Slark y los tesoros de Skadi

Capítulo 6: Rememoración

Narración: Slark

La verdad, desde pequeño fui un niño con muchas esperanzas, a pesar de ser huérfano y tener a medio mundo en contra mía, soñaba llegar a aquel momento en que no tenga que trabajar 1 día y así poder disfrutarlo, esa era mi mayor ambición...
- ¡Corran, son los Leviatanes! -
Sin embargo, el destino nunca es preciso, que tontearía pensar que todo podía cambiar en un solo día...
- ¡Nosotros acabar con Slithereen! -
 Justo ese día unos amigos vinieron de visita, querían que les regalemos nuestras vidas...
- ¡Rápido Slark, salgamos de aquí! -
Tenia un amigo, un amigo especial y juntos tratamos de huir, él logró hacerlo a tiempo antes de que se forme un magnifico caos, a diferencia de mí; ahora puedo matar a cualquiera de esos sujetos sin problema, pero en esos tiempos, sin duda no duraría ni un minuto...
- ¡Empujen a los Leviatanos! -
Hasta que lo vi a él, destaca esa p**a cicatriz que tenía, pasaba por su ojo derecho pero este no estaba dañado, en fin, un maldito soldado élite de la élite; pero eso no elimino mis preocupaciones, tenia que ir a por alguna arma, y cerca había una tienda de dagas que había sido al parecer asaltado porque estaba hecha pedazos, estaba apunto de llegar hasta que me acorralaron...
- ¡Pez grande matar a Pez pequeño! -
- ¡Cuidado chico! -
Iba a morir de seguro, pero ese sujeto me salvo el pellejo, me asombro, y yo no era usualmente asombrado, en especial por el tipo de ser vivo que resulto ser el desgraciado, cogí la daga, tome un ligero descanso tratando de calmarme...
- ¡Darrrhhh! -
Pero no había tiempo, nuestro querido salvador no era invencible, y eso lo demostró ese gigante cabeza hueca, lo había desarmado con un buen combo de movimientos; podía simplemente irme y asegurar mi supervivencia, pero era un mocoso en esos momentos, y todavía creía en la estúpida justicia...
- ¡Mocoso mal nacido! -
Ja, tal vez podía con uno de nosotros, pero al enfrentarnos a ambos al mismo tiempo, el estúpido Leviatan ya no podía hacer nada, de hecho fui muy agradable verlo caer derrotado, luego de que mandamos al otro mundo al idiota, un cuerno sonó, terminando la fiesta...
-Bien hecho chico, tienes un buen manejo de la daga, dime, ¿cuál es tu nombre?-
-Slark, me llamo Slark, ¿y usted?-
-Rohan, Rohan Sliten-
Rohan, si, así se llamaba, Rohan Sliten con apellido y todo, ambos nos llevamos muy bien, nada mejor que hacer una amistad luego de acabar con un maldito enemigo poderoso...
-Toma- Rohan le dio un poco de oro -Cómprate esa daga, te servirá mucho, incluso tal vez no solo a ti-
Y después fue cuando el muy tarado decidió darme un objetivo además de la mera supervivencia, ser un maldito protector como él, solo que yo sería mucho más genial...si...ese...era...era mi objetivo...

Narración Normal

Slark tenia la vista hacia arriba, recordando a gusto esos momentos...
- Asi que, fuiste tú -
Scoped habló, mirando con nostalgia también hacia la nada...
- El capitán Rohan, un gran hombre, y si la verdad, a veces parecía un salvador poderoso, aunque se metía en muchos problemas al ayudar mucho - Scoped dio una sonrisa ligera aunque nadie más lo supiera
- ¿Así que fue tu capitán? - preguntó Slark
- Si, de hecho el mejor capitán que he tenido - Scoped saco un collar extraño - su frase era simple, justicia y disciplina; era rígido en sus ordenes, sin embargo, jamás fue injusto en sus castigos y si alguna vez lo ha sido y lo ha sabido, siempre pedía disculpas, sin importarle si el afectado era más débil o más fuerte que él -
- Je, que irónico, el Rastreador Nocturno soñando con ser un guardia - habló Sludirán
- Si no lo oyera de su boca, nunca lo creería - dijo Hosben
De pronto Scoped volteo y lanzó una mirada hacia el Rastreador Nocturno, era una que exigía respuestas, el exguardia vio la similitud entre el chico de antaño y el criminal que ahora tenía en frente...
 - Yo te vi, vi el momento en que te dio la daga, te la compro y recuerdo muy bien lo que te dijo, entonces ahora respóndeme, ¿cómo es que terminaste así? -
Slark dio un suspiro triste, acaricio la daga que Rohan le había comprado, los recuerdos dolorosos ahora llegaron a su mente y a su corazón...

