A light to call home ღ kookv

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Tras lo ocurrido el martes por la tarde con la novia del menor, Jeongguk no vuelve a tener contacto con él hasta el jueves tras terminar la práctica con el equipo. Pudo verle en clases pero solo eso, pues volvió a sentarse en la mesa de los populares con Yoorim y a veces, Yoongi, quien se disculpó con ellos por dejarles de lado pero no queriendo dejar solo a su mejor amigo con su novia.

Jeongguk comprendió que hay cosas que obviamente no sabe y no le importó que Yoongi quisiera estar cerca de Taehyung por si le necesita en algún momento. Sin embargo Hoseok continuó pasando los tiempos libres, tanto con él como con Yeosang y algún otro estudiante que se les unen para jugar al baloncesto.

Mentiría si dijera que no ha notado la falta de compañía de Taehyung, pues tras haberse perdonado por el comienzo que tuvieron habían comenzado a parecer amigos de verdad y ahora por culpa de Yoorim no han hablado por dos días, inclusive el castaño le ha estado apartando la mirada cada vez que sus ojos se encontraban y eso es probablemente lo que más le ha molestado de todo. ¿Ha hecho malo para que no quiera ni mirarle? No lo sabe, pero está dispuesto a descubrirlo ahora que están en los vestuarios.

"Taehyung" le llama, colocándose tras él y que no se le escape. La tensión en el cuerpo del menor es obvia para él, por lo que deja escapar un suspiro pesado. "¿Estás bien?" decide preguntarle tras pensarlo bien, no queriendo indagar de golpe en el asunto, aunque también preocupado porque en el entrenamiento parecía distraído, siendo regañado por el entrenador.

"Perfectamente" responde el castaño, cogiendo una toalla de su mochila e intentando irse por la derecha al darse la vuelta, mas siendo retenido por el cuerpo del mayor. "¿Puedo ir a ducharme?" la capucha de su sudadera, la cual no se ha quitado en ningún momento tras haber llegado al pabellón, le tapa el rostro en su mayoría.

El ceño de Jeongguk se frunce levemente por su actitud tan indiferente. Siente un picor en su mano al elevarla a la altura de la cara de Taehyung, alejando la tela de la sudadera de su lugar y dándole paso a un cabello castaño y despeinado como nunca antes lo había visto. Taehyung no se mueve ni un centímetro, con sus ojos posados en el suelo y su labio apresado entre sus dientes con mayor fuerza de la necesaria.

"No te creo" murmura con calma en su voz mientras con sus dedos cepilla su cabello revoltoso. "Cuando me respondas con la verdad te dejaré ir a la ducha, hasta entonces quédate conmigo. ¿O tienes prisa para irte?" inquiere en voz baja.

Aparta el flequillo de los ojos del castaño, deseoso de poder verle a los ojos, los cuales no han dejado de rehuirle desde hace dos días. Con sus manos se atreve a ahuecar sus mejillas, elevando su rostro y observándole con parsimonia, como si estuviera buscando la respuesta al por qué de su distanciamiento. Su pulgar roza el labio inferior al verlo rojo y maltratado. "Vas a hacerte daño, para" pide, recibiendo finalmente la mirada que tanto esperaba.

La respiración de Taehyung sale irregular por las acciones del pelinegro, que no hacen más que provocar el golpeteo fuerte de su corazón contra su pecho, nunca antes habiendo recibido unas caricias con tanta delicadeza por parte de nadie ajeno a sus hermanos. "Lo siento" se limita a decir sin saber exactamente por que se está disculpando.

"Solo no te hagas daño" dice Jeongguk, quien supone que la disculpa es por haberse estado mordiendo el labio hasta casi hacerse heridas. "Puedes contarme lo que te esté molestando, Taehyung. Puedo ver en tu rostro como algo te está perjudicando de alguna manera."

"No es nada" coloca sus manos sobre las del mayor, que siguen sujetando su rostro con delicadeza. Le entrega una pequeña sonrisa al notar como su ceño cada vez es menor. "¿Puedo pedirte algo?" 

Jeongguk asiente, ladeando la cabeza con duda. "¿Quieres ducharte conmigo?" escucha, provocando un sonrojo en sus mejillas al no esperar tal petición.