LOVER BOY━━ BUCKY BARNES.

s e v e n. respect and alice

— ¿Qué?— fue la más honesta reacción ante la confesión de su amigo.— ¿Me lo dices en serio?

El semblante del ojiazul demostraba terror, y es que no terminaba de comprender que era lo que Ann Wembley causaba en él. Claramente no era la primer chica que le gustaba, pero lo que sentía por la rubia iba más allá de lo físico y sexual.

— ¿Qué hago? Hoy solo termine de confirmar mis sospechas: Alice me odia.

— ¿Qué? ¿Cómo hiciste para que esa mujer te odie? No odia ni a su esposo y ese si es una mierda de persona.— se burló.

— Bueno, está de más aclarar que me odia por tu culpa.— le señaló furioso.— La mujer piensa que tú y Ann se casarán y tendrán hijos, es por eso que no me deja acercarme a Annie, siente que le estoy arruinando sus planes.

Steve lo miró divertido aguantando la risa.

— Bueno, quizás después de todo, puede que me guste un poco Ann y me plantee el matrimonio con ella.— bromeó.

— ¿Qué dices?— preguntó confundido.

— Estoy bromeando.

— ¿Qué se supone que haga?

— Podrías intentar ganártela, llevarle unas rosas o algo así.— se encogió de hombros.— Hermano, tú eres el que sabe de mujeres, que me preguntas a mí.

— No es cualquier mujer, es la madre de Ann y en ese terreno tú tienes experiencia. Jamás terminaré de entender porque tienes más suerte con las mujeres cuarentonas que con las de nuestra edad.— ahora fue James quien se burló.

— Bah, de ahí saldrá mi fortuna algún día, ya lo verás.— suspiró.— Creo que un ramo de rosas podría ser suficiente para ganarte a tu suegra. Es casi tan fanática como Ann.

James lo miró confundido pues no tenía claro que era a lo que Steve se refería.

— ¿Nunca te haz fijado en el jardín tan precioso de su casa?— James negó.— Bueno, comienza a hacerlo porque es Ann quien se encarga de arreglarlo. Pasa la mayor parte del día metida ahí.

— Eso no lo sabía. Gracias Steve, fuiste de mucha ayuda. Nos vemos.— se despidió dejando al rubio con la palabra en la boca.

Salió rápidamente de la casa de su amigo y caminó hasta el mercado más cercano, debía de realizar unas cuantas compras para el día de mañana. Al llegar finalmente a su casa, saludo a su madre y hermana, quienes servían alegremente la cena.

— ¡James, cariño!— le saludó su madre con entusiasmo.— ¿Cómo te fue hoy?

— De maravilla.

— ¿Alguna novedad que contar?— James negó.— Sophie te ha visto con una chica. ¿Quién era?

James se atragantó con su comida y miró furioso a su hermana menor, quién mantenía una sonrisa burlona en su rostro.

— ¿Acaso me estás siguiendo?— cuestionó furioso.

— Es un pueblo pequeño y la gente habla mucho. Ya se quien es madre.— anunció.— Es hija de Thomas y Alice Wembley.

— ¿Y esos quienes son?— cuestionó Amelia confundida.

— Thomas es carpintero, tiene su taller en la avenida Ocean y Alice es su esposa, ama de casa.

— ¿Cómo sabes tanto?— preguntó el ojiazul fastidiado.

— Te lo dije. Pueblo pequeño.— soltó una risita.— Le pregunté a mis amigas sobre tu novia, pero casi nadie la conoce, lo que me dijeron sobre ella no fue nada bueno. Dicen que es rara, que no sabe hablar y que su único amigo es Steve.— se encogió de hombros.