Capítulo 6.

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James Louviére.

Sophie estaba allí en el lobby con un niño en sus brazos. ¿Qué hacía ella ahí? Sin la seguridad de Victoria.

—¿Dónde está Victoria? —le pregunté acercándome.

Su rostro lucía neutral, sin una pizca de emoción alguna.

—¿Podemos subir? —pregunto en un marcado acento americano.

Suspire asintiendo sin dejar de ver al niño que tenía en sus brazos, ingrésanos al ascensor en silencio. Sentía que la ansiedad me estaba comiendo por dentro, subimos al piso que ella me había dado la primera vez que llegue aquí.

—Victoria te necesito en Nueva York —susurro recostándose del sofá de cuero que había en al sala.

—¿Quién es él? —pregunté dejando las llaves y el saco sobre la pieza.

Ella sonrió viéndolo con tanto cariño.

Era evidente que ella era la madre de ese niño.

—¿Uhm?

—James —respondió—. Sé que no hemos tenido una presentación bastante agradable en el pasado, sin embargo, he oído cosas muy buenas sobre ti.

Observe el niño que parecía seguir durmiendo profundamente, ¿el frío no le afectará? Observe que el ventanal estaba cubierto por las largas cortinas.

—Victoria ha sido internada de emergencia hace unas horas —habló, sentí mi corazón detenerse por unos breves segundos—. Yo estaba en el  centro de Londres con James hasta que me llamaron y me dieron la noticia.

—¿Por qué no has ido a Nueva York? —pregunté lo más calmada posible.

Ella dejó el niño acostado en el sofá mientras medía la calefacción y buscaba unas toallas.

—Victoria me pidió que viniera a Londres y me reuniera contigo en los próximos días. Ella mencionó que me alcanzaría...

La observe que se perdía en la cocina y abrí un poco de las cortinas para ver la ciudad brillar.

—James Nicholas nació el pasado Julio —susurro dejando caer unas cosas de las bolsas que traía—. Victoria eligió el nombre.

Abrí los ojos contemplando al niño que seguía durmiendo plácidamente. Era hijo de mi tía, no importaba si llevaba su sangre o no, era un Louvére.

—¿Es tuyo...? —pregunté en un susurro—. No tengo conocimiento de cómo las personas del mismo sexo puedan cons...

—Nuestro —hablo rápidamente—. Existe un proceso donde se puede extraer el ovulo de una madre y ser inyectado en el ovario de otra a través de la fecundación in vitro.

Asentí sin saber mucho del tema.

Significaba que si Sophie estaba aquí con él, era porque Victoria estaba en peligro. No me preocupaba del todo cómo pudiera estar, de seguro ya sé lo habría arreglado.

—¿Qué te han dicho sobre ella?

—No mucho —respondió.

Me giré en busca de mi teléfono.

No había ni una sola llamada perdida de nadie.

—En el caso de que algo le suceda a Victoria, debes venir a Nueva York, Nicola —dijo—. Eres la heredera universal de los Louviére.

Negué cabizbaja—. James es un Louviére, y tú también.

—James es un bebé a penas, Nicola.

Trague grueso.

Blue. (LGBT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora