𝑷𝑬𝑹𝑹𝑰𝑻𝑶 𝑷𝑬𝑹𝑫𝑰𝑫𝑶 ᴥ︎︎︎ 𝐕𝐌𝐈𝐍

19 huellitas.

En un principio parecían no tener algún rumbo o destino fijo, o al menos así lo veían los acompañantes, ya que a los recién encontrados no les importaba mucho hacia donde se dirigían con tal de que el espacio fuera agradable para compartir y caminar juntos (cosa que no era difícil, pues, la estaban pasando bien en compañía del otros) pero para los chicos, era importante conseguir un lugar estable donde poder detenerse. Sí, en un principio tanto Jihyo como Yuqi habían planeado todo meticulosamente, pero ambos eran demasiado ansiosos. A penas se conocieron, dieron con la chispa y olvidaron el plan que ambos tenían individualmente, por lo que los demás tuvieron que colocarse de acuerdo para hacer una parada en un pequeño parque al aire libre que quedaba algo alejado del sitio de encuentro, pero no demasiado.

Ella y él compartían muchas cosas, de vez en cuando (y con frecuencia) se escuchaban las carcajadas de Yuqi y las sonrisas penosas de él; incluían a los demás, y fue cuando Yuqi y Taehyung contaron una anécdota de hace años mientras que Yoongi se unía, que comenzaron a platicar entre todos. Inclusive Jimin hacia uno que otro comentario, debido a la integración tan sencilla que le daba aquél pequeño grupito. Si, él pensaba que sería terriblemente incómodo permanecer mucho tiempo ahí, pero tenía que admitir que eran mucho más agradables de lo que parecían a lo lejos. En especial el chico pelinegro. Taehyung.

Su amigo era alguien interesante, también. Le daba la impresión de ser alguien que había pasado por mucho, por lo que sus palabras tal vez, no eran soltadas a la ligera, y eso le parecía increíblemente interesante. Y por otro lado, estaba Taehyung. El chico de la galería al que le coqueteó. Mirándolo discretamente por un rato se dió cuenta de que su forma de hablar y expresarse eran cálidas, a su vez agraciadas, parecía alguien confortable. Enigmático, interesante, elegante (en la medida de lo posible, si omitía las groserías que a veces se le escapaban hablando con el otro) y como un demonio, lindo.

Sí, llámenlo como quieran, pero era algo notable y que Jimin no podría pasar por alto. Como tal, no se consideraba totalmente heterosexual, de hecho, solían confundir su orientación, definiéndola a su antojo solamente por los rasgos físicos de su persona. Cosa que a Jimin realmente le parecía molesta, porque no le gustaba que alguien más definiera lo que era y lo que no cuando el único con ese derecho era él mismo. Así que se podía decir, que los hombres y las mujeres le gustaban por igual.

Inevitablemente en el fondo, por más que la estuviera pasando bien, había un pequeño dolor que reposaba. No desapareció, solo estaba ahí. Llenaba los momentos de silencio y se esparcia. Jimin continuaba con un desgano constante y a pesar de que se esforzara y lograra distraerse, sus ojos demostraban su verdadero estado, tenues, no tan expresivos.

Comenzó a ponerse ansioso de pronto, pero como si el destino hubiese adivinado hicieron otra parada, esta vez en una pequeña pizzería. Como eran cinco tuvo que haber una silla más cerca de la otra para que nadie quedara por fuera, y así fue. Yuqi y Jihyo quedaron frente a frente, del otro lado estaban Yoongi y Taehyung. Como era de esperarse, Jimin se quedó con la silla extra, por lo que ahora estaba en la esquina de la mesa cerca de la silla del pelinegro que quería ignorar.

Unos murmullos a su lado le hicieron desconcentrarse de lo que pasaba por su mente en ese momento. Taehyung reía con lo que le parecían atisbos de vergüenza mientras que Yoongi le daba una palmada en el hombro, o eso vió antes de notar como el más alto se inclinaba.

Oh, no.

— Hey. — Lo llama casi que susurrando, y eso a Jimin le hace reír sin querer, así que responde de la misma manera.

— Taehyung ¿No?

— Si. — agacha la cabeza, inclinándose dubitativo— ¿Te está gustando la salida?