27. El origen de todo

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20 años antes

Solo escuchaba los sollozos de mi madre, los cuales rompían mi corazón.

Siempre escuchaba a mi madre llorar cuando creía que mi hermana y yo estábamos completamente dormidos, el corazón de mi madre se rompía a mil pedazos mientras mi padre lo ignoraba yéndose a pasar el rato con sus rameras.

Mi madre no merecía sufrir todo eso.

Los sollozos de mi madre se detuvieron y escuche como una puerta se cerraba, Sali de mi habitación y me dirigí al lugar del cual provino el ruido, en silencio abrí un poco la puerta, haciendo que pudiera observar mejor el panorama, mi estaba padre tomando asiento en su sillón de piel, cerca de la chimenea, mientras sostenía un vaso de vodka y mi madre estaba parada frente a él, sosteniendo un sobre en la mano.

-¡vamos explícame, ¿quién es?! -grita mi mamá aventando el sobre al regazo de mi padre.

Howard ni siquiera se inmuto, termino de beber su vaso con total tranquilidad, para después dejarlo en la mesita a su lado e hizo lo mismo con el sobre.

-No es nadie, Tiphanie- trato de acercarse a mamá, pero ella retrocedió. -son solo esas ideas locas tuyas.

-¡Yo no estoy loca ¡- escupió con rabia.

se acercó esta vez a mamá y se auto pegó con un dedo en la cabeza

- Claro que sí, Son esas ideas de mierda que tienes en tu cabeza que te hacen creer cosas que no son ciertas, porque eres una loca celosa y lo sabes.

Los ojos de mi mamá estaban llenos de lágrimas, pero como la mujer fuerte que es, se negó a dejar salir una.

-¡¿Eso soy para ti, una loca que inventa mierdas?!

-Todo este tiempo, te has hecho ideas de que estoy con otras, que no te das cuenta que das vergüenza, das lastima-él se acercó aún más, acorralándola en la pared- Si de verdad te estuviera engañando ya lo hubiera hecho desde antes, que no te ves Tiphanie, estás fea, todo de ti te hace la mujer de porquería que eres.

Mi madre solo atino a soltar una carcajada sin gracias y lo vio a los ojos.

Me dolía que papá hablara así de mamá. Ella era la mujer más hermosa que haya visto.

-nunca, jamás vuelvas a decir que estoy loca- alejo a mi padre de ella y se dirigió a la mesa donde estaba el sobre y de ahí saco una imagen, que desde donde yo estaba parecía ser la foto de mi papá con una mujer, pero no pude distinguir bien. - Porque hoy, Howard, te demuestro en tu propia cara que nada de lo que dije son mierdas mías.

Mi padre intento arrebatarle la foto, pero ella lo esquivo.

-das vergüenza Howard, tu intento de hacerme creer que yo era la que se hacía ideas hace que solo me des lastima- mi papá la miro con odio.

-Yo no la conozco- intento defenderse con la excusa tonta que siempre usaba.

Mi madre solo sonrió y volvió a mirar la foto.

-Al que engañas no es a mí, Howard, solo te engañas a ti mismo.

Todo fue por esa mujer, mi mamá siempre lloraba por culpa de lo que hacía papá con ella.

-Esta vez, Howard no te perdonare, ya no más, ya estoy cansada de todo esto, de amarte y no recibir nada bueno a cambio.

Mi madre se acerco a la salida haciendo que me escondiera rápido, cuando mi madre ya se encontraba en el umbral de la puerta la voz de mi padre la detuvo.

-Piensa en tus hijos, Tiphanie, no hagas tonterías.

Ella se volteó y lo miro.

-Es por ellos por que hago esto, no voy a dejar que ellos crezcan pensando que así debe de ser una familia, me niego a que sean infelices, como...- y es ahí donde su mirada encuentra la mía y se pausa abruptamente.

Casada con el CEO ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora