Capítulo 13

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Tommy

Durante los meses siguientes me he quedado con el profesor las horas extras que solicitó fuera del horario de clases, no precisamente analizando solo temas de filosofía, ya que él los resume en no más de dos oraciones, sino también temas de mis otras materias (en la física, ni en las matemáticas, ni en métodos de investigación, ni en literatura... ¡Dios, estoy perdido! Básicamente es mi tutor de tareas) pero, de alguna u otra forma siempre terminó por entender cuando él me enseña. Aunque debo admitir que los gritos no son mi método favorito, pero ayudan.
Como vivimos en el mismo edificio, él me lleva a la Universidad, y me trae de regreso a casa, lo cual ha generado muchos rumores sobre nosotros. Que si me adoptó o si soy su hermano menor..., y a Mr. Brown le divierte mucho pasarse junto a mi diciendo -gritando- cosas como "No quiero que te comportes mal, hijo. Ya sabes lo que opina papá sobre eso" o "Algún día haré incesto contigo".

Ya lo sé, es divertido... ¡Pero no cuando lo dice frente a toda la clase!
Sigue con su mal humor... Pero al menos ya no reprueba 50 chicos de los 70 valientes que se inscribieron a su clase.
Me ha estado dando libros y libros para leer. Nunca creí que yo pudiera acabar un libro en menos de un día, ¡Pero lo hice! "La Peste" de Camus. También me ha enseñado de música, aunque es muy estricto cuando se trata de tocar su piano, en realidad digamos que no me puedo acercar a menos de 4 metros de él desde que resbalé y caí en parte sobre las teclas.

Mi vida ha cambiado mucho en todo este tiempo, he mejorado mis notas, hice nuevos amigos (Emily y... Y... Emily...), incluso me he vuelto menos tímido
Ahora mis tardes están llenas, entre mis deberes, las extra-clases, salidas con Emily y horas al teléfono con Ian.

Ian, cierto. Hace unos días me llamó y me dijo que está a nada de volver, al parecer el negocio que su padre le dejó a su madre no iba nada bien, y como él está estudiando "Administración de empresas" (Por obvias razones) su madre lo llamó para que se hiciera cargo.
Me alegra volver a verlo, pero, extrañaré los viajes en el auto de Mr. Brown, su música, las tardes que nos pasábamos mirando series y criticándolas, su espantosa y seca comida, su mirada tan intensa, sus facciones tan... Perfectas, sus delgados y largos dedos tocando el piano... Tocándome a mí...
¡¿PERO EN QUE ESTOY PENSANDO?!
Brown ha cumplido su promesa, no me ha tocado ni siquiera para saludarme.

–¡Tommy! –Salí bruscamente de mis pensamientos y casi derribo mi almuerzo.
–¿Q-Qué sucede? –Respondí temeroso. Emily sólo se sentaba conmigo los martes, los demás días yo comía sólo y ella con su grupo de amigas, a las cuales al perecer les parecía "lindo"
Cientos de veces escuché frases muy extrañas de la boca de esas chicas como:
"¡Santo dios, es lindísimo!"
"¿Tiene novia?"
"Estoy enamorada de él"
No sé cómo lidiar con eso. Normalmente las chicas se acercan a Ian, él es el guapo, no yo.

–Hoy estas muy extraño –dijo Emily con voz de preocupación.
–Eh... Estoy bien – Sonreí sinceramente y le di un gran bocado a mi waffle. ¡Como amo la comida!
–Okay, omitiré que hace unos segundos estabas tan rojo como el traje de Santa Claus... Bueno, el fin de semana es la fiesta de fin de semestre y bueno... Yo quería saber si tu... Si t-tu... –Emily dejó la frase al aire y miró hacia el piso.
Yo recorrí mi silla para quedar justo de su lado derecho y la miré fijamente.
–¿T-Te gustaría ir a la fiesta con... Conmigo? –Me sorprendí mucho, nunca nadie... (Del sexo contrario) me había invitado a un baile. ¡ESTO ES ÉPICO!
–¡Sí! Sí, sí – Ella sonrió y sus ojos se iluminaron.
-Okay, bueno, te veo ,más tarde –Un ligero rubor cubrió sus mejillas y después se marchó

Todos los días cuando terminaba de comer recorría a pie casi todo el campus (Bastante grande, para ser sinceros), era un hábito que había tomado desde aquel día con mi profesor...
Sacudí la cabeza mientras caminaba más rápidamente y me desviaba del camino de terracería.
La universidad medía hectáreas, lo gracioso es que solamente habían 3 edificios: A, B y C <Uso de lógica y esto> me dije.
Pero, a la redonda de aquellos tres edificios de seis pisos cada uno, estaban hectáreas de frondoso bosque, un lago principal y algunos más (que al parecer ya estaban secos).

