¿Solo amigos?

510 30 2
                                    

POV Legoshi

-Esta mañana muy temprano ocurrió una tragedia en la calle Iguni de la ciudad de Cebú, se sospecha que un grupo de carnívoros devoró a la víctima Linda una gacela de 22 años- la señorita de las noticias habla a través del televisor y todos estamos atónitos.

-No puedo creer que el mundo se haya vuelto un lugar tan peligroso, ¿no lo creen?- Jack es el primero en romper el silencio, hemos dejado el juego de damas chinas de lado por tan impactante noticia.

-Esto no es bueno- dice una gacela que jugaba contra nosotros.

-Estaré en mi habitación- el acompañante de la gacela se levanta abatido dejando la partida a la mitad.

-Considérenlo una victoria- la gacela sigue a su compañero y se van sin más, lo entiendo lo que menos quieren ahora es estar con carnívoros.

-De todos modos íbamos a perder- digo intentado que el ambiente sea menos tenso pero ellos me ignoran.

Veo a Jack y su semblante se tiñe de tristeza, le doy algunas palmadas en la cabeza para hacerlo sentir mejor pero sé que es en vano.

-Anímate Jack, pasa todos los días- Durham se nos une intentando animar a Jack al igual que yo.

Honestamente, los carnívoros a nos acostumbramos a la tensión.

Camino por los pasillos pero un grito me saca de mis pensamientos.

-¡Basta, déjenme en paz!- es una chica, levantó la mirada y me encuentro con dos chicos jalando a una chica.

Lo que le dicen no suena nada amistoso.

¿Como puedo ayudar?
¡Oye tú basta! No eso no suena nada bien sobre todo viniendo de un extraño entrometido.

Me acercó decidido a ayudarla.

-Disculpen compañeros- llamo su atención de una manera amable -oigan soy su hermano mayor, ¿tienen algún problema con ella?- miento.

-¿Eres su hermano?- los dos chicos me miran temerosos.

-Si así es- digo mintiendo pero cuando veo a la chica no nos parecemos en nada si bien ambos somos lobos grises pero no hay ningún parecido entre ambos.

-¡Mentiroso ustedes ni siquiera se parecen!- vamos Legoshi piensa en una excusa creíble.

-Yo me parezco a mi padre y ella a nuestra madre, ¿estas bien?- me pongo de cunclillas para verla a los ojos.

-Te lo agradezco... hermano- ella me sigue la mentira y los dos chicos al fin se van.

-Discúlpame me siento mal por haber mentido- agacho la cabeza apenado, tal vez ella no quería que dijeras esa mentira.

-Pero tú mentira me salvo, muchas Gracias enserio- su voz esta llena de agradecimiento pero yo aún me siento mal.

-No pude ignorar cuando dijeron que eras un lobo gris, desafortunadamente los bravucones se creen todas las noticias- recuerdo cómo nos trataron esos dos herbívoros antes mientras veíamos las noticias -eres de primer año, ¿cierto?- intentó cambiar el rumbo de la conversación-cuando pases a segundo estarás acostumbrada- volteó a verla y aún está llorando y la entiendo.

-¿O sea que tendré que acostumbrarme a esto, es enserio?- las lágrimas no dejan de brotar de sus ojos -este lugar es aún más hostil que la secundaria, es muy cruel, no pueden tratarnos así, discúlpame me siento frustrada me lo tomo todo de manera muy personal- su ira es evidente tanto que sus manos forman puños apretando la falda de su uniforme.

-Si te sientes así te daré un consejo, es importarte que te aferres a ese sentimiento, yo me harté de sentirme frustrado, empecé a fingir que me había acostumbrado pero si te permites sentirlo te harás más fuerte- le sonrío para animarla un poco -en fin, hasta luego- me incorporo para retomar mi camino.

Come on to play Donde viven las historias. Descúbrelo ahora