Saint Simpson-Louds: Saga de Zeus

Capítulo XVIII

Capítulo XVIII: La Ofensiva Dríade

Aquel resplandor proveniente del Norte seguía aumentando a más no poder, revelando a los contrincantes que se hallaban peleando allí. Era como si el propio Sol estuviera aumentando su color y brillo, el Fuego que ardía en los corazones de la pelea, el aire que crepitaba y electrizaba, una poderosa oleada de parte de dos enemigos y de distintos "Planos", debido a sus poderes. Lincoln lo podía sentir, al igual que Alexander y los demás, pero no hubo tiempo para poder moverse de allí, ya que un relámpago iluminó el lugar y se pudo divisar una serie de figuras sombrías que los rodeaban por los pasos montañosos. Divisando a sus objetivos, cuales aves de presas parecían ser, la Diosa Eris de la Discordia había enviado a sus "Dríades" y "Ghost Saints" para repeler el avance y hacerles retroceder.

- ¿Así que han decidido aparecer, ratas asquerosas?.- Preguntó Jäger de Orión con un tono de burla en su voz, llevando a que Lori frunciera el ceño ante sus palabras emponzoñadas.

- Ugh, hasta sentí ganas de vomitar con oírte hablar, "amigo".- Le espetó la rubia de Wyvern.- ¿Acaso no tienen nada mejor qué hacer antes de molestarnos?.- Preguntó y eso no le importó al rival, quien se hizo tronar los nudillos.

- Qué malas palabras has escogido, Señorita. ¡"Ghost Saints", ataquen!.- Ordenó el Santo de Orión, provocando que una intensa batalla cobrara forma en ese lugar.

Lynn se hallaba buscando a cierta "Dríade" que la había atacado anteriormente, dejándole con unas ganas de cobrar venganza por esa afrenta. Una peli clara se hallaba allí, su vista quedó clavada como si de una presa se tratara y se preparó para desplegar sus Alas que llevaba en la Sapuris de la Arpía para, acto seguido, atacarla con sus garras y ofensivas. Sin embargo, la oponente no era ninguna tonta y con Layla y Patty respondieron al primer intento de asalto, atacando a la castaña por ambos flancos y provocando de que cayera al piso y rodara.

- ¿Así que vuelves a pelear contra mí después de la paliza que te di, Lynn de la Arpía?.- Preguntó la peli clara, quien pisoteaba a la deportista contra el suelo.

- Es una inútil, no vale la pena que la mates, hermana.- Apostilló Layla, quien la miraba despectivamente.

- Totalmente, ¿de qué nos servirá masacrarla cuando tenemos al Emperador Hades aquí?.- Preguntó Patty y le dio una patada en el estómago a la joven, provocando de que escupiera sangre contra las rocas y eso dibujó una sonrisa siniestra en Androktasia, la cual tomó a la muchacha y comenzó a golpearla repetidas veces.

Uno, dos, tres, cuatro, cinco, ¿qué clase de persona soportaba una tortura así?. La Armadura protegía a Lynn pero todo tenía un límite y el dolor comenzaba a viajar por todo su cuerpo, impidiéndole reaccionar al sentir sus huesos que, tarde o temprano, se quebrarían igual que un montón de palillos chinos. Layla y Patty se unieron a la paliza, azotándola contra el piso, dejando su huella por doquier y con ello un rastro de sangre entre las piedras.

- ¡LYNN!.- Gritó Lincoln, quien intentó ir en su ayuda pero Jäger de Orión le impidió avanzar.

- ¿Vas a algún lado, "conejo"?.- Preguntó aquel personaje arrogante y el chico desenfundó su Espada, trazando un arco que iba directo hacia el cuello pero éste lo detuvo.- ¡Wow, más despacio! ¿Acaso no te enseñaron tus padres a no jugar con cuchillos?.- Dijo con burla pero el joven se le lanzó encima.

- ¡NI TÚ NI NADIE ME VA A IMPEDIR SALVAR A MI HERMANA!.- Bramó y lo golpeó pero nada parecía surtir efecto. Con un rápido movimiento, Jäger se quitó a Lincoln de encima, pegando un salto en el aire y de ahí comenzaba a adquirir velocidad en su próximo movimiento.

- Je, qué valiente eres.- Mostró sus respetos y lo señaló.- Pero aún así no estás a mi altura, niño. Ahora, siente mi poder.- Advirtió y de ahí encendió su Cosmos al máximo, cayendo en dirección hacia su enemigo.- ¡"MEGATRON METEOR CRASH"!.- Exclamó y lanzó su ofensiva, la cual, tan parecida a la caída de una bomba, mandó a volar al albino por los aires.