No es que mi Universidad fuera la más prestigiosa de la ciudad, ni mucho menos la más costosa, pero, lo que más me gustaba de este lugar era el grandioso olor a hierba, a tierra mojada... Sencillamente amaba esto.
Mientras me cambiaba mis zapatos por unos converses viejos y gastados mi mente analizó más a fondo lo que Emily había dicho, ahora la emoción por una cita se empezaba a desvanecer al darme cuenta de que la fiesta era por el "Fin de Semestre" eso significaba que terminarían mis extra-clases con Mr. Brown.

Eso me bajo el ánimo.
<¿Por qué estas triste por eso? Tendrás más tiempo para ti> pensé.
Me encogí de hombros y comencé a caminar algo apresurado.
Ya habían pasado unos minutos cuando escuche una conversación, me quedé muy callado para reconocer las voces, había una voz muy aguda pero no chillona y... ¡Mr. Brown!
Corrí para escuchar más de cerca y me escondí tras un arbusto, pero no tenía en cuenta que estoy en un bosque y que si el aire está impregnado por un aroma a tierra mojada es porque ¡la tierra está mojada y hay lodo!

Me quedé muy callado y quieto.
–Entonces... ¿Ya no estas enfadada conmigo? –Era la voz de mi profesor.
–Sabes que no.
–Gracias...
Después empezaron a susurrar demasiado como para que yo escuchara. Estaba a punto de rendirme cuando escuche dos palabras que, por alguna razón que aún no conocía ni estaba dispuesto a aceptar, rompieron mi corazón.
–Te amo.
Ella se lo dijo a él.
Me levanté disgustado y cabizbajo, me sacudí toda la tierra y lodo que se había impregnado en mi ropa, puse marcha e intenté olvidar mis sentimientos.

Cuando por fin llegó la hora dedicada a las clases con él entré en el salón sin decir una palabra. Antes que cualquier cosa eché un vistazo para ver si se encontraba dentro, pero no. Seguramente estaba con su no... N-Novia. Entré inseguro y tomé el libro que siempre dejaba sobre su escritorio. Me senté hasta la última fila y me puse a leer.
Minutos después el entró y se sorprendió al verme.
–¿Pero qué carajos te sucedió? Parece que te revolcaste en lodo.
<¡No! ¿En serio?>
Suspiré y no pude emitir ningún sonido, temía que si hablaba mi voz se rompería y no podría parar de llorar.
<¿Por qué estas así? Él y tú no son nada, sólo está jugando contigo. supéralo>

Él se limitó a sentarse en su escritorio y escuchar música, encendió un par de cigarrillos en el proceso y no hubo mayor charla.
No entendí nada en el libro, leí 7 capítulos sin estar consciente de ello, odio esto.
Revisé mi celular, hice un par de cuentas que indicaban que faltaban unos minutos para irnos. Cerré el libro muy bruscamente y baje corriendo las escaleras.

–Lo espero afuera.
–Espera, Tomm. –Su mano se acopló a la mía y me giró hacia él.
Sentí como la sangre subía lentamente por mi rostro bajo su insistente mirada. –Hoy estas muy extraño... ¿Ocurre algo?
<¡Claro que sí, tonto! ¡Sólo estas jugando conmigo!>
No, nadaMiré hacia el piso, ocultando mi rostro.

Él subió su mano derecha hasta mi barbilla y la alzó con extrema delicadeza.
Mis ojos se encontraron con los suyos. Eran tan perfectos, tan azules. Su rostro denotaba preocupación y curiosidad, cerré los ojos y el acercó su rostro al mío.
Los músculos de mi abdomen se contrajeron y mi respiración se aceleró en cuestión de segundos, mis labios comenzaron a arder y a cosquillear. Pero, justo cuando estábamos a menos de un centímetro de distancia él se separó.
<No... Por favor, to-toca...
¡¿QUÉ ESTAS DICIENDO, TOMMY?!>
Abrí mis ojos y salí corriendo de ahí. Decidí tomar el autobús a casa, era demasiado doloroso mirarlo después de lo que escuché en el bosque.

Different Love [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora