—Cariño, tienes que despertar ahora si quieres tener tiempo para tomar una ducha, Johnny nos matará si llegamos tarde a su partido. —Taeil dice gentilmente, frotando el hombro de Ten.
Ten gruñe y se da la vuelta, mirando con sus ojos almendrados llenos de lagañas hacia Taeil.
—No tomaré un baño, ¿Puedes venir a acurrucarte conmigo por una media hora más? —él pregunta.— Me pondré un beanie.
Taeil sonríe, esperaba que Ten dijese eso, tira las sábanas para adentrarse en ellas. Ten lleva un viejo pero acogedor suéter y un pijama de franela, pero incluso con el pesado edredón aún siente frío cuando Taeil lo sostiene entre sus brazos. Este sisea un poco cuando Ten desliza sus helados pies hasta la basta de sus vaqueros pero solo lo sostiene más cerca.
—Estás jodidamente frío, Tennie. —Taeil dice y Ten puede escuchar el ceño fruncido en su voz.
No responde, solo se acurruca más y cierra los ojos mientras Taeil dibuja patrones en su espalda. Ten dormita un poco, cómodo y cálido al lado de su mejor amigo. Había a Johnny madrugar prendiendo la licuadora para preparar su batido de proteínas. Siempre ha sido una persona madrugadora y sabe que probablemente ya arregló el departamento y dejó la ropa lavada. Siempre termina haciendo lo que sea que el equipo quiera antes de los partidos, Ten y Taeil no harán más que verlo por un minuto antes de que comience el juego.
—Bien, tenemos que levantarnos. —Taeil suspira, muy pronto para el gusto de Ten.
—Yo ni siquiera sé por qué están teniendo un partido de fútbol cuando hay nieve en el suelo. —Ten se queja en el hombro del mayor.
—Deja de quejarte, es el partido del campeonato. —Taeil responde pero Ten puede escuchar la sonrisa en su voz.— El último hasta la primavera.
Ten deja escapar un gemido y se deshace del abrazo acogedor de Taeil, estirándose hasta que sus articulaciones den un satisfactorio crujido. Se levanta y frota sus párpados, manifestándose la picazón matutina en su garganta.
Taeil se sienta y sonríe con cariño hacia Ten, a pesar de que sabe que debe verse como un desastre. Taeil está completamente vestido y su flequillo impecable como siempre. La cosa que Ten más ama de Taeil son sus ojos; del color de la miel y enmarcados por largas pestañas. Son hermosos pero también destellan amabilidad.
Ten tiene una cosa por esa clase de ojos. Siempre ha dicho que la razón por la cuál eligió a Johnny para ser su mejor amigo el primer día de clases del primer año fue porque tenía la clase de ojos que nunca antes había podido ver en alguien. Los de Johnny son de un café profundo pero tan cálidos que Ten solo supo que podía confiar en él. Es la misma razón por la cuál eligió a Taeil en su primer día de escuela. Aunque este era callado y Ten en ese entonces, ruidoso, echó un vistazo en los ojos del mayor y supo que podía confiar en él también. Johnny desconfiaba un poco de Taeil al principio, porque siempre había sido el centro de atención de Ten, entonces el mayor viene y hace clic con el pelirrojo tan rápidamente. Aunque siempre ha tenido mucho amor para dar; Johnny muy rápido se pudo dar cuenta que había espacio suficiente para ambos.
Ten da un traspié fue de la cama hacia el armario, decidiendo por un par de pantalones vaqueros y un suéter color blanco cremoso de tejido de punto. Taeil ha ido hacia la cocina mientras Ten cierra su puerta, solo para estar seguro, antes de desnudarse y deshacerse de su ropa. Toma su beanie gris con un pompón en la parte posterior y se lo lleva al cuarto de baño. Cepilla sus dientes y lava su rostro, solo mirando el espejo para pasar un cepillado sobre su cabello y arreglar el flequillo de su beanie.
ESTÁS LEYENDO
fading│𝘁𝗮𝗲𝘁𝗲𝗻
FanfictionTen sabe acerca de la belleza: La combinación de las cualidades que agradan a los sentidos estéticos. Él crea esa combinación todos los días en las prendas que diseña, mientras estudia acerca de moda en la universidad. El corte del diseño, el color...