Lunes, 05 de julio

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1:00 am - A veces considero que nunca está de más intercambiar palabras e ideas con otras personas. A veces concebimos ideas que abarcan mucho espacio en nuestra mente y es necesario dejarlas en algún lugar. Aunque ni nos presten atención. Para alguien que pasa mucho tiempo solo es extraño, pero me atrevo a decir que naturalmente tenemos una necesidad social. He llegado a puntos en donde la necesidad de amistad me delata y quiero hablar con alguien. O quizá no la amistad en sí.

Hoy descubrí un grupo en Whatsapp relativo a un grupo de filosofía y literatura. Al principio dudé en entrar y al final me atreví. Compartían ideas interesantes y yo me motivé a participar. Compartí mis pensamientos. Me expulsé un demonio más. Éramos muchos participantes, tanto que me empezó a irritar la gran cantidad de mensajes que llegaban. No dudé en silenciar el grupo por un año entero y de esa manera no habría ruido. Al final pasé un tiempo compartiendo ideas.

Empecé a visualizar un proyecto nuevo. Estoy trabajando en el desarrollo de un videojuego para móviles. La idea es simple. De primera instancia pensaba en desarrollarlo por mi propia cuenta. Es un trabajo largo pero nada imposible, pero carecía de conocimientos. Primero que nada, debía analizar la situación y adelantarme al problema; había muchas cosas que tener en cuenta. Un juego no conlleva solamente la jugabilidad, sino también creatividad. Había que pensar en la creación de personajes y su respectivo diseño, había que crear lo que no se había creado. Me llamó la atención crearlo en segunda dimensión (2D) y el tipo de diseño sería pixelado. Lo cual me había resultado bastante atractivo a la vista, muchos títulos son creados así y son bien recibidos por la comunidad. De primera instancia, no tengo ni idea de cómo diseñar en píxeles, así que me propuse a tomar cursos y tutoriales para poder crear los personajes. Había que pensar en la banda sonora, música de fondo, efectos, etcétera. ¿Cómo se iba a hacer eso? Ya tenía una noción de como sería, hay programas en los que puedes hacer ese tipo de cosas, el problema era crear y que quedara bien de acorde a lo que quiero hacer. La música en 8 bits siempre queda bien. Finalmente, lo más importante: la lógica y la programación. En esto me podría considerar más o menos bueno, ya que es lo que yo estudio en la Universidad. Hay programas que te ayudan a la creación de videojuegos pero se manejan por un lenguaje de programación y toda una serie de palabras clave que cumplen con una función, lo cual ayuda al juego interpretar lo que le estás diciendo que haga. Es como estudiar un idioma, como no sé mucho, debo leer y practicar.

Es interesante cuando analizo lo que quiero crear y cómo tengo que abstraer eso de mi imaginación a simples líneas de código que una computadora interpretará para realizar una acción. No hay límites y puedes crear cosas muy impresionantes. El problema siempre ha sido "cómo". Y eso es lo más interesante, que no sabes y tienes que buscar una solución. Entonces debes buscar y pensar. Pensar diferentes variantes de soluciones. Si encuentras una, la desarrollas, el juego la interpreta y si sale bien entonces podemos seguir avanzando, sino, entonces debes buscar otra. Siempre se ha dicho que la solución a un problema siempre atrae otro problema y sí. Quizá la solución que encontré abrirá paso a otro problema más grande el cual ahora debo solucionar. Y así siempre. Pero a final de cuentas, los problemas se vuelven más difíciles de encontrar, tanto para el programador como para el usuario. Si el usuario no lo encuentra entonces no hay de qué preocuparse. Por ende, no todo es tan malo.

Cuando uno tiene tantas ideas quiere abarcar mucho, y más si es un iniciante. Y más si eres muy ambicioso como yo. Tengo muchas ideas que ahora mismo son inalcanzables por mi poco conocimiento. Así que este será un proyecto simple y que no requiera mucho bagaje intelectual.

Esta tarde invité a mis hermanos menores a formar parte del proyecto. De esta manera ellos se encargarían del diseño y la banda sonora. Y yo, de que todo esto se fusione para que funcione. Espero y este proyecto siga vivo mucho tiempo y no sea mi efímera motivación la que termine todo otra vez.

11:06 pm - Antes de avanzar me ocurrió algo tan tonto pero a la vez doloroso. Estaba escribiendo algo que salía de mí y de alguna manera se borró y ya no pude recuperarlo. Intentaré volver a transmitirlo pero siento que ya no será igual.

Estuve pensando en nosotros y lo que éramos antes. Me sorprende lo rápido que puede llegar a amar una persona a otra y más después de una ruptura. Pero pienso: Si yo estuviera en su lugar ¿No querría también yo lo mismo? ¿A caso no es esa excesiva cantidad de dopamina lo que nos hace no caer en el vacío? Pero a la vez pienso, quizá realmente sea un sentimiento genuino. Pero no sé. No conozco el estado del alma de esa persona para saberlo, no sé que siente. A veces pienso en que realmente yo quisiera volver, no está de más tener una segunda oportunidad para hacer las cosas bien. Pero mi orgullo no quiere eso.

Recién pasó lo de la ruptura me dolía mucho ver que tenías a otra persona. Y me daba un poco de no se qué el ver que hacías con esa persona lo que hacías conmigo. Todo muy similar, como si fuera un comportamiento natural, muy maquinal. Intentando reescribir una historia, intentando copiarla y regresar a un sentimiento en específico. Como viviendo en el pasado. En fin, logré entender eso y ya no me duele. Creo que si te hace bien deberías aprovecharlo. A veces pienso: ¿Es realmente amor o es querer evitar caer? Vamos, si yo fuera esa persona también estaría extasiado. El amor es una de las cosas más irracionales que nos podría pasar. Intentando escapar de nuestra locura.

Creo que es lo único que pude rescatar del texto perdido, lo cual me entristece un poco. Tanto que se me quitaron las ganas de escribir.

5:17 pm
Me di cuenta de que en medio del frio invierno puedo controlar las avalanchas y el cúmulo de emociones que tengo en mi interior. Por más que desee no estar ya aquí, siempre es bueno pasar un momento de calidad con nosotros mismos y ponernos a analizar la situación. O distraernos. Es increíble como hasta el clima puede afectar en cómo pensamos y cómo reaccionamos y es cosa de dioses darse una pausa para no estallar. No hay prisas para nada, me digo a mi mismo. Hay tiempo para todo (pero no se trata de abusar del ocio), tómate un descanso y haz algo que te guste. Al fin y al cabo de eso se trata tener paz a veces: no ser nada y pasarla bien. Aunque mi bestia interior tenga miles de cosas por hacer, no siempre tendré ganas de hacerlas, pero cuando las haga me tendré felicitar por tomar la iniciativa.

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