¡Idhún es real!

Capítulo 27

Isabel

Mi mamá ni siquiera me ha dirijido la palabra en todo el día.
Sabe que algo escondo.
Ya no confía en mi.
He intentado decirle miles de veces que no pasa nada, pero no ha querido escucharme.
Nunca he podido engañarla.

Luego de un largo día, "Me voy a dormir"
Alma me recibió con gusto.

***

Erik.
Golpea, golpea, esquiva, golpe letal.
-Estas muerto.
El simulador de guerrero, volvió a su forma original.
-Otra vez.
Había logrado vencerlo ya 9 veces seguidas, era un record para mi.
-¡En guardia!
No había dejado de practicar durante toda la tarde. Estaba cansado, y sudado.
Necesitaba distraerme.

***

Isabel.

Camino por Limbhad en busca de Erik.
"¿Qué estoy haciendo?"
No paraba de preguntarme eso. Me había prometido dejar las distracciones y concentrarme en mis estudios de magia. Shail se había llevado una decepción ayer, al ver que no había estudiado.
"¿Que estoy haciendo?"
"Buscar a Erik..." me respondo.
No debería estar haciendo esto, tendría que estar estudiando.
Pero por alguna razón, no me aguantaba no juntarme con él.
"qué me sucede..."

Al acercarme al sector donde practican con las espadas, comienzo a oir ruido.
Mi corazón se acelera.
Me acerco cuidadosamete y me asomo por la puerta.
Ahí estaba.
Erik, peleando con una especie de armadura viva.
Me quedo mirándolo, hasta caer en cuenta de un detalle.
No llevaba polera.
Me ruborizo y sigo observando.
Si que peleaba bien.

***

Erik.

Golpe, esquivo y directo al corazón.
Nuevamente, había vencido.
Justo cuando iba a comenzar otra vez, noto ojos puestos en mi.
Miro hacia un lado, en busca de mi observador.
Me ruborizo sin poder evitarlo.
Era Isabel.
Ella, al darse cuenta que me percaté de su presencia, se ruboriza y me devuelve una tímida sonrisa.
Sonrio.
-Hola, Isa. ¿Espiando?
Hice que se ruborizara más.
-Lo... lo siento... no quería interrumpir... yo...
-No te preocupes, pasa.
Isabel duda un instante, y luego entra a la habitación.
Por alguna razón se mantuvo alejada.
¿Qué hace? ¿Por qué se aleja como si...?
Oh.
No llevaba polera.
Me pongo rojo como nunca antes y me doy vuelta en una busca desesperada de mi polera.
Al encontrarla, rápidamente me la pongo.

***
Isabel.
Desvió la mirada al ver lo rojo que se ha puesto Erik.
Al ver que ya esta con su polera, me acerco un poco.
Se produce un incomodo silencio.
-Eh... -Logro decir.- Mejor te dejo practicar, debo... ir a estudiar hechizos...
Sin esperar una respuesta, doy media vuelta y comienzo a caminar.
Quería alejarme de la situación, ya que mi corazón latía como loco y estaba totalmente confundida.
-¡Hey! Espera...
Me detengo unos momentos.
-Yo... -Erik carraspea.- Será mejor... digo, yo... quiero contarte algo. Es sobre Eva.
-¿Eva...?

***
Erik.
Esa no era la verdadera razón por la que quería que se quedara, pero me convencí a mi mismo que si lo era.
Solo estaba confundido... ¿O no?

Isabel se acerca con un claro rastro de preocupación en su rostro.
Mi corazón se acelera.
"Cálmate" me ordeno.
-¿Recuerdas... mi plan?
-Si... ¿Funciono?
-Eva se me adelanto.
-¿Qué?
Aguardo un momento antes de responder.
-Le dio una paliza a Sarah.
Sus ojos se abren como platos.
-¿Una paliza? ¿Hablas en serio?
-Al parecer, luego de que terminar la prueba, la comenzarón a molestar, y... no aguanto más y se defendió.
Isa se muerde el labio, pensativa.
-Y... ¿Cómo reacciono la directiva de la escuela?
-La suspendieron por toda una semana. Al parecer, se le pasó la mano con los golpes.
-Oh.
-Si...
-Bueno, ya no la molestarán.
-Si eso es lo bueno. Se encontraba fatal cuando la molestaban. -Suspiro.- Espero que ahora vuelva a ser la misma de antes.
-¿Cómo reaccionaron tus padres... incluyendo a Kir...Christian?
-Mi mamá al principio estaba histérica y furiosa con Eva, ya que no sabía que todo este tiempo la habían estado molentando. Christian, reacciono... digamos que quería... hacerles...quien sabe... a sus compañeras. Pero no lo hará, a petición de mi madre y de Eva. Ahora él esta quién sabe donde con Eva, conversando con ella.
-De seguro la llevo a su Usshak, no te preocupes.
Inmediatamente después de mirarla con una expresión de ignorancia sobre ese termino, baja la cabeza.
-¿"Usshak"? ¿Qué es eso?
-Yo...
Suspira.
"Claro, le prohibieron darnos información"
-Nunca nos cuentan todo, todas las cosas a medias. -Alego.
-Lo siento... quisiera hablarte libremente... pero...
-Te lo prohibieron.
Asiente.
-Pero si me lo cuentas... no se lo diré a nadie.
-No lo entiendes, Erik. Kirtash se mete en mi mente cada vez que me ve, para comprobar que no he abierto la boca.

