IMPRESIONES | VOLKACIO

| 14 | Chapter

Song: 

EX'S AND OH'S

Lyrics:

- Get out

- Are you serious?

I had me a boy

Turned him into a man

[De portada la inspiración de los Outfits de Horacio y Viktor respectivamente]

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Existe cierto poder en la ropa, esta no solo cumple una función básica de proveer protección, para Horacio era su armadura, era su grito de batalla, su forma de expresarse, su declaración ante el mundo. Mucho se podía leer de la ropa que él usaba, porque era así, Horacio gustaba de vestir bien, y expresarse a través de ella.

Aquella mañana mientras podía sentir el aroma de otoño en el aire, él había decidido ir a su piso, después de todo en este era donde estaba su gran armario, y donde estaban las piezas selectas que necesitaba.

Tras 24 horas de completo silencio por parte de Viktor, Horacio necesitaba urgentemente hacer algo, porque en su mente comenzaba a crear historias, bien dicen que el peor enemigo es la imaginación, Horacio tenía mucha de esta, sumado a la inexperiencia en el área de parejas, además de los recuerdos de su juventud, se puede decir que su cordura estaba brutalmente asediada.

Así que necesitaba urgente buscar una forma de sentirse en control, eso lograba la ropa.

Sentir la textura de las medias envolver sus torneadas y largas piernas le hizo sentir sexy, el mono de cuero audaz, este tenía un fitting tal que se amoldaba a su curvas y resaltaba su trabajado cuerpo, calzó una botas militares con un tacón no mayor de 5 centímetros, esta vez descartó el los colorantes en su cabello, lo mantuvo del color cenizo, y no lo peinó con su habitual cresta, esta vez se decantó por algo más sofisticado, peinó su melena hacia atrás, aplicando fijador se aseguró que este se mantuviese en su lugar, delineó los ojos, maquilló su rostro resaltando sus pómulos, todo en él eran aristas marcadas, aplicó un color nude en sus labios. Pero lo que realmente completaba la imagen era el largo abrigo rojo, aquel que lo protegería del frío, pero a su vez con su color jugaría con el de la temporada. Estaba listo para salir al mundo.

Las inseguridades se esfumaban mientras miraba su reflejo, mientras escondía un cuchillo en sus botas, colocaba una pistola en su espalda, y un revólver en el bolsillo interior del abrigo. Dedicando una última mirada en el espejo cerró los ojos, necesitaba organizar su mente, enfocarse, no podía dejar que los pensamientos se desborden, solo lo volverían imprudente, insensato, descuidado. Controló su respiración, recordó el entrenamiento al que fue sometido, el cual le ayudaba a canalizar la impotencia que producía el caos a su alrededor, de esa manera aquellas energías lo mantendrían enfocado más no airado.

Por un momento los demonios de su juventud comenzaron a gritar más fuerte y cerró los ojos intentando respirar de forma pausada.

— Mamá, basta ya, por favor.

— No lo entiendes, no lo harás hasta que estés en mi situación.

— Pues haces bien en emularlo en mi.

— Horacio... no te atrevas a juzgarme, no entiendes lo que es ...

— ¿Amar? Mamá, te amo pero tu...