Olivia y Adrian viven una relación a escondidas, pero ellos también tienen secretos que tanto ella como él esconden.
Mientras el padre de Olivia no la deja juntarse con ciertas personas, ella pone la actitud que su padre espera de parte de esta mism...
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-chicos, tengo una gran y excelente idea- dijo la profesora levantándose de su escritorio. -harán un trabajo en parejas, será un circuito eléctrico pero ocupo que tengan cuidado- «¿Disculpe, me lo dice a mi?, Porque yo cuidado no creo que vaya a tener pero si es en parejas tal vez deje que mi compañero lo haga por mi» -Pero esperen, yo formaré los equipos, empezamos- observó a todos en el salón y fue mencionando a cada uno hasta que sobré yo sola, como siempre, la última. -Olivia...- pensó, en mi mente estaba deseando que mejor lo hiziera sola aunque no creía que lo haría así que daría por reprobada la materia. -umh... ¡Si!, Con Alessandra y Adrián, creo que los tres son amigos ¿No? Bueno, no me importa, lo harán los tres y debe salir mejor que los de los demás así que hasta la próxima clase me lo entregaran, que es en dos días- «carajo, todos los trabajos difíciles me los hacen entregar rapido».
Todos comenzamos a salir de el lugar, me fui directo a mi casillero a dejar mis libros y salimos de la escuela. ¿Salimos? Si, salimos porque Alessandra y su primo el mesero me alcanzaron.
-¿Iremos a comer?- pregunto Alessa.
-no, tengo un infierno de tareas y trabajos que hacer, tal vez en umh... 1 mes y medio si- sonreí mirándola, ella solo se quedó boquiabierta.
-Olivia, nunca dijiste que tu padre era el señor Laurens- juntó las cejas el chico mirándome.
-nunca dijiste que trabajabas en ese restaurante- alzé los hombros contestado de la misma forma que le contesté cuando me lo dijo por primera vez. -¿Y como sabes que se apellida Laurens?- cuestioné.
-bueno, tu te apellidas Laurens y vamos en la misma clase- dejó una risa sarcástica y natural. -¿Que son esas personas de ti?-
-¿Cuáles? ¿Las que estaban cenando con nosotros?- pregunté.
-si, ¿Quienes son?- se puso al lado mío dejándome enmedio de ambos primos.
-no es de tu incumbencia- respondí cortante, el se quedó como Alessandra hace unos momentos -bueno ya, son los nuevos trabajadores de papá, por lo que me dijeron serán los más cercanos, ¡Incluso son mis vecinos!-
-carajo- susurró -oh ya veo- rió nervioso.
-¿Por qué?-
-solo preguntaba, se...se me hacían conocidos- titubeó.
-no lo sé, el chico era uno de los amigos de mi hermana, es un año mayor que yo-.
-uh, deja, y es muy guapo- dijo mi amiga comiendo una manzana que no supe de dónde la sacó.
-¿Cómo lo sabes?- le preguntó él.
-me mostró una foto Olivia de el- sonrió.
Se limitó a contestar con un simple "a".
-bien, te esperamos a las 7 de la noche en mi casa para hacer esa cosa- refiriéndose a ese proyecto de la maestra -puntual, traes gomitas- amenazó Alessa apuntándome con el dedo.
