Raider in love II (Juliantina, Barbarena)

Capitulo 20

-¿Sabéis eso que dicen que cuando tu vida corre peligro la ves pasar ante tus ojos? Mentira.- Bebí agua.- No ves nada y menos si te caes de una moto, todo esta difuminado mientras das vueltas sin control. Ves el gris del asfalto dando paso al color del que este el cielo ese día, más gris, los colores del piano parecen un cuadro abstracto y verde, mucho verde. Es como una lavadora centrifugando ropa de color.

Barbara POV.

Me giré en cuanto escuchè el nombre de mi prima, era miércoles, se supone que hasta el jueves no estaría por aquí, y mucho menos que fuéramos a coincidir sin planteárnoslo.

No pude apartar la mirada de Macarena durante toda la canción, había conseguido desbocarme el corazón con su voz y esas miradas furtivas.

- Nos quedó irnos de viaje, compartir locuras nuevas... Nos quedó aquel tatuaje de tus manos en mis piernas... Nos faltaròn desayunos, y caricias en la mesa... Te faltó mirarme a solas, y pedirme que volviera... No te pude retener, entre tanta multitud... Tu cuerpo quería mas vivir, y yo vivir en ti, sin más... No te pude retener, entre tanta multitud... Tu cuerpo quería mas vivir y yo vivir en ti, sin más... Nos quedó un par de canciones que bailar sin mas vergüenza... Nos sobrabàn tentaciones y dejarnos de apariencias... Nos faltaba el compromiso, nos quemaba la impaciencia... De buscarnos sin permiso, anda y vístete, que ya no llegas... No te pude retener, entre tanta multitud tu cuerpo quería mas vivir y yo vivir en ti, sin mas...

Respiraba profundamente, parecía que cada estrofa de aquella canción fuera dedicada para mí. Es cierto que nos habían quedado muchas cosas por hacer, me había quedado dar mi opinión sobre todo lo sucedido, pero Macarena era así, tomaba la decisión que le parecía oportuna y le daba igual lo que pensaràn los demás.

Me levantè para recibirla cuando se acercaba a mi mesa.

- Cuanto tiempo.- Dije de forma casual.

- Cuatro meses desde la cena de navidad.- Asintió nerviosa.

Era la primera vez desde la ruptura que coincidíamos lejos de la familia. A solas se podría decir excepto por la presencia de Jairo en mi mesa donde la invitè a acompañarnos.

-¿Recuerdas a Jairo?

- Sí, claro,- Se estrecharòn la mano.- clavaste a Sergio en la película.

- Gracias.

-¿Estáis juntos?- Frunció el ceño.

- Jairo y yo hemos coincidido en el proyecto.- Me precipitè a contestar.

Estiré tan apenas mi mano para hacer contacto con la de Macarena y me revoloteó el estomago.

¿Y qué hacen los conocidos cuando se reencuentran tras mucho tiempo? Rememoramos anécdotas de los meses que grabamos en el paddock y mi prima nos contó las novedades que se cocían por allí.

- El infierno de tu gloria ha pasao por mí, ahora siento y pienso adentro alegría de vivir, alegría de vivir cuando estas cerca de mí, ahora siento y pienso adentro, lo que habrá dentro de mí.- Pillé canturreando a Macarena cuando los músicos interpretaròn esa canción, me sonrió nerviosa al verse descubierta.

No dejè de intercambiar miradas y sonrisas con Macarena, la conversación empezó a fluir consiguiendo derribar ese muro que nos mantenía distanciadas, el mismo que ella había construido.

Volvía a estar a gusto con su compañía, tanto que se nos había echado la noche encima bebiendo en aquel lugar tan mágico. Seguramente era su presencia la que lo volvía mágico.

- Deberíamos irnos ya, Bars.- Dijo Jairo mirando el reloj de su muñeca.

-¿Tan pronto? ¿Por qué? No,- Lloriqueó mi prima.- venga chicos.- Llamó al camarero.- Mi casa es vuestra casa, os podéis quedar en el motorhome.