Hoy las cosas salieron mucho mejor, llegué con mas seguridad, sinceramente no sé de dónde la saqué, pero todo estuvo mucho mejor, pude hablar con otras personas y no sentirme incómoda, incluso pude hablar y leer frente a toda la gente que había en el salón, no tuve miedo, que raro; receso de nuevo, esta vez unas chicas se sentaron conmigo y conversamos, de nuevo nada de nervios, todo bien, hasta ahora.
Volvimos al salón, cambiamos de puestos, atrás mío había un muchacho, mierda, odio que alguien me llame la atención, todo el tiempo estuve distraída por su maldita culpa. Al lado mío se sentaron las chicas con las que comí en el receso y al otro lado unos chicos muy graciosos, sus comentarios nos hacían reír a todos, excepto al muchacho, es muy serio, se parece en ciertos aspectos a mi, creo que es lindo...olvidenlo, no lo es, no me parece nada lindo, me fastidia su amargura, mejor me concentro en mí.
Me di cuenta hace poco que algo volvió a mí, mi alegría, hace mucho no sentía felicidad propia, emoción, hoy lo tuve, eso me hace sentir mejor, quizá todo mejore.
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Diario de un alma vacía.
Teen FictionTengo 18 años, soy una puta mierda, escribir tranquiliza mis demonios, así que decidí crear un diario para contarle a mucha gente lo que se siente vivir en conflicto consigo mismo.
