|20| Chapter

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Song: 

Salvatore - Lana del Rey

Lyrics:

(Ah-ah-ah-ah)

Cacciatore

(La-da-da-da-da)

Limousine

(Ah-ah-ah-ah)

Ciao amore

(La-da-da-da-da)

Soft ice cream.

[De portada la inspiración de los Outfits Invierno de Horacio y Viktor respectivamente]

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— Priviet

Horacio que acostumbraba andar con sigilo, se preguntó cómo es que aquel hombre le había sentido acercarse. Cuando lo observó a lo lejos podía ver que este se encontraba sentado en aquel sillón con la mirada perdida, quizá por eso quiso sorprenderlo con su suave andar. Pero incluso antes de que el vocaliza un "Hola", el de cabello cenizo se le adelantó.

Pero mientras Viktor elevaba la mirada, y el menor visualizó el cansancio en aquel rostro, cualquier queja se diseminó, las bolsas bajos los párpados, incluso la delgadez que parecía haberse acentuado en estos últimos días, si no fuese por el cambio de ropa que Danni había preparado para él, no se imaginaba como estaría vestido. Por eso quizá con la mano sana, le tomó de la barbilla y la elevó suavemente para poder así acercar aquel rostro a los labios del menor que ya acortando la distancia entre ellos, dejó un suave beso en la frente de él.

El gesto tierno provocó una suave sonrisa en ambos, una que nació de la ternura del gesto, una que parecía decir. "No estás solo, ya estoy aquí". Y entendió cómo es que él supo de su presencia, había una especie de conexión entre ambos, una que parecía despertar cuando ellos estaban en las cercanías. Como si gravitaran para estar juntos.

Mientras Horacio tomaba asiento a lado de él y ambos se sostenían las manos. El aún en recuperación recordó cómo fue volver a reencontrarse.


All the lights in Miami begin to gleam

Ruby, blue and green, neon too

Everything looks better from above, my king

Like aquamarine, ocean's blue

[Salvatore - Lana del Rey]

Su mente aún estaba confundida, para Horacio fue como despertar de una pesadilla y regresar a la realidad, aunque la sensación de que solo fuese un sueño y regresará a su antigua vida. Aquella confusión fue el distractor para que la condición de su cuerpo fuera puesta en segundo plano, después de todo estar herido para el de cresta era tan natural, que no temía por ello.

Incluso cuando oía las palabras de alivio ante su lucidez no supo cuán preocupante era el diagnóstico hasta que habló con el médico.

— Al inicio creíamos que dañó un tendón, pero no fue así, si no una arteria, de ello la facilidad con la que desangrabas, pero el mayor problema fue un coágulo, este no permitió la irrigación en la mano por un tiempo.

IMPRESIONES | VOLKACIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora