Amalia Reina de las Brujas

10. Ruinas

Hoy he dormido fatal, pero por lo menos las náuseas han disminuido. Gracias a las benditas pastis.

Cada vez que me quedaba dormida las mismas imágenes me atormentaban. El gran vientre abultado de la reina oscura.

Llegó a la salita, por primera vez en muchos días no siento nauseas al oler el café.

Tomo asiento,me acerco a la mesa arrastrando la silla. Unos grandes brazos me rodean. Mientras tengo hundida su cabeza en mi cuello.

- te amo, susurra en mi oído mientras deja caer suaves besos primero sobre mi cuello, para después centrarse en la marca.

Ya están de vuelta esas corrientes que atraviesan todo mi ser para llegar todas al mismo punto.

- Ahora has decidido dejar el celibato. Digo con sarcasmo.

Comienza a reír, mientras sus ojos encendidos no dejan de mirarme.

- sabes muy bien, lo que opino del celibato. Solo quería asegurarme de que estuvieras bien. Dice mientras comienza a acariciar mis pechos por encima de la camiseta.

Un gemido sale de mi boca. - estoy desayunando atino a decir.

De un momento a otro me lleva sobre sus brazos, yo cruzó mis brazos sobre su cuello y beso sus labios. Total no puedo hacer otra cosa ya desayunare después.

Me tumba sobre la cama, quita mi camiseta con delicadeza, se posiciona sobre mi pero sin dejar caer su peso, comienza besar mi cuello, de ahí baja a mis pechos, los besa, los agarra, juega y subciona mis pezones. Mi espalda se arquea. Mi centro está en tensión. Mis gemidos llenan la habitación.

Él se desprende del pantalón y los boxer al mismo tiempo. Se posiciona frente a mí levanta mis piernas quita mis braguitas con delicadeza y durante un rato disfruta de las vistas.

Hunde su cabeza sobre mi sexo, Lo besa, lo acaricia, lo lame. Me penetra con su lengua noto como mi centro se contrae. Estoy apunto de explotar, mi cuerpo se tensa, el placer recorre todo mi ser me libero y alcanzó el clímax.

Baja mis piernas de sus hombros, se acerca a mí boca, comparte conmigo mis fluidos y sabor. Sus ojos verdes brillan con deseo y pasión.
Se separa de mi boca.
Está frente a mí, su gran miembro apunta en mi dirección, su punta está mojada por la excitación. Acerca su miembro a mi entrada y penetra suavemente. Sus estocadas son lentas pero precisas. oh dios me va a matar de placer!! Digo para mí.
Agarro su trasero bruscamente y lo atraigo más hacia mi.

- más rápido, más rápido. Digo entre jadeos.

Ahora sus embestidas son un poco más rápidas pero no suficiente yo quiero más.

- más, más....digo notando como la presión se acumula de nuevo en ese mismo punto.

- así, está bien. Recuerda que debo de tener cuidado.
Dice mientras sigue atormentandome por el deseo y el placer.
Una embestida después me hayo inmersa en un maravilloso orgasmo.

Para pocos segundos después correrse dentro de mi. Llenándome de su líquido caliente.

Lentamente se separa de mí me acomoda sobre su pecho mientras acaricia mi cabello, permanecemos en silencio por varios minutos.

He desayunado tarde pero  he desayunado.
Me estoy poniendo las zapatillas de deporte he logrado convencer a Robert de que me lleve al lugar que marca el mapa, según las coordenadas.

Está a unos 50 km de nuestra ubicación cuando miramos por Google maps descubrimos qué el lugar al que nos dirigimos son las ruinas de un castillo,espero poder encontrar alguna pista digo en voz baja mientras termino de atar los cordones.