Prince Jeon - JK

30. Fiancé

-¡Princesa, despierte!

Rodé por la cama, necesitaba dormir demasiado. No echaba de menos para nada esos golpes y gritos pidiendo que despertara temprano para asistir a clases y ayudar en palacio. Me levanté y observé la habitación, quería cambiarme cuanto antes de dormitorio. Mi habitación se vio afectada por el incendio y por tanto Taehyung la había remodelado y pintado de rosa además de haber puesto muebles realmente horteras.

Agarré una sudadera para ponerme sobre la camiseta azul con dibujos de dibosaurios anteriormente de Jimin y ahora mía. Dormía con la ropa de Jimin, ya era parte de mí aquella ropa. Llevaba unos pantalones negros cortos y sueltos bajo la sudadera roja de Jungkook. Abrí la puerta encontrándome con una sirvienta con varias sábanas en sus manos.

-La profesora de modales está echando fuego, princesa.

Esa mujer se la pasaba echando humos por mi culpa. Había pasado una semana, habíamos estado reorganizando las ciudades y pensando en como fusionar los mercados y creando nuevas carreteras para conectar ambos países. Jungkook también había empezado la creación de un campamento en el valle por el que cruzamos hacia la capital enemiga. También algunos proyectos para unir ambos países ya que había muchas zonas despobladas. En ese tiempo también volvieron mis clases como princesa y las visitas de Adam para escribir unos cuantos contratos con los reinos aliados del países del Sur que querían aliarse con nosotros o para hablar sobre la madre de Jungkook que seguía entre rejas.

Había tanto que hacer...y a mí en vez de ayudar me tocaba ponerme a aprenderme tipos de tenedores.

Salí de la clase de modales con una sonrisa en el rostro tras poner de los nervios a la profesora. Entré a la habitación y me puse un cubrebocas y una gorra para salir un rato a la ciudad o a la zona rural. Tenía dos horas libres en el horario y debía aprovecharlas. Bajé como persona civilizada, por las escaleras; no porque quisiera, sino porque el árbol frente a mi habitación ardió en llamas. Salí del palacio y sonreí satisfecha al entrar a la ciudad. Ya estaba más alegre que hacía unos días, varios edificios estaban en ruinas pero de igual forma las personas caminaban por la calle como si nada hubiera pasado. Vi a los chicos que andaba buscando y corrí a ellos saltando sobre Mark.

-¿Rei?

Asentí levantándome la gorra y bajándome el cubrebocas. Me abrazaron y dieron saltitos.

-No sabes lo que te extrañábamos-dijo Jackson aún abrazándome.

—Yo también.

—Tu pelo está...

—Oh, tuve que teñirlo por unos asuntos; me lo pondré negro de nuevo en cuanto tengo algo de tiempo libre.

Mi cabellera seguía castaña claro, pero ya se había rizado como siempre.

—Cuéntanos, ¿cómo estalló la guerra?—preguntó Jackson.

—Eso, eso.

Les conté lo que ocurrió antes de que estallara la guerra. Al parecer la mayoría del pueblo no sabía la historia completa.

-Escribiré algo donde explique todo supongo, la población debería estar enterada-dije mirando como Mark practicaba un truco con el skate.

-Están haciendo libros, ya sabes que esto se estudiará en el futuro. ¡Serás famosa!

No pude evitar reír al imaginarme a los niños aprendiéndose mis tácticas y mi historia.

-Debo irme, tengo mucho trabajo-dije levantándome del banco.

-¿Cuándo serás la Reina Jeon?

-No lo sé pero os invitaré a la boda. Primero me gustaría centrarme en la reconstrucción y reorganización del reino.