CAP 4

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Es domingo por la tarde y me encuentro en mi habitación, las palabras de mi mejor amiga no ha abandona mi cabeza en todo el santo día desde ayer, eso me tiene agotado y estresado por lo que sin remedio empiezo a llorar, otra vez.

- ¡Jimin la cena!

El grito de mi madre llega hasta  mí y de inmediato trato de controlar mis hormonas. Todo es un desastre, soy un desastre, uno que no tiene idea de que hacer.

Bajo las escaleras prácticamente corriendo y llego a la cocina donde mi madre ya tiene la cena lista sobre la mesa, en silencio ocupo mi lugar y con la cabeza gacha me dedico a comer lo que ella preparó.

Quiero que me diga algo, quiero que me diga que hacer, quiero un consejo de su parte pero ella solo ha callado y ha evitado el tema en todo el día, se que me está dando mi tiempo para pensarlo y tomar mi decisión, pero yo no puedo con esto solo, la necesito.

- ¿Mamá? – la llamo dejando mis cubiertos a un lado de la mesa, todavía no soy capaz de mirarla a los ojos por lo que me mantengo con la cabeza gacha. Ella deja salir un sonidito indicándome que prosiga – en mi situación ¿Cuál hubiera sido tu decisión? – le pregunto y esta vez la miro, porque ella detuvo todos su movimientos para mirarme también.

- ¿Cuál crees que fue mi decisión?

Cierto, me eligió a mí. Muerdo mi labio inferior para evitar llorar.

- Y si te estás preguntando que si en algún momento pasó por mi cabeza el abortar – mi madre prosigue – pues si, era demasiado joven cuando quedé embarazada, mis padres me echaron de casa tan pronto se enteraron, pero después de algunas noches en la calle mi abuela me encontró y me trajo aquí, empecé a ayudarla en su negocio de las flores y logré juntar el dinero necesario para deshacerme de ti, pero me dijeron que era demasiado tarde, que era muy riesgoso y no tuve otra opción que quedarme contigo, cuando te tuve también vi la posibilidad de darte en adopción, no quería ser egoísta y permitir que te quedes conmigo en la miseria, pero creo que el defecto de tu madre es ser muy egoísta porque no te aparté de mi lado desde el momento que sentí que te perdía cuando enfermaste, lo mas lógico hubiera sido entregarte a una familia rica en ese momento, pero me aferré a la idea de que yo podía darte todo lo que te hiciese falta, tu bisabuela me ayudó a cuidar de ti en los primeros meses, hasta que su diabetes empeoró y entonces no tuve de otra que dejarte en los nidos mientras yo iba a la escuela por las mañanas, trabajaba por las tardes y en noche te recogía y traía a casa, ese fue nuestra rutina incluso después de la muerte de mi abuela, ella nos dejó la casa y una responsabilidad mas porque teníamos que pagar la hipoteca. Nada fue fácil Jimin, nada ¿Pero sabes que? En medio de toda esa ajetreada agenda, lo único que esperaba era que el día terminase e ir por mi hijo al nido, llegar a casa, bañarlo, darle su papilla y acurrucarnos juntitos en la cama, eso me llenaba de fuerzas para afrontar el día a día con una sonrisa en mi rostro y darle la cara al mundo,  porque sabía que te tenía, porque sabía que estabas allí esperando por mi, trabajé duró para mandarte a una buena escuela, comprarte las mejores ropas, los mejores juguetes, siempre quise lo mejor para ti que olvidé lo que realmente importa, me olvidé estar aquí, olvidé decirte y recordarte lo mucho que te amo, olvidé escucharte, olvidé ver que ya crecías y hace mucho dejaste de ser mi niño…

- Mama… - el nudo en mi garganta no me permite decir eso que quiero gritar con todas mis fuerzas, la amo, la amo tanto.

- Sea cual sea la decisión que tomes, yo voy a estar contigo ¿De acuerdo? No voy a permitir que abandones tus sueños por pensar que estás solo en esto, porque hijo, tu puedes hacer mucho si tienes a las personas correctas en tu vida y yo soy tu madre, me duele esto pero eso no significa que se nos acabó el mundo, todos nos equivocamos, el secreto está en como nos lo tomamos y lo afrontamos.

- Gracias mamá.

La cena continúa en un silencio en el que ambos ya estamos acostumbrados, es la primera vez que mi madre se permite hablar desde lo muy profundo de sus emociones y es por eso que esto lo voy atesorar como lo mas importante dentro de mi pecho, porque también se que son escasas las posibilidades de que vuelva a ocurrir.

Cuando la noche llega yo ya estoy nuevamente en mi habitación dando vueltas de un lado a otro.

Un hijo, Diooooooos que complicado todo, miles se sensaciones y emociones se apoderan de mi, miles de imágenes aparecen en mi cabeza, algunas me gustan y otras no tanto.

Tomar una decisión, una que cambiará mi vida a partir de ese momento.

Y también la de él… por inercia giro mi cabeza hasta mi buró al lado de mi cama, allí yace mi celular y no tardo ni dos segundo en llegar a el, abro mi lista de contacto y bingo.

“Kook”

Sea cual sea su respuesta a esto, debe de saberlo…





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Capítulo cortito, pero es para lo que alcanzó la inspiración de hoy😁.

Y antes que alguien me salga con que la madre lo está manipulando sentimentalmente, NO lo está haciendo. Ella le está dando a decidir entre dos opciones contando su experiencia y no usó azucar en sus palabras, lo dijo tal cual, ""las buenas y malas""

Aquí Shinhye es una muy buena madre. (Aclaro antes que me la ataquen😔)

Bueno, nos leemos prontito.

"PAPÁ EN PAÑALES" (Kookmin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora