✧One Shots•Dragon ball✧

•Black•

Créditos de la imagen a quien corresponda-
×Rusa×
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°

Black

Una brillante sonrisa se muestra en sus labios mientras observa de manera emocionada aquel sobre que juntos habíamos diseñado para las invitaciones de nuestra boda, ____ estaba contenta con el resultado de la chica que realizó nuestra petición, yo también estaba contento.

Estábamos a solo cuatro meses de nuestra celebración, finalmente teníamos las invitaciones en nuestras manos, solamente faltaba planear la cosa que más ansiaba...La luna de miel.

Habíamos llegado a un acuerdo finalmente, queríamos tener privacidad y si fuera posible, en una cabaña dentro del bosque. Hemos buscado varios, pero ninguno nos ha convencido.

—Fué un placer trabajar para ustedes—La Diseñadora hizo una inclinación hacia nosotros y nos entregó las 200 invitaciones que habíamos pedido, la ayudé con la caja que traía y finalmente nos despedimos.

—¿Quieres ir al bufette Dragón?—Mi prometida miró la hora en su móvil, faltaba poco para que la mejor barra de comida estuviera disponible, y era exactamente el tiempo en el que iríamos en el coche. Ella mostró sus dientes y asintió a mi propuesta—Pero antes pasaré a una cafetería, muero por un té verde frío—Estaba haciendo demasiado calor en Japón, realmente era insoportable.

Pasamos a la cafetería que pertenece a mi mejor amigo Zamasu, pedimos dos bebidas para llevar y puse en marcha el auto para ir al bufette, yo también moría de hambre.

•••

Mojo mis labios mientras ella posa delante de mi. Luce un pantalón recto color negro y una blusa de cuello cuadrado color roja, su vestimenta es común, pero es imposible no ponerme duro cuando la miro fijamente.

—¿Te gusta?—Pregunta aún cuando mi mirada lo dice todo, toma mi mentón y me hace verla a los ojos.—Mis ojos están acá—Señala con sus dedos, yo estaba perdido viendo sus pechos, no eran grandes, pero me hacían enloquecer.

—Preciosa, sabes que me encanta todo lo que vistas, aunque me gusta más cuando no llevas nada—Alzo mis cejas una y otra vez, lanzándole una mirada deseosa. Ella suelta una risa y besa mis labios rápidamente, ni siquiera me dió tiempo se cerrar los ojos cuando la noto alejarse.

—Hay que irnos, la cita con el chico de las decoraciones es en treinta minutos—Asintí a regañadientes cuando supe que ni siquiera me daría cinco minutos para divertirme, pero bueno, éste tipo de cosas eran muy importantes para ella, nuestra boda tenía que ser perfecta. Me levanto del sillón individual y caminamos hacia la puerta, tomo el pomo de la puerta y la abro para que ella pase primero.

—Hoy actúas muy cariñoso...—Inquirió achinando sus ojos mientras trataba de leer mi sucia mente. Abrí mis labios de manera ofendida.

—No es una actuación Preciosa, es real—Respondí orgullosamente colocando mi mano sobre mi pecho, era algo que ni yo mismo entendía, ___ ha doblegado éste corazón que creí que era negro. Ella soltó un chillido enternecido y me dió un beso, esta vez más largo que el de hace unos instantes. Sus labios eran tan deliciosos.

—¿Tenemos cita con alguien más?—Habían transcurrido dos meses más, así que en menos de siete semanas estaríamos oficialmente casados. Ella soltó una risa después de que rompiéramos el beso.

—Hoy no—Indicó, una sonrisa traviesa apareció en sus labios, hoy parece que es mi día de suerte.—Quiero que veamos lo de la luna de miel.