Narración: Slark

Después del asunto de Rohan la vida seguía igual, je, seguimos buscando comida en los basureros, Acefin le gustaba en especial aquellos que sean dulces...
- Vamos Slark, deja eso de lado -
La verdad, ya estaría muerto hace mucho tiempo de no ser por ese bastardo, siempre me cuidaba la espalda...
-Oye cuidado por donde caminas-
-Lo siento, casi nos vamos al vacío-
-Uff, ten cuidado la próxima vez
Siempre preocupándose por mi, siempre arriesgándose por mi, Creo que además de amigo...
-Come Slark-
-¿Eh?, pero Acefin, tú no has comido-
-No te preocupes, anda apura y come-
Él era como un hermano para mí..., pero todo se fue al diablo cuando vino ese maldito...
- Lo siento chico -
Una rata ladrona tenia un gran parecido conmigo, y para librarse del delito me lanzo su mercancía...
- ¡Ahh!, ¡ya te tengo! -
- ¡Espere, esto es una...! - 
- ¡Ruahhh! -
Un guardia lo estaba persiguiendo, y verme creyó que era yo, no podíamos razonar con él, su furia y odio hacían sus oídos sordos, su ofensiva siguió, solo quedaba una opción, él o yo, estaba a punto de lanzarme y cometer mi primer asesinato..., pero me detuve..., me detuve por lo que creía correcto...
- ¡Acefin!, ¡NOOOOOOO! - 
- Slark..., sobrevive en este...mundo desastroso, has lo...que yo no...pude hacer, ...debes...sobrevivir...- 
Y a cambio, sacrifique a quien más quería en este mundo de m****a...
- Chico..., lo siento...de verdad lo siento - 
- ¡RAAAAHHHHHH! - 
Y sin darme cuenta me deje llevar por el deseo de la venganza, mis sueños y esperanzas nuevas me las dio Rohan, pero las bases de mi vida se me fueron enseñadas por las calles y Acefin...
-¡MUEREEEEE!-
-Ahhh...ahhh-
-¡EEYAAAHHHHH!-
Y sin las bases...los sueños y esperanzas se hacen pedazos de cristal cayendo hacia un abismo a toda velocidad, cuando lleguen al suelo...
- Ahhh...ahhh...ahh, ehhh -
-¡Huyamos, es un asesino!-
- ¡Llamen a la Guardia Slithereen, nos matara a todos! -
...se harán pedazos y solo quedará pura basura..., tal y como quedaron los míos, pero...es en esos momentos en que se te presentan dos oportunidades, una puedes terminar con tu existencia, o si no quieres rendirte, seguir adelante, y con nuevas bases...
"Slark..., sobrevive en este...mundo desastroso, has lo...que yo no...pude hacer, ...debes...sobrevivir..."
Destruir aquellas molestos inconvenientes..., los sueños pueden ser los mismos...siempre y cuando no choquen con tus bases..., por lo tanto querer ser guardia cuando sabes que te están buscando y si te sentencian será casi imposible conseguir ese tipo de trabajo debido a los antecedentes, así que solo me quedo un objetivo...reunir dinero y salir de esta pordiosea situación en la que estaba...
-Es simple, recuerdas que en Crey tenemos deportes sangrientos, verdad ¿no?-
-¡Wow, el discípulo de Hanzo esta peleando, miren todos!-
El coliseo me lo dio todo, una vida nueva y por fin pude cumplir mi primer sueño, pro primera vez en la vida, no trabaje en nada por un día, y comí y dormí tranquilo; era la mejor vida que he tenido, mucho dinero, mucha fama, ¿qué podía salir mal?, pues muchas cosas, la primera, disminución de salarios...
-Bueno, es que...nuestros ingresos han bajado mucho, y tendremos que reducir los premios en un 40%-
-¡¿Qué fue lo que dijo?!-
La segunda, mi avaricia desmedida...
-Para solucionar el problema...alguien debe de meterse en el contrabando, y...hacer el trabajo sucio...-
-Yo ire...-
La tercera, una gran batalla increíble...
-¡Maldito guardia!-
-¡Maldito ladrón!-
La cuarta, un amor imposible...
-No escuches a los críticos, me encanta tu voz, sirena-
-Gracias, eres el único que me ha dicho tales palabras, solamente espero que te rectifiques-
Y el remate de todo, corrupción...
-Te despidieron de la arena, ya no eres un luchador, sino un participante opcional, puedes participar, pero solo una vez por semana, y si ganas te darán la mitad de lo que deberías ganar-
-Te timaron mientras hacías el contrabando, y con corrupción ahora te pusieron deudas, dime ahora, ¿qué es lo que te queda?-
El resto es historia, asesinatos, matanzas, secuestros; un huérfano con sueños utópicos, convertido por accidente en asesino; tratando de encontrar otro camino, eludiendo aquel que me incitaba el crimen, levantándome poco a poco en una nueva vida y por culpa de mi avaricia caí de nuevo hacia el precipicio del delito y la inmundicia; solo que esta vez, cuando me volví a levantar de ese maldito hoyo, mi camino se volvió en un recorrido oscuro y hediondo, y como todos saben..., una vez que entras...salir es improbable, y yo...ya estoy muy al fondo...