Capitulo 11.|El destino os juntará de nuevo

112 20 0
                                    

-Una chica como tú no llora por nada- Dijo acercándose lentamente.

-¿Cómo yo, como?- No entendía a que se refería.

-Tan linda- Respondió y sonrió dulcemente.

 Dios, ¿Dónde has estado toda mi vida? Pensé…

-Bueno y si me pasara algo ¿a ti que más te daría?- …pero no lo dije.

- No me gusta ver a las chicas lindas llorar, pienso que es una pérdida de tiempo y que os ponéis muy feas.- Se sentó y me miro con una sonrisa. A continuación termino de borrar las lágrimas de mi cara.

En ese justo momento en el que nos mirábamos fijamente cual dos enamorados, alguien apareció bruscamente por la puerta sofocado.

-Anne- Dijo casi sin respiración.

-¿Qué haces tú aquí?- Le pregunte enfadada.

-Yo- comenzó y trago saliva por su cansancio.- me dijeron que estabas aquí y vine a felicitarte.-

-Ya, claro. Hace un mes te fuiste sin avisarme, te llame como cien veces y te mande mil mensajes en todo ese tiempo pero no cogiste ni una sola llamada ni contestaste a ni un solo mensaje y ¿ahora vienes aquí a felicitarme?- Le chille a mi ex-novio, si mi EX, no le pasaría ni una más, ya estaba harta de sus juegos, no tenía ninguna duda de que se había ido por ahí con alguna.

-Pero Anne, yo…- comenzó, pero le callé.

-Ni yo ni nada, hemos terminado Adrien y no hay más que hablar.- Sentencie.

-¿Y creerás que me importa?- Dijo- Tengo a millones de chicas detrás de mí, y con tan solo llamarlas estarán aquí.- Continuo, pero no me sorprendió, estaba acostumbrado a su comportamiento de niño rico que tiene todo lo que quiere.- Y ahora líate con ese podre que no tendrá ni para un perrito caliente en un puesto barato.- Dijo y se fue enseguida echándole antes una mirada desafiante al chico misterioso que seguía sentado en la silla.

Me quede mirando a la puerta durante unos segundos, sin reaccionar.

-Con que es tu cumpleaños chica fuego.- Escuché decir al pelinegro.

-¿Chica fuego?-

-Sí, tu pelo me recordó al fuego y después de ver tu carácter.- Rió. Yo solté una carcajada.

-Me habían llamado de todo, pero nunca chica fuego, me gusta.-

-Me alegro, de todas formas te iba a seguir llamando así.-

Hubo un momento de silencio incomodo. Pero como siempre mi amiga llego al rescate.

-Ya estoy aquí Anne…- Dijo Esther entrando por la puerta.

-Hola, todavía no se ha despertado.- Conteste refiriéndome a la pequeña.

-Ya veo, y ¿quién es él?-Preguntó refiriéndose al chico.

-Me llamo Gabriel.-

-Aah, ¿de qué lo conoces?- Me pregunto a mi.

-De nada.- Contesté.

-Bueno, yo ya me voy.- Dijo Gabriel tímido.

Una vez se fue mi amiga comenzó a hablar.

-¿Cómo que de nada?-

-De nada, yo estaba aquí sentada, medio llorando y el entro diciéndome que porque lloraba, que las chicas guapas no lloran. Y luego entro Adrien intentando pedirme perdón.- Le conté a Esther lo que había pasado antes de que ella regresase.

-Espera, ¿por qué llorabas? ¿Adrien? Y ¿qué te dijo?-

-Entro  intentando pedirme perdón pero lo mande a la mierda.-

-¿¡Cortaste con él!? ¡Bieeeeeenn!-

-Sí.- Reí, ambas reímos.

-Y ¿por qué llorabas?- Preguntó más seria.

Me quede pensativa durante unos segundos. Pero lo decidí. Era la hora, debía contarle lo que me ocurría, quizás ella podía ayudarme.

Asique se lo conté, de principio a fin, sin dejarme nada. Le conté mis sentimientos todos los llantos echados en la almohada, lo sola que me sentía a veces y por último le conté lo ocurrido esa misma tarde.

Ella se quedó callada, supongo que no tenía palabras. Pero no las necesitó. Me abrazó, como nunca antes lo había hecho ni ella ni nadie. Y aunque no se me quitó ese sentimiento de dolor, se calmo durante unos segundos.

-¿Sabes qué?-

-¿Qué?-

-La encontraras. Encontraras a la chica, la volverás a ver.-

-Gracias por querer animarme, pero no creo que la vuelva a ver en la vida.-

-Si solo ella en tus dieciocho años, sin siquiera saber quién es, ni hablarle, tan solo con un choque, ha conseguido lo que nadie jamás lo hizo, estoy segura de que la volverás a ver.-

-Hay millones de personas en el mundo, millones de pelirrojas, millones de chicas con zapatos marrones, no estoy muy segura.-

-Si de verdad paso lo que me cuentas.-

-Si paso, que crees ¿qué me lo he inventado todo?- Dije en tono burlón.

Ella rio y continuo.

-El destino os juntara de nuevo.- Sentencio.

➰➰


Mi otro yo.|Pausada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora