Capitulo 14: Caza

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Capítulo 14: Caza

(Gilbert)

En el Abismo me encontraba caminando, como siempre lo hacía en mis sueños. Estaba unido a este lugar. Todos los demonios lo estábamos. De hecho era nuestra cuna, y el lugar a donde iban nuestras almas después de muertas, para luego reencarnar con el poder de Gil, que revivía lo que ya no tenía vida. Gil y yo éramos los únicos que reencarnaban de forma natural, los demás reencarnaban gracias a mi hermano. Sospechaba que todos los demonios soñábamos con este lugar cada noche. Solo que nosotros nunca nos veíamos las caras. Nunca aparecíamos en el mismo lugar, ni podíamos vernos las caras en el Abismo durante los sueños. Todos menos Gil y yo. Al ser la misma persona acabábamos siempre en el mismo lugar. Además Gil era el señor del Abismo y podía encontrarse con quien quisiera.

Ahora mismo me encontraba deambulando entre todos los restos de lo que antaño fue un barrio de Iskeria. La verdad ya había pasado muchas veces por ahí, pero jamás lo reconocía. El paisaje siempre cambiaba. Todas las noches llegaba hasta allí y tendría que estar atrapado hasta que mi cuerpo se despertara. Por suerte había encontrado una manera de entretenerme durante el tiempo en el que estaba allí. Para pasar el rato mientras me despertaba, me dedicaba a buscar cinco puntos emblemáticos de aquél barrio. La fuente, el mecánico, el edificio de grafitis, el árbol grande y el portal del arco.

Deambulé por la dimensión en busca de aquellos objetos emblemáticos. Lo bueno es que siempre cambiaba todo de sitio, por lo que siempre resultaba interesante salir a buscarlos. Deambulé durante una o dos horas hasta que encontré el árbol. Lo consideraba emblemático porque era el más grande y alto entre los demás. Ahora solo me quedaban cuatro. En realidad era raro que encontrara los cinco antes de despertarme, por eso lograba matar el aburrimiento. Me detuve un momento para observar a mi alrededor en busca de algo.

-¿Puedes salir de tu escondite? Me pone nervioso que me sigas a escondidas.- una sombra apareció tímidamente desde un callejón. La miré fijamente. Por supuesto, era Gil. Este se acercaba tímidamente. Ya estaba más que acostumbrado a que me siguiera oculto en las sombras. La mayoría de veces lo ignoraba y seguía con mi tarea. De todas formas era inevitable que ambos acabáramos en el mismo lugar del Abismo. Aunque preferiría encontrarme con Luka, debía admitir que el hecho de que Gil me vigilara, a pesar de que me ponía un poco nervioso, me hacía sentir extrañamente seguro. Nuestra relación de hermanos era la cosa más rara del mundo.

El que era el "bueno" y el cariñoso, rechazaba o ignoraba a su otro hermano, y el que se supone que era el "malo" y el insensible, sentía un profundo afecto hacia el otro. ¿No se supone que debería ser al revés? Además, se supone que éramos enemigos en esta guerra, y que él deseaba matar a todos los que me rodeaban, o eso me dijo él. Pero es que su forma de actuar conmigo no coincidía con la de alguien que mataría a todos los que rodean a alguien. La verdad mi hermano parecía ser el típico personaje yandere de manga gore. Me encantaba el gore y había leído mucho sobre Yanderes: personas que en apariencia eran buenas cuando en realidad guardaban un lado oscuro y psicópata. Estas personas no dudaban en matar por la persona a la que amaban.

Esa persona era su único soporte emocional, y se sentían muy aferrados a ella. Su comportamiento era muy cambiante y tendía a padecer repentinos cambios de humor, especialmente en casos relacionados con las personas que le rodearan a esta o a su ser amado. Si en cualquier momento pensara que alguien intentara interponerse entre su ser amado, amenazarle, hacerle sufrir, o intentar arrebatárselo de su lado; este no duraría en deshacerse de él asesinándolo de la forma más cruel y sangrienta posible. Recordaba a una chica de uno de mis mangas favoritos. Esta era considerara como la reina yandere por ser el personaje de este género que más destacaba entre los demás. Recuerdo que mató a una chica solo porque su amado podría enamorarse de ella, y encima esa chica era lesbiana, y ella lo sabía, pero aun así la mató degollándola delante de su amado, y luego se comportaba con él como si no hubiera pasado nada.

Alma Oscura (Crónicas de la Orden. 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora