Simplemente se tú mismo

CAPÍTULO 19

-Te marco en cuanto salga de la entrevista ¿Si?

Había invitado a Lucia a almorzar y luego la lleve a su casa. Estábamos sentados en el porche.

-Qué difícil es esto. -dijo Lucia haciendo un puchero.

-¿Qué cosa?

-Separarnos luego de pasar dos días juntos.

-Ya se, extrañare dormir con un koala. Voy a tener que darle amor a mi almohada -golpeó mi hombro -auch! cuánta violencia -dije sarcásticamente -Hace unas horas eras puro amor y ahora me maltratas.

-Eres dramático -dijo levantándose. -4:30 tienes que irte, no quiero que llegues tarde.

-Me golpeas y luego me corres -me levanté y me acerque a ella. -Te llamo más tarde, te amo -nos despedimos con un corto beso en los labios y salí a toda prisa.

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Otoño había llegado, trayendo consigo días fríos y ventosos, los árboles se alzaban hacia el cielo, con sus hojas color café amarillento. Octubre se acercaba al igual que mi cumpleaños.

-En una semana es tu cumpleaños ¿Qué organizaremos? -preguntó Mariana mientras desayunábamos en la cafetería.

Todos estábamos en la misma mesa, el grupo se había agrandado, a mi derecha estaba Lucia y luego Benjamin, frente a mí estaba Mariana y Daniel. Hacía falta Nick, quien 'milagrosamente' dejó de acosar a Lucia pero 'misteriosamente' comenzó a llevarse con Daniel y ahora era parte de nuestro grupo.

-Este año tenemos que hacer algo Alex, el año pasado fue super aburrido -dijo Lucia.

-¿Qué hicieron el año pasado? -preguntó Benjamin.

-Alex quiso quedarse en casa mirando películas.

-No soy de festejar mi cumpleaños Lu. Te lo dije el año pasado.

-Pero yo no soy Lucia así que organizaremos algo Alex. Te guste o no -dijo Mariana apuntándome con el popote de su bebida -No todos los años cumples 21.

-Esta bien, solo no hagan algo muy grande por favor.

-Con Marina y Benjamin no te aseguro nada bro -se burló Daniel. Y solo comenzaron a reírse.

Daniel tenía razón, a esos dos les encantaban las fiestas, dudosamente organizarían una 'pequeña' reunión.

Pronto el timbre tocó y volvimos a clases, otro día más en la universidad.

(...)

-¡Por fin! -susurre para mí mismo en cuanto sonó el timbre de salida.

-Diablos bro, no quise decir nada en el desayuno pero tienes un aspecto terrible. ¿Qué sucede? -dijo Daniel tomando asiento en el asiento junto a mi.

Comencé a meter mis cosas en mi mochila -He tenido mucho estrés, demasiadas tareas, poco tiempo y mucho trabajo, todo me está consumiendo.

-Pero me dijiste que te estaba gustando trabajar con Lautaro.

-Me encanta, cuando estoy ahí el mundo desaparece, es bastante bueno y tiene casos muy interesantes. He aprendido más ahí que en dos años en la universidad. -suspire -pero está última semana han marcado demasiada tarea y tengo tres proyectos por entregar -nos levantamos y comenzamos a avanzar fuera del salón. -Ni siquiera puedo ver a Lucia.

-Claro "ver" a Lucia -dijo haciendo comillas con sus manos.

-Idiota. -golpee su hombro. -Realmente extraño pasar tiempo con ella.