Esta historia corta es la continuación del One Shot 16° que escribí sobre #ChrisEvans
Aquí voy a desarrollarla mejor ♥
Espero que les gusten y por favor, no utilicen la historia sin permiso.
GRACIAS.
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#2 en Cevans...
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La noche había caído y la verdad es que no estaba de humor para quedarme en la casa de Lena mas tiempo. Como ella bien sabia, aquel día era el primer día del padre que celebraría sin mi papá y por eso me había invitado a almorzar a su casa para que no estuviera sola. Con la excusa de que quería aprovechar el tiempo para terminar cosas de la universidad me fui a mi casa, aun cuando sabia que probablemente me sentiría peor.
Mientras observaba, sin muchas ganas, que podría hacer de cenar, el timbre de la casa sonó. En cuanto me acerqué a la puerta, con la intención de ver quién podría estar llamando, escuché dos voces conocidas.
—¿Y ustedes qué hacen aquí?—pregunté con una media sonrisa al abrir la puerta y encontrar a Lizzie, y Chris ahí parados.
—Delivery—exclamó divertida Lizzie al levantar con Chris dos bolsas de una casa de comida que estaba cerca de nuestro departamento.
—Fue su idea—dijo Chris entre risas al pasar con Lizzie y dejar lo que trajeron en la mesada.
En cuanto cerré la puerta, mi pequeña corrió hacia mi y saltó a mis brazos.
—Oh dios, cuanto amor—exclamé con satisfacción al abrazarla y esconder mi rostro en el hueco de su cuello.
—¿Estás bien?—susurró con dulzura mientras me abrazaba como un koala.
—Lo estoy—respondí con una triste sonrisa, mirando su hermosa carita—. Solo lo extraño
Lizzie asintió levemente con la cabeza y me dio un beso en la mejilla que duró varios segundos mientras yo solo cerraba los ojos. No quería estas triste frente a ella pero Lizzie, mas que nadie en el mundo, sabia lo que mi papá significaba para mi.
—¿Cómo les fue hoy?—pregunté con interés e intentando cambiar de tema—. ¿Conociste a tus primos?—sonreí con dulzura al bajarla y acariciar su mejilla.
—Si y son geniales—aseguró Lizzie contenta—. Oh tienes que ver lo que me regalaron—exclamó al ir hacia su mochila.
—Hablando de regalos—comentó Chris con una tierna sonrisa al hacerme señas para que me acercara—. Gracias por el álbum y la carta—susurró al abrazarme—. Me encantó
—De nada, me alegro que te haya gustado—aseguré al corresponder su abrazo, el cual sin poder creerlo me hizo sentir mas tranquila de lo que pensaba.
Luego de cenar en el living mientras veíamos Lilo & Stich, Lizzie se quedó dormida en los brazos de Chris. Claramente estaba exhausta por todo lo que había hecho en el día con sus primos y eso solo hacia que me corazón estallara de alegría.
—Voy a llevarla a la cama—susurró Chris al tomarla bien en brazos y levantarse despacio.
Dejando mi vaso en la mesa ratona, me levanté y seguí a Chris para poder abrir la cama de Lizzie. En cuanto estuvo tapada solo se dio media vuelta y abrazó con fuerza a uno de sus tantos peluches.
