CAPÍTULO 9-Dragones

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Estuve esperando en el dormitorio de Mattheo como me había dicho, pero pasaban los minutos y no llegaba. Les oía reírse y bromear desde la habitación, así que decidí acostarme en su cama hasta que viniese, cosa que fue un error ya que me quedé dormida enseguida.

En algún momento de la noche noté como alguien me tapaba con una manta.

-Siento haberte hecho esperar tanto.

Sentí como me daba un beso en la frente y acariciaba mi mejilla.

-Buenas noches princesa.

A la mañana siguiente

-T/N despierta, tenemos clases-Gritó literalmente Mattheo destapandome por completo.

-Aghh, déjame dormir más.

-Te dejaré dormir el fin de semana, despiértate ya o llegaremos tarde a pociones.

Me levanté con las sábanas aún pegadas a mi cuerpo y me dirigí a ducharme.
Cuando terminé de hacer todo, salí y me encontré a Mattheo ya vestido.

-Toma, pone esto-Me extendió el uniforme de Slytherin.

-Esta bien, gírate me voy a cambiar.

-Ni que no te hubiera visto totalmente desnuda-Dijo riéndose a lo que yo respondí con un quejido.

Me cambié delante de él. Sabía que si no fuera porque teníamos clase, me haría todo lo que el quisiera hasta cansarse.

-Listo, vámonos. Nos toca pociones con Snape, ¿verdad?

-Exacto, sígueme y aprendete los caminos. Se que te pierdes cada dos por tres-Dijo mirándome de reojo mientras yo le seguía por detrás.

Llegamos relativamente pronto a la clase y vimos que Snape era el único que estaba allí.

-Buenos días Sr. Riddle, buenos días Srta. Malfoy-Dijo con esa voz tan peculiar.

Pasé por delante suya y cambié el color de mis ojos para llamar su atención.

-T/N...estaría mejor-Dije dejando claro que no quería involucrarme con los Malfoy.

-Veo que no ha tardado mucho en saber la verdad. ¿Se lo ha dicho el Sr.Riddle? ¿o quizás el señor oscuro?

-No te pases de listo Severus-Soltó Mattheo amenazante mirándole a los ojos.

Alumnos comenzaron a entrar y nos sentamos en nuestros respectivos sitios.

Las clases eran más fáciles de los que me esperaba y se pasaban bastante rápido. No había aprendido nada que no supiera ya de antemano, pero debería esperar para aprender algo.

-Estoy agotada. Esto de subir y bajar escaleras no se me da bien. El ejercicio físico en general no es lo mío.

Mattheo se rió como respuesta.

-No es para tanto, tendrás que acostumbrarte porque lo vas a seguir haciendo por tres años más.

Di un suspiro muy largo.

-Hablando de ejercicio...Hoy tenemos entrenamiento de quidditch, ¿quieres venir?

-No puedo, tengo que hablar con Harry, ya sabés, tu padre...

-Es verdad, no te preocupes, ¿nos vemos en la sala común cuando acabe?

-Claro-Dije con una sonrisa.

A lo que él contestó dándome un corto pero tierno beso. Me quedé en shock literalmente y sonreí hacia el suelo.

Me dirigí a el patio interior donde solían estar el trío de oro, pero no los encontré, el único que estaba allí era Cedric, el cual me miraba de arriba a bajo como si fuera comida. Asqueroso.

HATED - Mattheo RiddleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora