voz

-nada, queria saber en donde estabas. Te compré un café, por si querias.

al instante el argentino corre la cortina para ver donde estaba su café, haciendo que Rusia sonría por la rápida acción del otro, aunque pronto esa sonrisa se convirtió en una mueca rara.

- ¿por que miras asi?-preguntó desviando su mirada del café hacia los orbes celestes del mas alto

El ruso analiza bien lo que estaba viendo, y nada que ver, arge no estaba sin su remera, solo traía una que era del mismo color de su piel, sin mencionar que esa blusa le iba al cuerpo, marcando la apenas notable cintura y su abdomen plano como puerta.

Cuando su cerebro logró procesar la imagen, sacó su vista de las perlitas blancas y lo miró a los ojos

-emmmm, nada, llevarás eso?

-nah

-porque?- cuestionó desinteresado

Arge lo miró pensando si a su amigo le daba igual que su remera y piel fuesen del mismo color, o si en realidad no tenia conocimientos para comprar ropa.

-por que no me gusta.-le respondió cortante

Rusia lo miró de reojo mientras tomaba de su vaso de cafe. En serio quería que argentina se decidiera en llevar algo. A él no le gustaba ir a comprar ropa, aparte de que tampoco entendia porqué tanto capricho por elegir algo, Rusi sólo compraba por Internet sabiendo ya lo que quería, y listo, o había veces en que iba a los locales en los que ya sabía lo que vendian, pero bueno, no quería discutir de eso estando allí.

-Haz lo que quieras, me da igual, pero si tardas demasiado, te tendrás que conformar con la ropa de mi padre.

Arge se imaginó usando la ropa de la URSS. Él sabía exactamente como le quedaba, ya que muchas veces se la había probado cuando su viejo amigo aún existía, y le quedaba ENORME. Para darles una ilustración de como se veía, Imaginen a un nene de 4 años usando un vestido de casamiento largo. Así de grande le iba esa ropa, y aunque a él le gustaba la ropa holgada o larga, ESO YA ERA DEMASIADO.

- bueno, okey, salí. - se apresuró nervioso para elegir algo rápido y no parecer un elfo con la ropa del soviético si no se apuraba.

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Ahhhh, chikees, perdón por alargar tanto estas escenas, prometo que llega Chile y se pone interesante