Lady Fairy (AU Miraculous LadyBug)

Capítulo 15: Luz En Medio De La Oscuridad

A la azabache le pareció raro escuchar al héroe parisino, no esperaba su llegada.

-Buenas noches para ti también Chaton -se inclino levemente a modo de saludo, en su familia acostumbraban a hacer una reverencia en señal de respeto.

-¿Chaton?-preguntó pícaro, haciendo que el carmín en las mejillas de la azabache aumentará.

-¡Quise decir, Chat Noir!-grito apenada -¡Si eso!

-No te preocupes no me molesta -argumento el joven.

-¿No?-hablo la joven curiosa.

-No, para nada -volvió a decir, en ciertos momentos odiaba que la azabache no pudiera ver, quería que lo viera sonreír. Pará que se cerciorara de que era honesto -Me gusta, me parece lindo.

La azabache suspiro más tranquila al saber aquello, a pesar de haber tratado con él como super héroe, no estaba acostumbrada a hacerlo de forma civil.

El traje le daba esa confianza, se sentía más segura de sí misma al estar con él por medio de ese método.

-¿Y que hace el héroe de París visitando a una civil común y corriente?

-Oh, pues verás. Hacia mis patrullajes por aquí cerca y decidí pasar a saludar -Adrien había sentido que mintió de forma descarada.

No le iba a decir que llevaba rato observándola solo para argumentar sus sospechas sobre sí era ella la heroína con traje y Miraculous de Mariposa.

Había convivido poco con ella, pero en ese tiempo muchas dudas llegaron a su cabeza y quería resolverlas, ya saben lo que dicen: la curiosidad mató al gato.

-¿No crees que es muy tarde para estar a fuera?-preguntó luego de que se quedara observando un rato la ciudad.

-Me gusta salir a mi balcón y sentir la brisa fresca -contestó -Me hace volar y olvidarme de todo.

Chat Noir sonrió, era exactamente lo mismo que le sucedía al estar encerrado en esa frívola mansión con una persona que no merecía ni el título de padre ni todos los lujos y oportunidades que se le habían otorgado.

—Pero; ¿que me dices tú?—pregunto por su parte, curiosa.

—Ya te lo dije —comentó —Solo hacía mis patrullas nocturnas.

—Pero siento que... Hay algo, tu patrullaje debió terminar hace ya dos horas —dijo —Hace frío y cada vez la temperatura es más baja.

—No es nada —contestó —Únicamente me dedico a hacer mis patrullas.

—Pero te estas helando —comento al momento de tocar su mejilla.

—¡Auch... Suelta!—ordenó tomando su mano de manera brusca.

—Chat Noir, ¿que sucede?—dijo preocupada.

—No es nada, sólo un golpe con un villano y su cosa grotesca —fue su respuesta.

—Mmm... Parece un golpe muy fuerte, tu pómulo esta hinchado —comentó.

—Tks —chasqueo con la lengua, irritado —Sanará en unos días.

—Con esos cuidados no creo —admitió ella por su parte —Ven conmigo.

—¿A donde?—él por su parte preguntó.

—Vamos a sanar esa mejilla hinchada, tengo un botiquín de primeros auxilios —contestó

—Oh, no, no —se negó —No es necesario, de hecho yo ya me iba.

—Por favor, solo permiteme curarte —rogó —Será rápido, lo prometo.

—Pero es que yo... —dijo