Sana, sobreviviente de una guerra galáctica de hace dos mil años ahora busca venganza. Pero Jihyo estaría allí para evitar que eso sucediera
No permito adaptaciones sin mi consentimiento
Jihyo caminaba por las calles sin un aparente rumbo, estaba atardeciendo y tras su espalda solo iba acompañada de una mochila, junto con su blaster en la pistolera, y un cuchillo atado a su cintura
La única razón de que nadie la veía como una extraña, es que habitaba en su propio mundo, Ares
En todo caso, ¿Por qué una niña de catorce años estaba tan armada? Eso todos lo sabían en Ares, y no se molestaban en indagar
Simplemente se acercó a un puesto de comida, y contó el dinero que tenía. Poco, quien sabe cuanto tiempo estaba vagando, y las razones por las cuales aparentaba estar desterrada en su planeta natal
—Solo llevaré un par de verduras—Le dijo al vendedor, que atentamente recibió el dinero y comenzó a contar para lo que alcanzaría—¿Hay praderas cerca? ¿Algún lugar mas rural?—
—¿Qué tiene de malo la ciudad? ¿No te gusta nuestr...—El vendedor se quedó callado, pues había entendido que pasaba con Jihyo—Si sigues recto, tarde o temprano habrá naturaleza—
—Gracias—Murmuró, tomando la bolsa—Por favor, si la líder Park llega a esta zona, no le diga que estuve aquí—
—Conozco lo duro que es la iniciación, ver como una persona que te acogió a su casta y que ahora te busca para asesinarte siempre me pareció terrible—
—Mas terrible es para mi, pues la líder Park es mi madre—
Atónito, el vendedor se inclinó en su mostrador—No es común escuchar esas historias—
—Si sobrevivo a su cacería, podré ser aceptada de vuelta, es así la cultura Aresiana—
—Salvajes y libres—Suspiró, asintiendo con la cabeza y viendo hacia el fondo—Te invitaría a ocultarte en mi casa ¿Cuánto tiempo tienes antes de tus quince?—
—Mañana oficialmente tendré quince años, no necesito quedarme acá. Una noche mas y se acabará esta pesadilla—
Las castas, clanes, organizaciones, o como sea, provenientes de la cultura de Ares siempre tenían muchas cosas en común en cuanto a costumbres, entre eso, la conocida "Cacería"
Una tradición que constaba de exiliar a los jóvenes desde que cumplen catorce años, y luego la líder iría buscándolos por todo Ares, para asesinarlos, tradición que duraría hasta el amanecer de sus quince años. Incluso si eso implicaba asesinar a sus propios hijos
Jihyo era hija la ultima de dos iniciados
Y seguramente la que mas había durado exiliada. Esta era su ultima noche, con algo mas que suerte sobreviviría
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
