Diario de un alma vacía.

20 de mayo de 2021

Inútil.
Si me preguntan que cómo me resumo en una palabra voy a decir: inútil.

No entiendo mi propósito en la vida, no entiendo porqué trabajo y lucho por mis sueños si de todas maneras no estoy segura si voy a morir en el intento.

Pienso. De nuevo pienso en mil cosas y a la vez en nada. Me pongo paranoica y no sé cuál es la razón.

No hay a dónde huir, porque de lo que quiero escapar siempre va conmigo, a todo sitio, a todo lugar, a donde vaya...siempre va dentro de mi cabeza.

He vuelto a pensar en ello, a vuelto a decir en voz alta qué tal vez estaría mejor m...

Pero ahora, no me atrevo a escribirlo.

Tengo miedo de morir, tengo miedo de vivir. Tengo muchísimo miedo.

¿Qué soy? ¿Cómo soy? ¿Para qué soy?...

No lo entiendo.

Últimamente me golpeo la cabeza para intentar arreglarme, lo gracioso es que luego de que pasa la crisis y entro en razón, caigo en cuenta que sólo me estoy dañando más. Pero de todas formas vuelvo a hacerlo.

Quizá mi cerebro recuerda el televisor viejo que tenían mis padres en casa cuando era pequeña, ese que se arreglaba dando un par de palmaditas en la parte superior. Desearía ser uno de esos televisores. Pero ni a golpes me arreglo.

No estoy segura de si estoy mejor o peor de lo que he estado antes, porque cuando paso 1, 2 y hasta 3 semanas sin crisis, cuando miro atrás se me hacen taaaaan lejanas. Y aveces sólo deseo que cada vez que mire atrás se me hagan aún más lejanas, pero desafortunadamente y como ya es costumbre, cuando me atrevo a echar un vistazo atrás, es porque una nueva crisis llegó.

¿Cuánto demoran las cicatrices en sanar? Me pregunto una y mil veces.

¿Qué tan herida estoy cómo para que no sane?

¿Por qué tengo heridas que no estoy segura de qué carajo sean?

Hoy no me repetí que me odiaba muchas veces, porque mi boca supo pastosa, se hastió de tanto decirlo. Mi cerebro buscó sinónimos "Eres una inútil", fue lo que alcancé a procesar.