Taehyung tiene lo que cada persona desearía en la vida con solo diecisiete años: dinero, una relación estable y amigos en cada lugar al que va.
Jeongguk nunca se ha conformado con lo que tiene, por ello desde hace años trabaja duro por un futuro mej...
Está terminando de ponerse la corbata en el cuello cuando escucha su nombre ser llamado desde el pasillo. Se gira, viendo a su hermano preparado para ir a la escuela. "Buenos días, Wonu" sonríe al verle con los ojos cansados por lo temprano que es. "¿Listo para que te lleve al cole?"
El menor asiente con alegría, pues ir a jugar con otros niños es algo que le ha gustado desde el primer día que asistió al lugar. Aunque tanto él como sus hermanas tenían miedo de que no pudiera adaptarse o se pusiera a llorar cuando viera que le dejaban ahí, eso nunca pasó, de hecho nada más abrirse las puertas de la escuela sale corriendo, olvidando a veces el despedirse de sus hermanos mayores.
"¿Voy contigo?" pregunta, sujetando la mano tatuada del mayor y buscando su mochila en el sofá.
"Sí y también te voy a ir a buscar" le ayuda con la chaqueta y la mochila, asegurándose que no es demasiado pesado para él. "¿Tienes ganas de ir a jugar con tus amigos?"
Wonwoo va dando saltos hasta la puerta. "¡Sí, mis amigos!" exclama con entusiasmo, intentando llegar hasta el mango de la puerta para abrirla.
Con un poco de ayuda del mayor, salen fuera finalmente, bajando las escaleras al paso de la tortuga porque Wonwoo insiste en bajar él solo y si no fuera porque el tatuado ya lo esperaba y salieron antes de tiempo de casa, llegarían tarde.
Los viajes en autobús siempre son interesantes con su hermano, sobretodo por las mañanas cuando están a tope de gente, entre estudiantes y gente que va a trabajar a penas puede encontrar un sitio para sentarse, por lo que debe tomarlo en brazos y es en momentos como ese donde agradece ir al gimnasio siempre que puede o se cansaría rápido. "Mucha gente" murmura en sus brazos, sujeto con fuerza y mirando por la ventana. "Árbolos" señala hacia los altos árboles de la calle.
"Árboles, Wonu" le corrige con una sonrisa. Desde que tiene dos años y aprendió esa palabra no es capaz de decirla bien.
Hay gente que le mira porque creen que su hermano en realidad es su hijo y es un padre joven, muchas de ellas son de reproche porque no es normal que a su edad se sea padre, pero está tan acostumbrado a ellas que las ignora lo mejor que puede. Así es hasta que llegan a su parada y el colegio de su hermano está frente a ellos. "Llegamos" le posa en el suelo y no pasando ni dos segundos antes de que salga corriendo hacia donde sus amigos se encuentran jugando mientras esperan a que las puertas abran.
"¡Jeongguk, buenos días!" es saludado por el tío de uno de los amigos de Wonwoo.
"Félix, hey" le sonríe ligeramente. "¿Te ha tocado de nuevo traer a Minwoo en lugar de tu hermana?"
El rubio hace una mueca bastante linda, bufando levemente. "Siempre igual, parezco su padre en lugar de su tío" se queja, aunque en realidad adora a su sobrino y no le molesta hacer eso. "¿Cómo van tus prácticas en la empresa de los Kim?" pregunta, pues se conocieron en la universidad y se hicieron amigos por todas las clases que compartían juntos.
"Están bastante bien y el ambiente es bueno, me gusta" responde con sinceridad. "¿Qué hay sobre las tuyas?"
"Son cansadas" murmura, atrapando su brazo y apoyándose en él. "¿Crees que puedas estar libre este viernes para cenar o algo? Hace mucho que no hacemos nada juntos."
Jeongguk muerde el interior de su mejilla, sabiendo lo que esconde tras esas palabras. Hace meses que evita quedar con él tanto como antes por su confesión estando de fiesta donde le dijo que tenía sentimientos románticos y quería que le diera una oportunidad. "Tengo planes para salir con Jimin pero podemos ir a cenar antes si quieres" se siente mal de negarse siempre, por lo que una cena no les hará mal.
"¡Genial!" el timbre suena y los niños se ponen en fila. "Estos mocosos, ni se despiden de nosotros."
Una sonrisa se posa en sus labios, viendo a su hermano desaparecer de su campo de visión y echándole un vistazo a su reloj, palmea el hombro del rubio. "Me voy o llegaré tarde, todavía tengo que pasar por la cafetería para comprar el café de la señora Kim."
"Uh, esa bruja... Ni que fueras su asistente personal."
Jeongguk finge una sonrisa, recordando lo insoportable que es Minhee la gran parte del tiempo. "Nos vemos, Félix. Háblame para decidir la hora y lugar del viernes."
En momentos como estos agradece que el colegio no esté lejos de la empresa y pueda coger el bus para bajarse dos paradas más adelante, corriendo como siempre hasta la cafetería favorita de Minhee y recogiendo el pedido que hace por su móvil para evitar la cola. Abriendo la puerta del lugar se encuentra con su bebida ya en la barra y con la sonrisa de Jia. "Dos minutos tarde, corre o Kim Minhee tendrá una excusa para gritarte" le advierte.
"Gracias, Jia" se despide con un movimiento de cabeza, casi chocando con Jihyo en la puerta. "Oh, ¿vienes a ver a Seokjin?"
La castaña le abraza. "Vamos juntos, espera que pida mi café" le pide.
"Pero-"
"Pero nada, tienes excusa" se engancha de su brazo para que no se escape. "¿Cómo estás? Escuché por Jin lo que pasó ayer con la llegada de Taehyung."
Esperan en la cola que tanto quiso evitar el pelinegro antes y se remueve en sus pies al escuchar el nombre del pelirrojo. "Sorprendido" responde. "¿Tú lo sabías?"
"Mmhm, sí. Jinnie me lo contó y les escuché hablar por teléfono bastantes veces durante estos años" aprieta los labios en una fina línea. "Cuando me enteré de que iba a irse me pareció muy feo por su parte el que lo hiciera sin decirte nada, pero tras escuchar lo que ha pasado en Italia... ¿Piensas hablar con él?"
Su ceño se frunce con lo que dice, pero nuevamente, no tiene ni la menor idea de lo que ha vivido en Italia y mentiría si dijera que no le interesa. "¿Qué le pasó en Italia?"
"Eso vas a tener que preguntárselo a él" le pincha en la cadera. "Pero si no fuera por sus amigos, no sé si Tae hubiera podido llegar hasta donde está ahora" puntualiza. "Es lo único bueno que ha podido sacar de esa experiencia. El principio fue duro para él."
El menor baja la mirada hacia sus zapatos, sintiendo su pecho apretarse. "No sé como acercarme a él, Jihyo."
"No lo pienses mucho porque cuanto más lo hagas, más incómodo va a ser" le tranquiliza. "Solo hazlo como lo hubieras hecho hace dos años" finalmente es su turno de ordenar, por lo que dejan el tema de lado.
...
HOLAAAA
Punto de vista de jeongguk y aunque no sé cómo va a ser la conversación entre el taekook, pasará pronto jeje o al menos se intentará. Todos decirle gracias a Jihyo o.o
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