Al escuchar su nombre,
innevitablemente aprieto los dientes.
"No hay razón para odiarlo" me recuerdo. "No hay razón para odiarlo."
-Comprendo. -Logro decir.
Otro incomodo silencio.
"Di algo"
-Eh... ¿Y cómo... van las cosas en tu... vida normal?
Isabel rie levemente.
-No... no muy bien.
-¿Por qué?
-Mi madre sabe que algo escondo, y como no puedo decirle y tengo que mentirle, ya no confía en mi.
Oh.
-Es dificil vivir una doble vida. Te comprendo al cien porciento.
-Si... pero vale la pena.
Otro incomodo silencio.
-Tengo una pregunta, para conocerte mejor. -Rio- ¿De dónde eres? O sea, se nota que tambien eres española...
-Soy española... pero vivo en Moscú, Rusia. Hasta hace poco vivía en Barcelona, pero... por unos... problemas familiares... tuvimos que venirnos a vivir a Rusia, donde papá tenía unos conocidos.
Le brillaban los ojos.
Claramente algo malo había sucedido.
La miro, tratando de descubrir que escondian esos ojos, cuando noto que esta conteniendose para no llorar.
Sin poder evitarlo, la atraigo hacía mi, y la abrazo.
-No llores...
-Lo siento... yo...
Solloza, y comienza innevitablemente a llorar en mi hombro.
Me sobrecojo y la abrazo aún más.

***
Isabel.

"Prometí no volver a llorar, y ahora estoy en el hombro de Erik, llorando"
"No llores, no llores, no llores"
Trato de despejarme, pero no logro parar mis lagrimas del todo.
-Tranquila, Isa. Llora todo lo que quieras.
De un momento a otro, abro los ojos y me doy cuenta que estoy abrazada a Erik, llorando.
Pensamientos confusion vuelven a invadir mi mente.
"No llores, no llores."
-Es que... cuando viviamos en Barcelona -Explico.- Mis abuelos y otros familiares realizaron... -Sollozo.- Una celebración del aniversario de mis abuelos. Mis padres y yo... nos atrasamos en llegar... y... y....
"No puedo con esto..."
-No es necesario que me lo cuentes, si no quieres, Isa.
-Quiero... -Me seco las lagrimas.- Cuando llegamos... estaba lleno de camiones de bomberos... porque... había un... incendio. -Sollozo.- Ninguno de mis familiares... salió con... vida. Fue muy duro sobretodo, para mi padre. Como el lugar nos traía malos recuerdos, decidió aceptar la oferta... de mudarnos a Moscú, que le dieron unos conocidos.
Respiro tratando de calmarme.

***

Erik.
Dejo que derrame sus últimas lágrimas.
"Pobre Isabel..."
Un rápido pensamiento cruza mi mente.
"Estas abrazando a Isabel."
Al sentir los locos latidos de mi corazón, trato de calmarme.
Su cuerpo era tan delicado, sus cabellos...sentía que estaba en el cielo. Todo era perfecto.
-Tienes una familia aún que te quiere y proteje, y unos peculiares amigos en tu vida fantástica que estaran siempre ahí cuando más lo necesites.
Rápidamente, me doy cuenta que pensé en voz alta.
Al parecer, funciono para que Isabel dejara de llorar y sonriera.
-Gracias, Erik.
-Por nada.
Sin querer soltarla aún, la abrazo aún más. No quería que acabara.
Lentamente, nos separamos.
Isabel se limpia unas últimas lágrimas y me sonrie.
"Llora, y aún así se ve linda"
Le devuelvo una amplia sonrisa.
-¿Y sabes hablar ruso?
Tenía que cambiar de tema.
-Cuando pequeña mi padre siempre me enseño, ya que el paso un largo tiempo en Rusia. No se me da muy bien de todos modos.
-¿Sabes algún otro idioma?
-Mmh... ¿El idhunaico cuenta?
Rio y sonrio.
-Quizás. -Vuelvo a sonreir.- Yo, además del español y el idhunaico, se hablar inglés, gracias a la escuela y a mi padre. A él se le da muy bien el inglés.
-Tu padre si que sabe idiomas. Sabe, danés, inglés, español e idhunaico, ¿No?
-Si. Mi mamá siempre nos cuenta lo difícil que se le hizo el español. -Rio leve.
-Me imagino. -Sonrie.
-¿Ibas a practicar magia?
-Oh cierto... será mejor que te deje...
-Heyyy. -La interrumpo.- Es justo que te acompañe mientras lo haces, ya que tu estuviste mientras practicaba con mi espada.
Se sonroja levemente y asiente.
-Entonces, acompáñame.