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Bueno, Maria2133973  suguirio un maraton de capítulos, nunca hice uno, e hice lo que pude. Espero les sea de su agrado. No duden en comentar😊
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Amina había llegado justo a tiempo para sus clases y justo a tiempo para que la preceptora la señale con el dedo:

-Vos, Melej Amina. Veni un segundo.

-¿Qué pasó? -pregunto acercándose lentamente- Juro que todavía no hice nada, recién entro.

-Que graciosa. Bueno, ya que estas de buen humor te presento a tus dos compañeras nuevas ¿te molesta mostrarles el aula? Seguro que no, en unos minutos estoy pasando lista, no te escapes. -ensimismada en unos papeles y sin dejarla contestar se fue.

-Bueno… -contestó a pesar que no la iba a oír y las chicas sonrieron.

-Soy Juliette. 

-Y yo Nina. -se presentaron, Juliette era de cabello castaño lacio con ojos marrones y muy delgada, Nina era pelirroja con rizos ensortijados de ojos muy negros, era de las tres la más alta siendo Amina la más bajita.

-Amina, pero creo que ya lo escucharon. ¿Vamos? -"seguro se van a hacer amigas de Estefanía y las otras estúpidas" pensó ya que todas siempre querían juntarse con ellas.

-Si, vamos. -mientras subían las escaleras las miro de reojo y le parecieron buenas chicas después de todo.

-Es acá. -dijo al llegar y fue directo a sentarse al fondo. No vio que ambas acabaron por sentarse una a su lado y otra al frente. 

-Espero que no te moleste si…

-¡Tenemos compañeras nuevas! -llegó uno de sus compañeros silbandolas.

-Y se juntan conmigo así que no jodas que no tengo paciencia. -si, podría decirse que no tenía muchas amistades por su fuerte y mal carácter pero eso mismo y sin saberlo le hizo ganar dos de las mejores.
 Durante el recreo hablaron y se contaron sus historias de manera superficial como de dónde venían y esas cosas, resultó ser que Nina era igual de solitaria que Amina y Juliette tenía una amiga y dos amigos que la  iban a visitar cuando podían o iba ella. Ese día le fue agradable ir colegio, solo esperaba que siga así.
 Al llegar a su casa aún no había nadie, se preparó una merienda y se sentó a ver alguna película pero no paraba de mirar con indecisión el teléfono  "¿le escribo o no?" pensando en Marcus. 
 Ese mismo día, como desde que se encontró solo nuevamente, Marcus se internó en el trabajo y esta vez la molestia no era por sus compañeros o que sin importar todo lo que adelante siempre pareciera la misma cantidad de trabajo, tampoco le interesaba salir con Carla, sentía que le faltaba algo, provocando que éste en modo automático. El regreso a casa no prometía nada más que una cena a descongelar y todo igual que como lo había dejado, cosa que hasta el año anterior no le había molestado más bien le gustaba. Así que para evitar pensar en ciertas cosas trabajaba más, aunque las terminaba pensando igual o como en ese momento que le sonó el teléfono, llamándola con telepatía.

A: "-¿Estás ocupado?" 

M: "-Trabajo."

A: "-¿Que no habías salido ya?🤔"

M: "-Trabajo en casa."

A: "-Bueno entonces no te interrumpo y veo que hago."

M: "-¿Estabas aburrida?"

A: "-No, pero te extraño mucho"

M: "-Ya se te va a pasar."

A: "-Si no se me pasó en años ahora menos"

M: "-¿Años?"

A: "-Si"

M: "-Tenemos que hablar de eso."

A: "-Pero no por teléfono"

 Él quería escribirle y decirle tantas cosas pero se decía así mismo que no porque estaba mal, entonces ya no se pudo concentrar en nada más que leer y releer esos chats de whatsapp. 

Deseos ProhibidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora