Capítulo XXIV

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Cassandra


La plaza se encuentra muy llena, muchas familias se pasean por ella, muchos con bolsas de ropa de algunas de las tiendas que aquí se encuentran; los niños corren felices delante de sus padres mientras piden dulces, helados, chucherías, golosinas o alguna comida que ha sido de su antojo, los observo a todos correr y una sonrisa se dibuja en mi rostro.

— ¿Sabes? — llamo al chico con mi voz logrando que coloque su atención en mí a la vez que observa lo mismo — En algún momento podremos estar igual a los padres de allá — señalo con mi dedo hacia las personas a las que me refiero — O como los de allá — apunto ahora hacia una pareja que tiene a un bebé en brazos, al parecer niña, mientras que un niño precioso de cabellos castaños y ojos azules toca su mejilla regordeta mientras le sonríe.

— Estaré ansioso por que llegue ese momento, amor. — entrelaza nuestras manos guiándonos a través de la gente.

Llegamos hacia el restaurante de comida italiana al que pensábamos pasar a desayunar, a pesar de ser las diez de la mañana, en verdad que está muy llena y lo está aún más el restaurante. Una fila de espera de alrededor de doce personas espera sentados en las bancas del lugar, pero la fila de espera se incrementa a cinco números más en cuanto Chase y yo entramos a la recepción del sitio y nos informan que hay más personas esperando por entrar. Agradecemos y juntos caminamos hacia afuera, son alrededor de treinta minutos de espera, sino es que más.

— ¿A dónde vamos ahora? — me giro hacia el ojiazul y rodeo mis brazos en su cuello.

— No lo sé, no quiero desayunar hamburguesas o algo incompleto — acaricia mis mejillas y pasa uno de mis rizos detrás de mi oreja.

— Podemos desayunar algo muy mexicano — meneo mis cejas de arriba abajo y él sonríe.

— Sí, sí podemos — besa mis labios ligeramente y caminamos saliendo de la plaza, nos adentramos en el vehículo y él conduce con dirección al restaurante mexicano.

Al llegar contamos con la buena suerte de que el lugar no se encuentra tan lleno, ahora hay una chica en la entrada del lugar con libreta en mano anotando los nombres de las personas que estarán esperando a entrar y su número de acompañantes. Decidimos esperar dentro del auto con la ventanas abajo para escuchar cuando la chica llame a Chase, oímos música y acaricio la pierna de mi acompañante; al encontrarme girada de su lado, le permito que pueda acariciar mi mejilla con su mano, ambos nos miramos a los ojos mientras canto la canción que suena por la bocina del auto. Trato de darle tono a la voz de Halsey sin arruinar su hermosa voz.

We can do anything if we put our minds to it

Take your whole life then you put a line through it

My love is yours if you're willing to take it

Give me your heart 'cause I ain't gonna break it

So come away, starting today

Start a new life, together in a different place

We know that love is how these ideas came to be

So baby, run away, away with me

Canto la canción mientras sonrío en su dirección, él me mira detenidamente, mi pulso se siente extraño, no es una aceleración de esfuerzo ni mucho menos un descenso en ella, es como si de repente este musculo encargado en permitirme seguir con vida se sintiese feliz, se sintiese como si todo estuviera correcto ahora y ambos supiéramos que el estar con Chase ahora es lo mejor que me pudo haber pasado en la vida, continuo mirándolo e interrumpo el contacto en cuanto escucho el llamado de la chica. Ambos bajamos del auto y caminamos hacia el interior del restaurante, creo que va siendo hora de volver al trabajo y comenzar a ganar mi propio dinero, eso hasta que me envíen a mi servicio y aplique en un hospital para comenzar a trabajar; ya tengo puesto el ojo en uno en específico y sé, confío, en que me aceptaran y tendré el trabajo.

Saved Souls [ Souls #2 ]✓ [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora