-Capítulo 2-

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T/N: ¿qué tanto ves cariño? –dijo mientras terminaba de ponerles las pijamas a los bebés para intentar dormirlos un poco–.

Yoongi: no te preocupes mas tarde solucionaré un pequeño problema –se levantó de la cama y caminó hasta mi– oye, ¿porqué no dormimos a los bebés y vamos al baño al pasar un rato juntos? –la besé– son las ultimas veces que te haré el amor siendo mi novia y no mi esposa.

T/N: –dije riendo un poco, la tomé de la cintura y la puse contra las barandas del balcón, el cual sentí que se movió un poco– lo sé, llevamos 53 días sin intimidar, créeme ambos lo necesitamos –ella se giró dándome la espalda, la abracé por la cintura y puse mi mandíbula en su hombro– estan muy inquietos hoy pero si les ponemos la televisión puede que nos den unos 30 minutos y si le cobró un favor a Karina puede que consigamos unas dos horas a solas, ¿te alcanzan? –estaba a punto de decirle que aprovecharía cada segundo cuando se separó de mí y se emocionó sin razón alguna– Yoongi, ¡mira! Es idéntico al tuyo.

Yoongi: ¿el qué? –vi donde ella me señalaba– imposible, es un Ferrari 275 GTB del 66, es incluso el mismo color del que me chochaste.

T/N: por que crees que me emocioné, iré a ver si funciona para intentar comprarlo a presidente y así repondré el que choqué –ella me tomó de la mano jalándome a la salida cuando sentí mi teléfono sonar– ¿trabajo?

Yoongi: si, que raro, es el fiscal general de Corea, debe ser importante, yo te alcanzo luego cariño.

T/N: bien, te espero abajo –me dió un beso y se fue, antes de contestar tomé el control del televisor y puse el primer canal de niños que encontré para que Klaus y Altas estén entretenidos por un rato–.

Llamada

Yoongi: ¿hola?

Fiscal: señor Min, llevo todo el día intentando contactarlo.

Yoongi: si una disculpa fiscal, tuve un viaje de emergencia y hasta hace menos de una hora aterrizó mi avión, estoy fuera del país, ¿qué sucede? –dije caminando hasta la puerta de la habitación viendo el gran pasillo–.

Fiscal: ¿esta fuera del país? Eso es un alivio, hace un par de horas llego un enviando del gobierno de Estados Unidos.

Yoongi: y ¿qué quería el enviado?

Fiscal: quería interponer otra orden de captura para usted y sus primos pero para hacer eso necesitan tener pruebas que usted esta en el país y como no lo esta, no hay nada de que preocuparse, el enviado tiene 24 horas para mostrar las pruebas de la captura o sino tendrá que irse del país, en fin le marcaba para decirle que no saliera a las calles en las próximas 24 horas nada más.

Yoongi: mis primos y yo estamos fuera del país, regresaremos en 3 días a Corea y luego Jimin y yo nos iremos por unos días de vacaciones, así que el gobierno de los yankees tendrán que esforzarse más para conseguir una prueba para ponerme otra orden de captura –cuando dije eso escuché a los bebés reí, me giré para verlos y solo vi a Atlas en la cama, busqué a Klaus con la mirada rápidamente pero no lo ví– fiscal tengo que dejarlo, luego le devuelvo la llamada.

Fin de la llamada

Colgué la llamada y busqué en el baño pero nada, hasta que escuché su risa, soy padre de mellizos de 11 meses, se distinguir las risas de mis hijos, caminé hasta donde escuché la risa y vi a Klaus en el balcón jugando del otro lado del barandal, casi a punto de caerse.

Yoongi: campeón, ven con papá, no te sueltes –dije caminando lento hacía él, lo que menos quiero es que se asuste y se suelte– aquí esta papá, ¿cómo llegaste hasta ahí travieso? –estaba tan cerca de tomarlo cuando se soltó, mi primer instinto fue saltar al vacío por mi hijo–.

ENTRE DOS DEMONIOS (Yoongi y Tú) EL REENCUENTRO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora