□ n u e v e □

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En aquella mañana los sirvientes terminaban los preparativos que había pedido Aslan para dar un anuncio. Por lo que un par de mujeres la estaban ayudando a vestirse, esta vez su pelo estaba peinado hacia atrás dejando su frente descubierta, el vestido era de un tono marfil con ciertos destellos lila.

—Esta preciosa, majestad.— sugirió una de las mujeres con una sonrisa que le correspondió Cordelia, un vistazo más a su reflejo para salir a los pasillos.

La luz cálida entraba por las ventanas, una calidez diferente que no había antes en ese palacio. Se encontró con Lucy que seguía explorando los pasillos con curiosidad, fue ella la que se acercó a la niña para que sonrieran.

—Es raro estar aquí otra vez — se sinceró, la mayor de ambas asintió.

—Es como un lugar nuevo a mi parecer...

—Eso siempre es bueno, ¿No?

—La mayoría lo cree, así que, sí — fue Cordelia la que comenzó a caminar un poco más rápido para seguir paseando en compañía de Lucy, había sido la primera vez que ambas podían convivir bajo una situación más tranquila.

Era un buen comienzo, uno nuevo y en las situaciones correctas. Eso era lo que se repetía Cordelia mientras sonreía ante los comentarios de Lucy, llegaron hasta un balcón donde se podía ver como la gente se amontonaba para terminar los arreglos.

—¿Qué crees que pase?— Lucy preguntó bajando solo un poco su sonrisa, sincerando la duda que ambas chicas tenían desde que Aslan pidió los preparativos. La peli negra no sabía qué responder, si ni ella tenía una respuesta.

—Dijiste que debíamos confiar, ¿O no? Tal vez esta vez debamos hacer lo mismo.

—Cambiaste, antes no me creías ni siquiera de ver a Aslan... Me agrada.

—A mi también.

—Cordelia— ambas chicas voltearon para encontrarse con Caspian, Lucy dijo que buscaría a Edmund para dejarlos a solas. La chica sonrió acercándose a su amigo —Ya esta listo, y aparte, revisando unas habitaciones encontré esto.

Mostró en sus manos una tiara plateada, Cordelia sonrió.

—¿Qué es esto?

—Creí que era tuyo,— ambos rieron al pequeño mal entendido, debía pertenecer a la tía de Caspian pero el chico se la colocó en su cabeza, resaltando gracias al cabello negro de la chica, decorando la frente descubierta —Ta-da~ pensé que debías usar esto ya que es una ocasión especial, ¿No?

—¿No habrá problema en que la use?

—Yo espero que no, si no seré reprendido.— ambos rieron imaginando que su tía podría regañarles, como cuando eran unos niños —Debo buscar a los demás, te veo  allá.

—Te ayudaré, mientras más rápido mejor.

Ambos comenzaron a caminar en busca de Aslan, ciertos sirvientes aún se acercaban a Caspian pra cuestionarle algunos detalles pero la mayoría estaba esperando el momento en que se diera alguna "Noticia".

Ambos bajaron hacia el jardín, ahí vieron a lo lejos a Aslan en compañía de Susan y Peter, pero ambos humanos estaban con una mueca seria.

—Dejémoslo— sugirió Cordelia caminando hacia atrás, apenas Caspian y ella iban a regresar cuando Aslan los llamó,  Cordelia miró a Peter que le estaba observando un poco serio.

—Ya está listo.

Aslan dejó su charla con los hermanos mayores seguidos de Susan y Caspian, Peter se acercó a Cordelia sin quitar su mirada preocupada.

𝐈 𝐜𝐡𝐨𝐬𝐬𝐞 𝐲𝐨𝐮, 𝐦𝐲 𝐤𝐢𝐧𝐠  | 𝑃𝐸𝑇𝐸𝑅 𝑃𝐸𝑉𝐸𝑁𝑆𝐼𝐸 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora