~ Capítulo 17 ~

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●ROSI●

Que se supone que debo responderle a eso? Me tiemblan las manos y en la línea solo se escucha su respiración impaciente por mi respuesta.

-Esta bien, acepto.

Dentro de unas horas no recordara nada de esto asique porque no seguirle el juego?

-Bien -Suspiro- lo primero que tienes que hacer es decirme que ves a tu derecha.

-Mhm... emm, árboles?

-Que más David?

-Carteles tal vez...

-Como que tal vez? David si quieres ganar tienes que esforzarte.

-Emm... y si primero tenemos sexo y después jugamos.

-Primero quiero saber dónde estás.

-O podemos tener sexo mientras jugamos, que te parece?

-David ya!

Y sin darme cuenta estaba gritándole a un teléfono a las 3 de la madrugada.

-Señorita se puede saber que hace?

La vez de Marco interrumpió mi llamada con David.

Rápidamente voltee para verlo frente a mi con su traje negro habitual.

-Yo... estoy hablando con David. Esta ebrio.

Me arrebató el teléfono y se lo llevó al oído.
No me opuse claro. Además, si hubiese sabido donde estaba David, tampoco podría haberlo ido a buscar, apenas me dejan salir al jardín.

-Mhm.

No llegaba a escuchar la conversación pero solo por las caras de Marco me daba cuenta de que algo no iba bien.

-Idiota, voy para haya -Y colgó.

-Que te dijo? Donde esta?

-No es de su incumbencia -Se alejó de la sala y camino hacia la puerta principal de la casa.

-A donde vas?

Me ignoro totalmente y cerro la puerta en mi cara.

-Idiota.

~~


Unas horas más tarde.

Estaba en la cocina comiendo un poco de helado, estaba nerviosa, no se exactamente porque, pero lo estaba.

Al oír el sonido de la puerta rápidamente salí de la cocina y caminé, más bien corri hasta la entrada.

-Hola linda -David estaba... terrible.

-Donde estabas? -Me siento como una esposa celosa.

-En un mundo paralelo. Pero ahora estoy contigo.

-Estaba en el bar cerca del banco -Hablo Marco

Empujo a David dentro de la casa y volvió a hablar- A partir de aquí, ya no es asunto mío.

Y se fue.

-Sera una noche larga -Rio David.

-Ya casi es de día.

-No te creo -Camino hasta la ventana y observo el paisaje.

-Necesitas una ducha vamos -Lo tomé del brazo y lo jale hasta las escaleras.

-Eres muy hermosa sabias?

Ries- David, estas borracho y si tu hermano se entera te matará a ti, y luego vendrá por mi, asique compórtate.

-A la orden.

Subimos hasta su cuarto y lo tumbe sobre la cama mientras yo le preparaba una ducha de agua fría.

-Vamos, arriba -Intente levantarlo.

-No -Sujeto mi muñeca y me jalo hasta quedar sobre su pecho.

Sus ojos se impregnaron en los míos, me temblaba el cuerpo, lo suficiente como para no dejarme levantar.

-La... la ducha te está esperando -Entre en razón y me levanté junto a él.

Caminamos hasta el baño y estaba a punto de entrar.

-Esta fría?

-Te hará mejor, créeme.

-No me meteré ahí.

-David...

-No.

Salio del baño y volvió a recostarse en la cama.

-En cualquier momento vendrá Álvaro y te matará.

Suelta una risita- Me lo imagino, gritando como un militar. "Eres un inútil, mírate, apenas puedes mantenerte de pie" -Dijo imitando la voz de Álvaro.

Me causó mucha gracia verlo en ese estado, delirando y gritando como un loco.

-No eres un inútil -Dije.

-Segun el si.

-No lo hagas caso -Me senté a su lado.

-No me voy a duchar en el agua fría.

-Lo sé...

-Deberias cerrarla.

-Tienes razón -Me levanté y me acerque a la ducha para cerrar el grifo.

Pero antes de que logre alcanzarlo unas grandes manos tomaron mi cintura y me empujaron dentro.

-AAA.... CARAJO... -El agua estaba totalmente helada.

David entró detrás de mi y me empujó hasta que ambos quedemos bajo el choro de agua.

-Te voy a matar!

-Si si, lo que tu digas.

Tomo el shampoo y me lo vacio en la cabeza.

-No te creo!

David ríe y se apoya contra la pared como un niño castigado.

Mi ropa estaba totalmente mojada y fría, hacia mucho frío.

-Creo que ambos necesitábamos una ducha.

-Te odió!

-Segura? -Se acercó más a mi.

-Si. Muy segura -Di un paso atrás topándome con la pared.

-No hay donde escapar.

-Tampoco intentaba hacerlo.

-Mhm -Apoyo sus brazos contra la pared acorralandome.

-Davi-..

Puso su dedo sobre mi labio para callarme.

-No digas nada.

Silencio.

Mucho silencio en ese instante.

El agua seguía corriendo, pero ya casi no sentía lo fría que estaba.

-Puedo besarte? -Pregunto.

-Yo... David no puedo.

-Eres demasiado buena linda...

-Estas borracho.

-Acaso es una excusa para no besarme?

No respondí.

🤍🤍

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