Tú Sonrisa - Emiliaco.

Después de la Declaración.

Ya casi el Sol estaba por ocultarse eran casi las seis de la tarde y la reciente parejita estaba recogiendo sus cosas para ir en marcha a sus casas.

Emilio no paraba de mirar a Joaquín se sentía muy bien, esa sensación cálida en el pecho y las mariposas en el estómago lo hacían feliz porque sabía cuánto le gustaba Joaquín. De estar persiguiéndolo a ser novios, quien lo diría... bueno el siempre lo imaginaba al principio inconscientemente pero luego se ponía a pensar todos los días, aveces se decía que estaba loco, y si, talvez era real estaba loco por el chico de Sonrisa Bonita, más de lo que quería admitir.

Y Joaquín... Joaquín no sabía que hacer con el remolino de emociones, estaba asustado, feliz... tenia pensamientos encontrados pero hacía lo posible por desaparecerlos, el no quería tener malos pensamientos apenas comenzaban la relación y el no permitiría que el mismo con sus pensamientos negativos ni nadie más le quite la felicidad que siente ahora mismo con Emilio, su novio.

Caminaban por el sendero que llevaba al parqueo donde estaba el auto del más alto, en silencio, pero no uno incómodo sino uno donde se podía respirar paz y tranquilidad.

Se miraban de reojo de vez en cuando haciendo que los dos se sonríen, apenas eran unos novatos en esto

Ya en el auto Emilio pido arrancar e ir hacia su destino.

-¿Te gusto esta tarde? -pregunto Emilio con la mirada fija en el camino-

-Si, fue hermoso gracias, Milio -respondio Joaquín con una sonrisa-

-Que bueno que te haya gustado. Me esforcé mucho para pedirte que fueras mi novio pero te me adelantaste.

-Joaquin soltó una leve risa- Es que te estabas tardando mucho en decirlo, los dos ya sabíamos que nos gustamos entonces para que tanto rodeo.

Emilio lo miró por un segundo, para luego tomar la mano de Joaco suavemente y entrelazar sus manos.

El chico a su lado miró con sorpresa la acción pero dejó su mano. "Se siente cálido" fue lo que pensó.

[...]

-Mírame -dijo el hombre- ¡Mirame carajo!

La indefensa rubia de ojos azules volteó a verle con miedo. Tenia mucho miedo, de el y... de lo que podría pasar...

-Quien era ese tipo eh?! -la empujó ¡Responde maldita sea! Dime, ¿Quien era ese tipo? Dime que hacia aquí.

-Ya te lo dije amor, es s-solo un amigo.

La chica tartamudeo. Y miro con miedo al chico frente a ella

-Esperas que me crea eso -rio torcido- ¡Dime la verdad! ¿Me engañas cierto? ¡¿Cierto?!

La agarro de la muñeca y la acerco a él con mirada amenazadora.

-Ya te lo dije es solo un amigo Andy... y-yo no me atrevería a hacerte eso p-por qué te a-amo mucho bebé.

Ella lo agarró del rostro y se acercó lenta y cuidadosamente, lo besó.

-Mas te vale, por qué si no sabes lo que te espera ¿verdad?

-Si, no te preocupe Andy...

El chico la agarró con fuerza y la besó salvajemente.

Y la verdad ella no amaba a Andrés le tenía miedo, por eso no se alejaba por él por miedo...

Ella no tenía a nadie, sus padres nunca estaban y no tenía amigos, simplemente Karla se sentía sola..

[...]

-Mamá, cuando llega Joaco hace un mundo que debería estar aquí-Se quejó Renata

-Ay ya Ren, me pidió permiso para salir con un amigo y yo se lo di, sus calificaciones mejoran, además ya está un poco grande para como para pedirme permiso. -Respondio Elizabeth en la cocina-

-No es Justo el no tiene que pedir permiso para salir pero yo sí

-Tranquila Ren, Tu eres mi bebé todavía te faltan algunos años, no quieras escaparte antes de tiempo eh-la apunto con un cucharón y río-

-Esta bien ma.

-Oye dile a tu padre que baje a cenar, que ya está lista la comida porfavor.

-¡Papá dice mamá que bajes a cenar!- grito Renata hacia las escaleras.

-Eso lo hubiera hecho yo Renata- La miró un poco molesta

-Oops

-¡Aqui estoy listo para comer! Huele delicioso. -bajo Uberto-

-Gracias, vayan y siéntense.

Uberto se va a sentar y Eli a la cocina mientras que Ren oye un carro estacionarse y va a ver por la ventana.

-¡Mamá Joaco llegó! Y con el chico uh

-Bueno yo ya me senté y no me voy a parar hasta terminar de comer, ¡mejor deja de estar husmeando y siéntate niña!

-Okay, okay.

Del otro lado de la puerta afuera en el auto se encontraba la reciente pareja.

-Gracias Bonito por aceptar esta salida, me la pasé muy bien contigo -voltea a ver a Joaco a su lado-

-Gracias a ti por invitarme Milio, fue increíble enserio, quisiera más momentos así- lo miro apenado.

-Claro solo dímelo y estaré ahí, novio.

Joaco se sonrojó, a pesar de fue él el que se le declaró ahora estaba nervioso

Se quedaron unos segundos en silencio hasta que Emilio decidió romperlo.

-Sabes Joaco, eres muy hermoso, me gusta todo de ti,

Se acercó a él y acarició su rostro con sus dedos hasta llegar hasta sus labios, los cuales acaricio y admiró, eran rosas y carnosos. Quería probarlos otra vez por última vez en el día.

Miro a los ojos a Joaquín como señal de permiso a lo cual Joaquín asintió despacio, se acercó a Joaquín y probó sus labios otra vez. Joaquín sentía que iba a desvanecerse en ese mismo instante, le siguio el beso lentamente, sin prisas, solo disfrutando de la calidez de los labios.

Se separaron cuando el calor los inundó y Se sonrieron .

-Bueno Milio ya es hora de irme.

-Esta bien- le sonrió.

Joaquín se bajo del auto y cerró la puerta de este, se paró en la ventana.

-Si puedes, avísame cuando llegues a casa.

-Okay así lo haré Bonito.

Joaco asintió y se fue casi corriendo dentro de su casa, cuando entró Emilio arrancó con destino hacia la suya, con una sonrisa plasmada en el rostro

Joaquín camino hasta el Comedor para saludar a su familia.

-¡Hola! ¿como pasaron el día, Bien?

-Bien, pero veo que a ti te fue muy bien ¿Y esa Sonrisa Tontito? -pregunto Renata curiosa.

-¡Nada! Vengo en un momento - y salió Corriendo.

-¿Que paso? -Pregunto Uberto confundido ante la risa de su esposa e hija-

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Este capítulo lo quise hacer romántico pero creo que no me salió tan bien como quería, pero aún así no me desagrada.

¡Gracias por todos los votos y comentarios!