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Una semana después de la noticia

Arge estaba en la cama de Rusia, sentado y cubierto con esa gran manta hasta la cabeza. Una bandeja con patas descansaba frente a él, sosteniendo un plato con pan casero que el Tricolor logró hacer, un pote de queso crema y una taza de té, todo esto a pedido del celeste. Pero todo estaba intacto hace ya media hora. Argentina vio aquel desayuno, y sin entender el porqué, le dio asco. No quería comer nada.

¿tan mal la estaba pasando?

Necesitaba a alguien que lo apoye, alguien que sepa por lo que estaba pasando, no quería que le dijeran que todo iba a estar bien, quería que alguien le haga saber que todo estaría bien. No era lo mismo.

Recordó lo que le podría llegar a pasar a su chilito, todo era por que él no se cuidó, se insultaba por dentro,  despreciando su persona, deseaba volver el tiempo, a ese día que ni siquiera argentina recordaba...no recordaba no haber usado protección. A pesar de no poder visualizar ese momento en que descuidó a ambos, se culpaba por todo, él mismo, junto a otros tantos paises latinos y europeos, le tiraban críticas y razones para mandarlo frente a la ONU.

De nuevo, lágrimas salieron de sus azules ojos. Todo se estaba juntando, pronto quedaría sólo, hasta el punto de no poder ir a una simple reunión de sus superiores sin un sermón de 50 minutos, hablando "disimuladamente" de sus acciones.

Otra vez llorando sólo y en silencio.

Otra vez sabiendo que hizo todo mal

Miró por entre lagrimas ese te que su amigo le hizo. Lo agarró y empezó a tomarlo, un tanto rápido antes de que empieze a toser por culpa de los sollozos.

Al poco tiempo, Rusia entra a la habitación para ver como se hayaba el mayor de los dos.
No grande fue su sorpresa al observar a aquel chico ocultando su llanto en la taza.

- argen...-se acerca a él, sentandose a su lado.- por que lloras ahora?

-Rusia-*suspiro raro que uno hace cuando llora*- yo...solo...no quiero que chile se muera...

Más lágrimas salen de sus ojos de manera violenta

-que? Por que habría de morir?- apoya su cabeza en su hombro, escuchando atento

El ruso ya estaba enterado de todo. Y cada día argen lloraba por algo distinto, realmente se encontraba mal, y lo único que podía hacer, era darle consentimiento.

-Chi..Chile no está bien económicamente, y sus terremotos y problemas nacionales....-sollozo- si da a luz, puede no salir vivo del parto, y su cuerpo no está listo para una cesárea.

El del sol gira su cabeza, para encontrarse con aquellos ojos celeste de Rusia, cuáles sólo miraban el suelo, y al dueño de esos orbes apoyado en su hombro como niño aburrido,  tratando de entender el balbuceo del más bajito.

Argentina limpia sus lágrimas con el puño de la remera y ronrie. Al menos tenía a alguien cerca que no le refriegue en la cara sus malas acciones.

-Rusia, gracias por soportarme...

El nombrado no lo mira, pero ríe en lo bajo, tomando la fria mano celeste entre las suyas, ya que estaban cálidas como su presencia en el cuarto.

Eso, extrañamente le dio paz a Argentina.

..........

Bueno...todo bien?

Quieren que ya vaya al punto, o está bien que meta relleno?

Buee

(Vayan a mi otra obra de cortos, no se arrepentirán, si ya)

(Vayan a mi otra obra de cortos, no se arrepentirán, si ya)

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No Men, casi número capicua

"Mal Ahí"- RusargDonde viven las historias. Descúbrelo ahora