Propiedad

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El amor es una cosa de locos o al menos así lo consideraba Jung Hoseok; era algo que volvía a las personas, estúpidas e ignorantes, perdían la capacidad de pensar, razonar y actuaban con imprudencia.

Dios lo librará de enamorarse algún día y actuar de forma estúpida como su amigo Namjoon. Rodó los ojos, harto de la situación que se encontraba frente a él, dos imbéciles se estaban moliendo a golpes por el amor de una mujer. 

Pará ser sinceros, Sihyeon era una joven hermosa y encantadora, pero no había razón para perder la cordura y llegar a los golpes. Ella era quien tenía que escoger a su pareja, no se trataba de quien ganara la pelea o no. Podría ser muy amigo de Namjoon, pero no podía aceptar ese comportamiento tan inmaduro.

Sin pensarlo más, aún denominándose a sí mismo un cobarde, se metió en medio de ambos hombres y trató de parar la inútil pelea. Lo logro, pero en el proceso se llevó algunos moretones. Ambos chicos se detuvieron, para darse cuenta de que la razón de su pelea se había esfumado a cualquier lado.

—Ella ya no te quiere, no vuelvas a meterte entre nosotros —escupió Hyunjin con los puños apretados.

Namjoon no parecía muy contento con la declaración y estaba a punto de protestar cuando Hoseok le dio una patada en el trasero.

—Eres un dolor en el culo Kim, Joder, no ves que ella ya tiene un nuevo novio. ¿Y tú qué haces aquí?, vete a buscar a tu chica.

—Esto, no se quedará así —el joven amenazó a Namjoon mientras sobaba su nariz que estaba sangrando, era una imagen muy fea y lamentable desde el punto de vista de Jung. 

—Si, si, ya a la chingada —Hoseok hizo señas con su mano para indicarle al joven que se fuera, Namjoon tampoco se veía muy saludable, estaba tocando sus costillas en símbolo de dolor. Hoseok lo miró con indignación. 

El rubio atractivo lo miró confundido pero asintió y después de darle la espalda a los dos alumnos de la especialidad de artes, se perdió de su vista en los pasillos de la Universidad, a menos la pelea no había durado lo suficiente para que las autoridades estudiantiles aparecieran, no quería involucrarse con el comité de violencia escolar. Una expediente ahí podía volverse una mancha para toda la vida.

—No me mires así, tengo todo el derecho de estar molesto, éramos novios hace tres días Jung, tres jodidos días.

Hoseok volvió a rodar los ojos. Esas cosas del amor, eran una porquería.

—Estoy decepcionado, ¿Dónde ha quedado el número uno de la clase?

—Unos golpecitos no me quitaran el número uno —reclamó Namjoon mientras se quejaba de dolor y caminaba a paso lento detrás de su hyung.

—No, pero si algún encargado te descubre o te acusan, bajaran tus notas y te suspenderán. No eches todo a perder por una chica Namjoon.

—No es sólo una chica, es mi...

—No digas que es tu chica, porque no es tu chica, olvídate de ella, búscate una nueva novia y folla, la olvidarás en menos de dos semanas.

Hoseok hablaba seriamente sobre un tema del que no tenia conocimiento ni experiencia, desde el punto de vista de Kim, su lógica sonaba bastante estúpida, así que Namjoon rodó los ojos.

—¿Quién te hizo tanto daño para creer que el amor es tan fugaz y que se puede sanar una decepción amorosa tan pronto?, se ve que nunca te has enamorado.

—Y si voy a actuar como un cavernícola como tú, prefiero no hacerlo, de todos modos, nunca me ha gustado nadie, ni una sola chica en esta escuela ha llamado mi atención —declaró Jung bastante seguro de su respuesta.