Lady Fairy (AU Miraculous LadyBug)

Capítulo 11: Una Mansión Llena De Secretos

Una vez que Adrien hizo la llamada, la famosa limosina llegó por el par de jóvenes unos cuantos minutos más tarde.

Se despidieron de la pareja de morenos, ambos emprendieron rumbo en direcciones totalmente opuestas.

-Estarán bien -afirmó Nino al notar la expresión preocupada de Alya. -se que te preocupa la reacción de Gabriel Agreste, pero te puedo asegurar que Adrien jamás permitirá que le suceda algo.

-Eso espero -contestó la morena, comenzando a caminar a paso lento. Su amigo no tardo mucho en seguirla.

Por otro lado, nuestros dos protagonistas mantenían un silencio cómodo dentro del vehículo. El guardaespaldas de Adrien no dudo en mirar por el espejo retrovisor a la nueva acompañante.

Su expresión serena y tranquila, le dejaba cosquilleos por todo su cuerpo. Podía verlo, aquella joven era buena y bondadosa.

-Espero que no te incomode estar un rato en mi casa -respondió el chico un tanto apenado.

-Pará nada, creo que será agradable compartir un momento juntos -confesó ella amablemente.

-Sí, eso creo -contestó jugando con sus manos, denotando lo nervioso que se encontraba en ese momento. Hasta pudo escuchar la ligera risa burlona de su compañero.

¿Como rayos había logrado invitarla a su casa sin siquiera entrar en pánico?

Definitivamente estaba progresando mucho, y se alegraba de ello. Por fin estaba dejando de ser el chico "cobarde" que tanto le decía Plagg.

Llegaron a la Mansión más rápido de lo que se esperaba, las rejas se abrieron dando paso al vehículo. Una vez que este se detuvo Adrien bajo del mismo y ayudó a su acompañante.

-Gracias, que caballeroso -expresó la azabache al sentir como la puerta se abría estirando su mano para encontrar la de su amigo.

-N-no hay de que -dijo entre tartamudeos al ver la bella sonrisa de la joven -permiteme, no deseo que te pierdas o te sientas algo desorientada al entrar a mi jaula.

-¿Jaula?-pregunto ella confusa, sin saber a qué se refería.

-Es decir.... Mansión, sí eso, quise decir Mansión -respondió rápidamente.

-De acuerdo -contestó ella, un tanto nerviosa al presentir las emociones del chico.

Se encontraba ansioso y nervioso, pero lo que más le había llamado la atención fue el ligero temor que pudo sentir gracias a su Miraculous.

Sí, podía estar segura de ello, ella casi nunca se equivocaba respecto a las emociones de las personas. Y en las de Adrien había temor, ligero, pero lo había.

-Ejem..... ¿Te gustaría pasar?-cuestionó el joven cuando la vio perdida en sus pensamientos.

-Claro, me gustaría -fue su respuesta.

Ambos entraron a la enorme casa del rubio, desde ya se podría decir que Marinette sintió el frio silencio sepulcral que la otra vez que estuvo ahí. Cuando solicito ver en persona a Gabriel Agreste.

-Buenas tardes joven Adrien -comentó la otra azabache.

-Ella es Nathalie, se encarga de que todo esté en orden -explicó Adrien.

-Un placer -dijo Marinette, si bien ya conocía a Nathalie tuvo que aparentar que no, para no levantar sospecha.

-Ella es Marinette -presentó Adrien sin tener en cuenta que ya se conocían.

-El placer es todo mío -comentó la mujer, siguiéndole la corriente, cosa que agradeció.

-Vamos a mi habitación, ahí estaremos mas cómodos -escucho decir a su amigo.