Raider in love II (Juliantina, Barbarena)

Capitulo 14

Macarena POV.

Si estoy haciendo un tiempo de 1'35''530 de media en cada vuelta en un circuito de 3.671 metros y el piloto que viene detrás de mi rueda a 0'05'' por debajo de mi tiempo. ¿Cuanto tardará en alcanzarme? No lo haría, aunque los números nunca habían sido lo mío, de eso se encargaba mi equipo.

Llovía, no demasiado pero sí lo suficiente para entorpecer los tiempos del resto de pilotos excepto el mío, la comandante me había enseñado a pilotar en las situaciones más adversas. A pesar de que la pista estaba llena de agua se estaba secando el carril de la trazada que todos seguían, la que yo iba marcando desde mi posición en cabeza. Mi equipo me informò en la pizarra que la segunda moto estaba preparada con los neumáticos seco, sin duda eso habría sido idea de mi madre.

Podría continuar hasta la victoria y arriesgarme o perder la primera posición entrando a pit line para el cambio. Cedí ante la sugerencia de la comandante y abandonè la pista entrando a pit line, salté de una moto a otra mientras mi madre asentía ante mi decisión.

Volví a pista, había perdido unas cuantas posiciones pero en el momento que los neumáticos pisaròn la trazada seca no tuve rival. Pronto todos imitaròn mi gesto entrando a pit line para cambiar de moto reclamados por sus equipos que estaban viendo mis nuevos tiempos, 1'21''336.

Era un trabajo difícil, desviarme de la trazada seca a tal velocidad me podría costar una caída pero la victoria era solo de los valientes.

Cuando crucè la meta me tumbè sobre la moto y sin cortar gas fingí estar nadando en la piscina que era el circuito de Sachsenring en aquel momento. En la vuelta de honor cuando pasé ante el box de mi equipo me puse en pie sobre los estribos coloqué la mano sobre la visera del casco y le dediquè a mi madre un saludo militar.

- Te he visto muy... diferente hoy sobre la pista.- Fuè el recibimiento de mi madre cuando terminè de cambiarme antes de la rueda de prensa.

- Alguien me dijo que vale más uno que cero y mira por donde han sido 25 puntos.- Sonreí.- Además, el cambio fuè idea de la mejor.

-¿Y desde cuando haces lo que te sugiero?- Preguntó confusa.

- Después de la rueda de prensa os invito a cenar para celebrar la victoria.- Evité responder.

¿Desde cuando? Simple, desde que me quería demostrar a mí misma y a mi madre que quería ser mejor, o quería algo mejor o quería a Barbara... ¡Ay! No sé exactamente porqué lo hacìa pero salía de lo más profundo de mi pecho y eso que era profundo.

-¿No prefieres salir de fiesta con tus amigos?- Arrugó el ceño.

- Os quiero a vosotras esta noche, a las dos mujeres más importantes de mi vida.

-¿Qué pasa guisantito?- Arrastró las palabras.

Esa era la oportunidad de confesar, sí, lo iba hacer, estaba preparada.

-¿Te enfadarías si te dijera que me gusta...- Piensa, piensa una forma de decirlo delicadamente.- la nueva paddock girl del equipo?

¡No! Ni se os ocurra decirlo, lo sé, pero me había cagado viva.

- Macarena.- Suspiró llevándose las manos a la cara.- Me pediste un paddock boy al inicio de la temporada, ¿cuanto tardaste en acostarte con él?- Ese tono era más cansancio que molestia.- Por no decir que tras un par de carreras decidió irse, no digo que sea tu culpa pero algo influiste. ¿Y ahora Estrella?

-¿Y si te digo que me gusta de verdad?- Puse una mueca de inocencia.

Por supuesto que no hablaba de Estrella, estaba apretable, era muy guapa y simpática pero no me refería a ella. Solo trataba de allanar el terreno aunque no sé ni para qué, Barbara estaba muy bien con Pol y yo... yo solo quería que mi madre supiera... tampoco sabìa bien lo que estaba haciendo. Me había vuelto tonta, extremadamente tonta ¿sabéis? y nada tenìa sentido sino podía compartirlo con Barbara, y sentirme así no tenìa sentido sino lo podía compartir con mi madre.