Rosas De Sangre

La chica en el cristal

Nuevamente estaba en clases luchando por no quedarme dormida. Había pasado mala noche por pensar en el asesino de Asía, aún no teníamos información sobre quienes la vieron ese trágico día.

La campana sonó sacándome de mis pensamientos.

Debía volver a mi dormitorio para dejar algunas cosas, Adam aún estaba en clases así que debía hacer tiempo mientras él terminaba su horario escolar.

-¡Iris!- escuché gritar a mis espaldas, vi a Amber correr en mi dirección con dos libros abrazados a su pecho fuertemente para evitar que se cayeran, detuve mi paso para esperarla, una vez que estuvo a mi lado deje que la pobre chica recuperara el aliento antes de siquiera continuar con su conversación.

-¿todo bien  Amber? corres como si te estuvieran persiguiendo- pregunte una vez que Amber se enderezo dispuesta a seguir hablando.

-llevo gritándote desde que saliste de tu clase- respondió mientras señalaba la dirección de la que venia. -no importa,... necesito un gran favor de tu parte- 

-encantada de ayudarte en lo que pueda Amber- respondí sin pensarlo dos veces, aun me sentía con la deuda de pagarle las mil veces que me cubrió del toque de queda de los últimos días cuando perdía la noción del tiempo por estar investigando la situación de la princesa muerta.

-necesito que esta noche me ayudes a patrullar los limites del bosque de los lamentos- me hablo casi en un susurro para evitar que los demás alumnos la escucharan y provocara el pánico -se ha detectado múltiples sombras en el bosque, no te pido que entres por que ni siquiera yo lo hare, pero pondremos unos talismanes para evitar visitas indeseadas en lo que se investiga la situación-

ahora movimientos extraños en el bosque, ¿podría alguien darme un respiro esta semana?, ni siquiera Adam me da un descanso de sus metidas de pata y sus malos chistes.

-esta bien- respondí luego de darme cuenta que me había quedado sumergida en mis pensamientos bajo la atenta mirada de Amber -te veo esta noche-

Y sin mas mi compañera de habitación se alejo de mi en dirección a su siguiente clase. Continúe con mi recorrido por los pasillos hacia mi dormitorio  compartido, abrí lentamente la puerta de mi habitación saltando del susto al ver quien estaba del otro lado de esta. El fantasma de Asia flotaba en medio de la habitación con el libro de la dama de oro en sus grises manos completamente concentrada en su lectura.

-!santo cielo Sia¡ casi me matas del susto- exclame al mismo tiempo que mi corazón brincaba de su lugar y obtenía la atención de Asia por completo. 

Su rostro se volvió uno de diversión al ver mi reacción, Asia cerro nuevamente el libro y ahora flotaba en dirección a la cama de Amber.

-lo siento Iris, no era mi intención casi matarte del susto- su voz sonaba divertida, parecía tratar de no reírse de mi reacción -lamento la intromisión en tu habitación, pero note que había estado llevando este libro a la sala del piano y me dio mucha curiosidad, asi que vine a leerlo un poco- elevo ligeramente el libro al que se refería.

Deje mis cosas en el escritorio en medio de las dos camas, Asia aun parecía querer continuar leyendo el libro, creo que le da curiosidad saber que han escrito sobre ella. No la culpo, antes de aquella clase con Valdor no sabía de su existencia y mucho menos de su importancia en esta casería.

-lo encontré en la biblioteca- explique mientras me sentaba en mi cama frente a ella -no había casi nada de ti y este fue el único libro que encontré acerca de tí y tu desaparición- señale el libro aun en sus manos el cual lo había vuelto a abrir en la pagina que se había quedado antes de mi grito al verla.

-era de esperarse- respondió -los vampiros se llevaron las pinturas y textos sobre la familia real antes de abandonar el castillo, supongo que dejaron este atrás por accidente, aunque es curioso- murmuro mientras continuaba leyendo los textos.

-¿qué es curioso?- pregunte.

Sia elevo levente su mirada del libro para verme y dos segundos después la devolvió al libro que ahora estaba abierto en sus piernas mientras lo sujetaba con una mano y con la otra pasaba las paginas.

-este libro explica muchos datos sobre mi y la familia real,... datos que nadie conocía, ni siquiera las personas de confianza a la familia, eran secretos entre nosotros- aseguró mientras aún trataba de de analizar el libro ¿Cómo llegaron aquí- murmuró más bien para ella.

-por desgracia para mí no lo dice todo- expliqué -no dice que sucedió con tu paradero después de tu desaparición, tu muerte o tan siquiera los sospechosos-

Asia me dio una sonrisa un tanto triste por no obtener las respuesta que le hubieran gustado.

La puerta de mi habitación fue tocada dos veces. Me tense al pensar que sería Amber, sin embargó me di cuenta que Amber no tocaría la puerta ya que está también es su habitación.

-¿Eres tú Adam?- pregunté pues no sé me ocurría quien más podría ser.

La puerta se abrió y dicho chico apareció con un rostro cansado.

-tuve un espantoso examen sorpresa de cálculo, que estoy seguro que no aprobare- dijo sin darse cuenta aún que Sia estaba aquí. Cerro la puerta y cuando estuvo en medio de las dos camas se percato de ella -Hola América- saludo obviamente sabiendo que había cambiado el nombre de Sia.

Asia elevó la mano levemente con una sonrisa en su rostro. El lado bueno es que Sia tiene en cuenta la personalidad de Adam y no se ofende por sus comentarios.

-no me sorprende que no vayas a aprobar ese examen- respondí volviendo a mirar a Asia quien al mismo tiempo regresaba su vista al libro -no hemos descubierto mucho, nuestra lista de sospechosos sigue en cero aun- hable poniendo al corriente a Adam sobre la investigación.

Sia parecía no perder la esperanza al seguir analizando el libro una y otra vez. Y entonces sucedió, Asia dio vuelta a la ultima pagina del libro topándose con un dibujo en la contraportada, esto la sorprendió tanto que se elevo provocando que el libro se deslizara de sus piernas directo al piso.

-ese dije- hablo en un murmullo. Adam y yo recogimos el libro para revisar a que se refería la chica fantasma. Era el dibujo de un especie de cruz con diferentes piedras y una serpiente enrollada en una de las puntas que conformaban la figura -ya lo había visto antes... estoy segura- seguía murmurando Asia mientras flotaba alejándose del libro y de nosotros con un rostro de sorpresa -fue lo ultimo que vi antes de morir- 

Una serie de imágenes surcaron los recuerdos de Asia provocando que su rostro se volviera aun mas de sorpresa -yo fui atacada... trate de defenderme, incluso trate de gritar pero fui silenciada, esa cruz era el colgante de quien me asesino estoy segura- dijo un poco alterada.

le entregue el libro a Adam para acercarme a Asia tratando de calmarla y que me diera hasta el ultimo detalle que recordaba. -¿recuerdas algo mas?, talvez un rostro, un color de ojos, una marca o si era una mujer o un hombre quien te ataco-

la habitación e quedo en silencio mientras Sia se perdía en sus recuerdos tratando de rescatar todo lo que podía llegarle a su cabeza aun mas confundida.

-creo que era un hombre, se vestía como uno- comenzó a hablar un poco bajo pero audible -no vi su rostro pero... recuerdo que él estaba llorando...-

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