•Mi Ángel• ▪︎Invasión en las alturas/Tenkuu Shinpan▪︎

|•Capítulo 56•| El fin parte III

Es Franqui.

¡Corre!

¿Por qué?

Me levanté con dificultad del suelo, volví mi vista hacia el.
Presiento que este no es el mismo que entró al lago.

Este me pateó fuertemente.
Caí boca abajo, casi de cara contra el suelo.

¡No, no, no!

Sentí que se sentó en mi espalda bruscamente y luego me agarró fuerte y brutalmente del pelo, así levantando mi rostro.

¡Debes matarlo!

¿No dañaría a Franqui?

¡Joder! ¡Solo hazlo!

Este tomó mis manos y las colocó en mi espalda.
Me dolía el cuerpo, la cabeza..

-¡Franqui basta!- grité sin saber que hacer.

Este me volteó, poniéndome boca arriba y se volvió a sentar bruscamente en mi estómago.

Solté un gemido de dolor, todo se sentía tan real, estaba asustada.

Colocó sus manos en mi cuello, y lentamente me asfixiaba con fuerza.

Pude sacar mis manos de mi espalda, me dolían demasiado, seguro había dejado moretones, pero no, porque esto no es más que una ilusión mental.

El estaba enmascarado, traía en su espalda el francotirador, todo igual.

¿Qué hago? Pesa el doble que yo, es más fuerte y más rápido.. 

Pero... el solo es una ilusión, no es mi Franqui, ¿Cierto?

¡Si, si! El es su máscara, y no quiere que estés aquí, debes recordar eso, usa tu poder.

¿Tengo poderes o algo así?...

No puedo darte esa información, debes saberlo tú. 

Pero tu eres yo.

Exacto.

Comenzaba a respirar menos cada vez.

S-su abdomen..

¡NO ES MOMENTO PARA PRESTAR TU ATENCIÓN EN ESO! 

No, no.. Su abdomen, sangra.

PERO. Oh, es cierto.

E-Esta herido

Recuerda que no está así físicamente, osea, realmente.

Debo curarlo, debe dejar de sangrar.

Dirigí mis manos hasta su abdomen manchado de sangre, aunque parecía no haber cierta herida.

Este seguía ahorrándome, pero fue bajando la presión en sus manos al sentir mis manos en su abdomen.

Cerré los ojos, y sentí como si una corriente recorriera por mi cuerpo.
La sangre iba tornándose más clara, hasta quedar totalmente blanca como su camisa.

Este dejó de asfixiarme. Se quedó sobre mí, observándome toser.
Luego sube sus manos hasta mi rostro, y comienza a desabrochar mi.. ¿Máscara?

Pero, ¿En qué momento...?

Desabrochó lentamente mi máscara sin boca y me la quitó.

Mi máscara, de más cercana a Dios.

Luego alejó sus manos de mi rostro, e inclinó su cabeza, cabizbajo. 

Se acercó a mí, y entendí que era mi oportunidad para quitársela.
¿Qué pasaría después? No lo sé.

Rápidamente copié su acción de desabrochar la máscara, me costó un poco, pero se la quité y la lanzé a unos metros.

Vuelvo mi vista a su rostro, el cual estaba descubierto, a excepción de la sombra que producía su maldito sombrero negro.

¡DIOS, DIOS!

Se levantó sobre mi, y me estiró el brazo para poder levantarme.
No podía dejar de verlo, sus ojos resaltaban a pesar de la sombra de su sombrero que hacía difícil ver a detalles su rostro.

Ahora todo a mi alrededor comenzó a desaparecer.

-¿Qué sucede?-

Saldrás de su mente, lo lograste.

Mi cuerpo desnudo flotando en un aura oscura ya no me interesaba, pero volví  a sentir esa corriente extraña, fría y misteriosa.

Mis ojos se cerraban, podía sentir el sueño que inundaba en mi cabeza, el dolor corporal era inmenso, como si hubiera corrido por una hora seguida, sin tomar agua, y con una mochila pesada en mi espalda.

Antes de perder la conciencia, lo pude escuchar.

-Sabía que ibas a hacerlo, siempre confié en tí... Futura, esposa-

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Perdón perdón perdón por tardar!

Mis excusas no me justificarían, así que me esforzaré para no tardar tanto.

♡~Hasta el próximo capítulo~♡