𝗉𝖺𝗋𝗍𝖾 𝟣𝟫 彡

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(advertencia: este capítulo es largo, para compensar las actualizaciones lentas que han habido a lo largo de la historia<3)


Alejandro podría decir que ese fue un buen día, ya le hartaba haberse quedado en casa por tanto tiempo, por lo que aquella salida le hizo sentir como nuevo.

Ya era de noche, y el chico se encontraba en su casa, envuelto entre unas cobijas, música ligera sonaba para dar el ambiente, y veía la luz de la luna entrando por su ventana.

Estaba agotado, no de mala manera, pero si necesitaba reposar un rato. Y así lo hizo, con una sutil sonrisa en el rostro, cerró sus ojos para descansar para el día siguiente.

*

Al levantarse, se sintió más energizado que otros días. Aquel día no tenía que ir al trabajo, Rubén le había preguntado si podía acompañarle un rato a comprar cosas en el pueblo, y él accedió.

 ¡Alex!- el híbrido de oso le recibió con un ruidoso saludo.

Rubius. ¿Qué tal todo, compañero?- respondió.

— Mgh, bien, no me quejo- Rubén respondió con una pequeña mueca de disgusto.

— No haz sonado muy convincente eh- le reprochó.

— Es que... hoy habrá una fiesta en la casa de Vegetta...

— ¿Fiesta?- cuestionó- ¿Qué fiesta?

— Pues si hombre, tal vez no te enteraste porque no salías mucho de casa, pero todos van a ir, y ahora tú también, no me vas a decir que no ehh, que hace tiempo no sales con nosotros- Rubén hizo un gesto de estar ofendido.

— Está bien, está bien- Alex soltó una risa- no voy a faltar esta noche.

— Oleee- el mayor celebró.

Pero bueno, ¿Qué tiene eso de malo?

— ¿Uh?- 

— ¡Hombre, no puede ser que te olvides de las cosas tan rápido- Alexby suspiró- ibas a decirme porque antes te quejabas de la fiesta de esta noche.

— ¡Ahh! Sí, es que yo soy quien debe comprar los bocadillos- la expresión del menor cambió a una seria y confundida- ¡Y tendré que gastar a mis bebés en esto! ¿Tú crees que encontrar diamante es fácil? Bueno, para mi si, claro... pero sabes a lo que me refiero.

Doblas estaba nervioso mientras Alex se aguantaba la risa. Ese chico no tenía remedio.

— Anda ya, si te ha tocado debes aceptarlo, andando, que luego tengo cosas que hacer.

Alexby era el encargado de supervisar que Doblas comprara lo que se le había pedido, luego de que el híbrido le mostró una lista de las cosas que debía conseguir, comenzaron su pequeño recorrido.

Después de unas cuantas horas y varios regaños y boberías, terminaron su cometido. El tiempo se les pasó en un abrir y cerrar de ojos, y terminaron su salida cuando Alex se despidió del híbrido de oso.

amor sempiterno; fargexbyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora