amor sempiterno; fargexby

𝗉𝖺𝗋𝗍𝖾 𝟦彡

Luego de su "corto" sueño, Alejandro se había despertado. Miró el reloj de la pared, ya era de noche, eso explicaría porque su compañero de trabajo ya no estaba ahí, ¿Cuánto tiempo llevaba dormido? Frotó un poco sus ojos y volvió a ver esos papeles que tenía en frente. Al lado de ellos había una cajita con una nota.

hola alex, soy fargan, tu compañero

he visto que estabas muy cansado

y te traje algo de comida, espero que te agrade

¿Por qué David tendría ese gesto con él? Ya tendría que devolverle el favor algún día. Por el momento, su estómago solo pensaba en comida, por lo que no tardó en abrir el envase que tenía al lado.

Una sonrisa se formó en su rostro al ver su plato favorito dentro. ¿Cómo lo había adivinado?

Sin pensarlo mucho, comenzó a comer y a revisar rápidamente los papeles que le faltaban.

— Pero si yo soy un oficial, puedo dejar esto para mañana- se dijo a sí mismo, un poco confundido.

Al levantarse de su sitio se estiró un poco, escuchó un pequeño ruido y vió que había un abrigo en el piso. "De seguro debe de ser de Fargan y lo dejó por aquí tirado", pensó. Luego de recogerlo, tomó el resto de sus cosas y volvió a su casa.

*

— ¿Alex?- una voz lo recibió mientras habría la puerta

— ¡Frank...!- respondió

— ¿Estás cansado, pequeño?- preguntó preocupado

— Algo así, desde el accidente me siento así, pero será cuestión de tiempo para que mejore- el menor le mostró una sonrisa al mayor 

— Si es así descansa, ¿Quieres que te prepare algo?

— No, no, así estoy bien, tomaré algo rápido- el policía dejó todas sus cosas en el sofá y fue directo a la cocina, seguido de Frank- mejor cuéntame, ¿Qué haz hecho hoy? El pueblo ha cambiado mucho desde que te fuiste

— Pues sí- contestó emocionado- fui un rato a minar, luego di vueltas por el pueblo y visité comisaría, ¿La han inaugurado hace no mucho verdad? Por cierto, ¿Probaste las galletas?

— ¿Galletas?- cuestionó- hoy no he visto ni una galleta

— Si, fui y le dejé un paquete a la secretaria, pero creo que no te lo han entregado...

— Joo- se quejó Alex con un pequeño puchero- no importa, otro día las probaré, de seguro son deliciosas

Pasaron un rato conversando, hasta que Alejandro se retiró de la mesa para ir a descansar a su habitación; minutos después Frank hizo lo mismo, pero yendo a la habitación de invitados.

*

Fargan se había levantado con muchos ánimos, tomó una ducha y fue directamente a tomar desayuno. 

— ¿Cómo estás, Rambo?- preguntó cuando su mascota se le acercó- ¿Quieres algo de comida? Aquí te dejo un poco

Luego de dejar alimento en el plato del perro-lobo, fue a por su mochila de policía y salió de su casa hacia la comisaría. Llegado al lugar saludó a los guardias, entró a su oficina y encontró a su compañero ahí.

— Buenos días, Alesby- David anunció su llegada con un saludo.

— Buenos días, Fargan- respondió alegre, eso alegró al híbrido porque su buen humor indicaba que estaba bien de nuevo. 

Tomó asiento y sacó un par de pioners de la estantería. Definitivamente el trabajo en la oficina no era uno de sus favoritos, prefería el patrullaje y más acción pero era obligatorio hacerlo mínimo 5 días, o una semana laboral, en cada mes de trabajo.

— Eh... Fargan, esto debe ser tuyo- habló Alexby, sacando su abrigo del lado de su armario- creo que ayer te lo olvidaste y no podía dejarlo aquí

¿Entonces Alex no se había dado cuenta de que se lo había puesto a él?

— Oh, gracias Ales, no lo encontraba y pensé que lo había perdido- mintió

— No deberías ser tan descuidado- respondió el menor esbozando una sonrisa- y creo que no te lo dije pero gracias por la comida de ayer

— No es nada, espero que te haya gustado

— Claro que sí, ¿Cómo sabías que ese era mi plato favorito?

¿Cómo no iba a saberlo si era su pareja?

— Alesby, que tú no me recuerdes no significa que yo no te conozco...

— Perdón tío, es que es algo raro para mi- Bravo hizo una corta pausa- ¿Nosotros qué éramos? ¿Cómo nos llevábamos?

David sintió un pequeño revoltijo en el estómago, quería decirle la verdad pero Auron le advirtió varias cosas sobre aquello y algunas consecuencias que podía tener en él.

— Nosotros, pues éramos muy buenos amigos la verdad, nos llevábamos bastante bien puedo decir, pasábamos mucho tiempo juntos ya sea pescando, minando, esas cosas

— Uh, sinceramente no me acuerdo de nada de eso- respondió algo apenado- pero hasta ahora me caes muy bien

— Je je- rió nervioso 

— ¿Mañana estás libre?

— Eh, sí, ¿Por?- respondió con curiosidad

— ¿Vamos a pescar por la tarde?

— Claro, por mi no hay ningún problema 

Esa pequeña pregunta le devolvió parte de su alegría al búho, dándole más esperanzas en su plan de poder 'recuperarlo'.

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no me acordaba que era levantarse temprano jaja:( no sé cuándo pensé que era buena idea tener mis clases a las 7am