Teme's Text

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La alianza Yongheng se conformaba de  un enorme territorio montañoso, con las familias Yamanaka, Nara y Akimichi en control. El territorio estaba relativamente lejos del reino Xuanwo, pero con el uso de sus formas espirituales, pensaron que serían mínimo tres días de viaje. Ambos empacaron algunas cosas en su espacio espiritual¹, se despidieron de sus respectivas familias y salieron.

Imagina esto: vas caminando por una calle ancha, con gente moviéndose de un lado a otro, mirando curiosa las tiendas a los lados de la calle con toda clase de artesanías y comidas a la venta. Entre la muchedumbre, ves acercarse a dos hombres. El más alto de ellos tiene una cabellera rubia desordenada, un par de grandes azules ojos que dejan mal a los cielos y una sonrisa tan encantadora que podría derretir el corazón de un tirano. Su traje rojo salmón destaca su curvilínea figura con una cintura delgada. Sus movimientos son elegantes, destacando su procedencia noble. A su lado, se encuentra un hombre de menor estatura pero no de menor belleza. Sus cabellos azabaches están peinados detrás de sus orejas, siendo revueltos por la brisa. Un par de profundos ojos oscuros decoran su esbelto rostro, un contraste casi perfecto entre oscuridad y palidez. Su traje azul oscuro destaca sus fuertes músculos pero delgadas extremidades. Tiene una atmósfera noble con cada paso que da, y aunque no hay sonrisa en sus delgados labios, su rostro es gentil cuando mira a la persona a su lado. Así es como Naruto y Sasuke llamaron la atención con su sola presencia.

Naruto había nacido, crecido y vivido mayormente escondido en las tierras privadas de su familia, pareciendo completamente ignorante hacia los asuntos externos cuando en realidad lo sabía todo, desde las disputas internas por el trono en el reino de Bowu hasta la infidelidad de la esposa de un ministro. Por eso su aparición en el exterior causó que muchas personas especularan sobre sus motivos.

Por otro lado, Sasuke era, en ojos del público, la sombra de su hermano mayor. Itachi siempre había destacado más que él, pero ambos eran igualmente favorecidos por sus padres. Fue por un asunto entre él y su hermano que finalmente, Sasuke se volvió en el aparente heredero al trono. Nadie sabe qué pasó realmente, pero repentinamente, Itachi anunció públicamente que renunciaba a su derecho de heredar el trono pero que de igual forma dedicaría su vida a su reino. Con la nueva presión en sus hombros, Sasuke empezó a salir menos con temor a dañar su imagen, solo en contadas excepciones asistió a eventos sociales no obligatorios. Por eso, la gente empezó a rumorear cuando abandonó la seguridad de su palacio para salir a "pasear" con el príncipe de otro reino.

Los rumores son como una peste. Con una simple cosa puede iniciarse y se esparse fácilmente, siendo difícil el poder detenerla. La gente decía que el príncipe Naruto ya estaba en edad de casarse, pero en vez de ir a conocer a las princesas Senjus, salía con el príncipe Uchiha, ¿en qué estaba pensando?

—La gente aburrida realmente piensa en demasiadas cosas, ah —suspiró Naruto al oír los murmullos a su espalda, su audición le permitía escuchar a un extenso rango si es que quería y aunque le gustaba llamar la atención, le dolía la cabeza de solo escuchar su nombre salir de innumerables y desconocidas bocas.

Estaban en una habitación privada de un hotel, lo suficiente amplia para albergar a los dos cómodamente. Estaban sentados en una mesa redonda de madera, comiendo nueces mientras conversaban.

—¿Qué harás respecto al pacto matrimonial entre tú familia y los Senju? —Sasuke lo miró con ojos dudosos. No quería arruinar la buena relación que ambas familias habían mantenido durante milenios, pero tampoco estaba dispuesto a dejar ir a Naruto.

—Sasuke Uchiha, prefiero mil veces morir que vivir otra vida sin ti.

Sasuke miró aquel par de ojos que siempre lo dejaban embobado y la sinceridad en estos derritieron cualquier cubierta que hubiera tenido. La culpabilidad perforó su pecho dolorosamente, recordándole lo bastardo que había sido al irse sin decir nada.

—Lo siento por haberme ido, Naruto, pensé que podría regresar a tiempo.. —agachó la cabeza, recogiendo con manos temblorosas las cáscaras de las nueces que habían estado comiendo. Pero fue detenido por una mano cálida que lo hizo soltar las cáscaras y entrelazar sus dedos con suavidad.

—Agradezcamos que el destino decidió darnos esta oportunidad para estar juntos, Sasuke —sonrió gentilmente mientras tomaba las manos de su pareja en las suyas, dejando un beso en el dorso de ambas antes de murmurar— Eres mi alma gemela, estamos destinado a siempre acabar juntos sin importar las calamidades.

—¿Qué tal si no lo soy?, ¿qué tal si no estamos destinados a estar... juntos? —sus labios temblaron al pronunciar la última palabra. Estaban tan cerca que podía sentir el cálido aliento del rubio en su frente, pero a la vez se sentía tan distante, tan lejos uno del otro y temía que esta distancia nunca pudiera ser acortada.

—Entonces iré en contra de destino para estar contigo. Incluso si el cielo quiere destrozar mi cuerpo y espíritu con relámpagos, lo soportaré si eso me permite renacer a tu lado.

Con la decisión de su tono, Sasuke pensó en que este chico era un cabeza hueca pero a la vez, su corazón se enterneció, dejándose abrazar por la calidez del otro.

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1. Espacio espiritual: Es como un inventario extra dentro de un objeto espiritual, cuyo tamaño puede variar desde un pequeño espacio de un metro hasta hectáreas completas.

Feliz mes del orgullo. 🏳️‍🌈❤️