Regaño 2: Hijo

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A pesar de que las vacaciones improvisadas que había tomado con sus hermanos, sobrinos e hijo fueron divertidas, Poseidón extrañaba la sensación del mar alrededor de su cuerpo.

Estuvo unas horas flotando perezosamente cerca de un coral lleno de peces, recuperándose de las emociones que había experimentado a lo largo de la semana.

Cuando consideró que estaba listo para regresar a su palacio se levantó y comenzó a nadar, saludando a uno que otro pez que veía por ahí.

Los tiburones que hacían de guardia dieron un gruñido de reconocimiento al verlo y lo dejaron entrar.

Entró a la sala del trono con una sonrisa y una bolsa de papel (no plástico, cuiden el océano), acercándose a su trono.

Ahí, su esposa Anfitrite lo esperaba sentada en su propio trono. Tenía apoyada su mejilla en el puño y lo miraba con desinterés, alternando la vista entre él y su bolsa.

— Su hermano mandó facturas— fue su saludo, mostrando unos papeles— Destrozó un restaurante, ¿no es así? Y estuvo preso junto a Perseus y los otros dos.

Poseidón de repente comenzó a lamentar un poco haber subido esas fotos a Instagram, pero era una experiencia que quería, no, necesitaba presumir. ¿Cuántas veces en la vida terminas preso con tu querido hijo?

Aún así, el Dios del mar agachó un poco la cabeza y se rascó la nuca, una clara señal de nerviosismo.

— ¿Vas a regañarme?

— Mi señor, usted ya debería saber que por usted sólo albergo un persistente sentimiento de decepción, así que esta situación no me afecta en lo absoluto— respondió sencillamente Anfitrite.

Poseidón rio encantando ante la broma, pero se detuvo al notar que su esposa lo miraba sin una pizca de gracia.

De inmediato se calmó y asintió. Herido por esa declaración y a la vez aliviado por saltarse ese regaño.

— Sin embargo— continuó Anfitrite después de que se calmó— Hay alguien que sí está enojado con usted.

¿Eh?

— Si mal no recuerdo, mi querido Tritón te ha estado pidiendo desde hace décadas ir a Disney como padre e hijo— Poseidón no pudo evitar tragar saliva ante las palabras de su esposa. La mirada de Anfitrite se había agudizado, atravesándolo como miles de arpones de pesca— Fue una grata sorpresa que él llegara maldiciendo a todo el mundo con estas facturas en mano. Es una buena manera de enterarse, ¿no lo cree? Incluso Apolo hizo unas llamadas para informarle a su primo sobre tu... situación con Perseus.

Hubo un silencio incómodo después de eso. Anfitrite lo seguía mirando con su expresión de enojo y no sabía a dónde ir.

— Yo...

— Tritón fue a entrenar a la arena— Anfitrite se puso de pie y nadó hasta la puerta— Agradecería mucho que mi adorado hijo esté feliz para la hora de la cena— con esa última oración salió de la habitación, dejándolo solo en la sala del trono.

Poseidón suspiró y miró con pesadez la puerta ahora cerrada. Dejó su bolsa con recuerdos en el trono y salió en otra dirección, nadando hacia la arena.

Varios peces y tritones miraban asombrados y asustados lo que estuviera pasando ahí dentro. El Dios se acercó con curiosidad y miró lo que entretenía/asustaba a los demás.

Tritón atacaba ferozmente con tridente en mano los muñecos encantados de entrenamiento. Sus golpes eran feroces y los alternaba activamente, su aleta golpeaba al oponente y al momento siguiente atacaba con el tridente.

Después de dos minutos decapitó a los muñecos y miró al guardián de la arena.

— Más muñecos— gruñó el Dios menor, respirando agitadamente y mirando con enojo al pulpo, quien trataba de explicar que ya no había más por el momento.

— Veo que has progresado maravillosamente, Tritón— ese fue el saludo que Poseidón decidió decir, acercándose con una sonrisa a su hijo— Aunque te recomendaría manejar el cuerpo a cuerpo con otro estilo. Por ejemplo, tu hermano Perseus-

— Perseus, Perseus, Perseus— interrumpió Tritón, dándole la espalda y clavando la punta del tridente en un muñeco hecho pedazos— Siempre es Perseus, si tanto te gusta por qué no te vas con él— Tritón lo miró con el ceño fruncido, deteniendo sus ataques— Padre— agregó como una ocurrencia tardía, pero el sarcasmo se derramaba por todas partes.

Poseidón podía sentir las miradas llenas de sorpresa dirigidas hacia ellos, y no podía culparlos. Nunca en todos los siglos que Tritón llevaba de vida le había hablado de tal forma.

— No me faltes el respeto, Tritón, recuerda tu posición— contestó Poseidón, decidiendo ponerse serio de una vez— Si te digo las cosas es para que mejores. Perseus tiene un amplio dominio en esa área, tal vez si fueras más...— el Dios se detuvo en esa parte de la oración, dándose cuenta del error que cometió. Incluso la audiencia que tenían jadeó por ese comentario, sabiendo exactamente lo que iba a decir.

— ¿Si fuera más qué, padre?— siseó Tritón, dejando clavado el tridente con fuerza en el suelo— ¿Más como él? ¿Eso querías decirme?

Poseidón no sabía cómo responder eso, no sabía de qué forma arreglar las cosas con él.

— Pues lo lamento, rey del mar, por no ser como el gran Perseus Jackson, héroe y salvador del Olimpo— Tritón se acercó a su padre y se detuvo frente a él— Si tanto le molesta, ignóreme y hágame a un lado. No sería nada nuevo para usted.

— Tritón...

— Usted disfrute el tiempo con Perseus y olvide a la familia que tiene aquí abajo— Tritón se alejó un poco y dio una reverencia exagerada— Ahora, si me disculpa, iré a ayudar a mi madre en la cena de hoy.

Tritón se alejó nadando, pero se detuvo en la entrada arena y giró a verlo.

— Y por si le interesa, lo cual dudo mucho, estaré fuera durante los próximos cuatro días. Macaria me invitó a un viaje con ella, Cimopolia y la tía Hestia. Vamos a Disney.

— Pero tú querías ir a Disney conmigo— murmuró penosamente Poseidón.

— Sí, bueno, estoy seguro de que lo disfrutó más con Perseus. Ir conmigo seguramente le arruinaría la imagen que ya tiene del parque. Además, qué pena daría si lo ven pasando el rato con su decepcionante hijo— con una última mirada de enojo y traición, Tritón se alejó nadando de la arena.

Poseidón se quedó ahí en el centro de la arena, bajo la mirada de enojo, tristeza y decepción de sus súbditos.

Volví, la verdad no sé cuánto tiempo pasó, ¿1 semana?

Tampoco sé si este capítulo fue parecido a los demás en cuanto chistes y eso se refiere. ¿Tal vez es un poco más serio?

Desde que leí la interacción de Poseidón-Tritón y Poseidón-Percy he tenido la duda, o headcanon, de que la mayoría de la gente del Mar sabe y siente sobre la preferencia que Poseidón tiene en Percy. Así que traté de escribir esto para explicar el headcanon.

¡Gracias por el apoyo!

En unos minutos/días (alch no sé) estaré subiendo las partes de la historia que escribí en la página de facebook.

¡Recuerda seguirla si aún no lo haces!

~ Silent skull ☠️

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