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Narrador Omnisciente

Patrullar en las calles con su equipo era una de las actividades favoritas de Kirishima. Encontrar villanos y ayudar a los civiles con una sonrisa.

Pero, ese mismo día iba a cambiar su vida.

No había problemas, todo estaba tranquilo mientras caminaba junto a Tamaki. Hablaba con él y trataba de sacarle algún tema de conversación sin que el otro se pusiera nervioso o tímido.

Hasta que se escucha un derrumbe a lo lejos, se pusieron de inmediato en alerta nuestros héroes. Corriendo hacia aquel ruido y ver quien fue el que lo provocó.

-ahahaha...- la risa de un villano fue oído de inmediato, como si buscara llamar la atención más que escapar después de su hazaña.

Era una chica de cabello largo y castaño, de figura delgada y pálida, ojos amarillos y felinos. Tenía una cola de lagarto, alas de águila y en su cabeza cuernos de toro. Sin duda era una mezcla de varios tipos de animales.

-oh, ya era hora de que llegaran- dijo esa chica luego de notar la llegada de los héroes.

El primero en atacar fue Tamaki, estirando los tentáculos que salían de sus dedos, servía para que se le dificultara el vuelo. Iba a ser más fácil de esa forma enfrentarla ya que luego de encontrarse en ese aprieto fue a tierra firme.

-wow que poder tan interesante, me recuerda un poco al mío- le dijo al peli azul añil con una sonrisa- y pensar que te ves tan tierno e inocente, tu cara me recuerda a... Un gato, un lindo gatito.

De sus manos salieron unas ondas color carmesí que iban directo a Tamaki.

Kirishima por instinto y por proteger a su senpai se interpone juntando sus brazos y activando su quirk, recibiendo el golpe él y mandándolo algo lejos por el impacto.

-Red Riot!- gritó Tamaki preocupado de su kohai.

-tranquilo Suneater, estoy bien- le dijo levantándose de donde estaba, la adrenalina puede que haya sido el causante de su rapidez al levantarse y continuar peleando.

-oh, no era a ti a quien quería hacer eso, pero que importa... en ese caso te deseo la mejor de las suertes niño- dijo la villana moviendo sus brazos despreocupada, pero luego de eso dio una coqueta reverencia hacia Red Riot. Sus palabras eran confusas, pero no tenían que quedarse a pensar lo que quiso decir.

-retrocedan- Fatgum llegó a escena interviniendo, diciéndoles aquello a los más jóvenes- no sabemos aún lo que hace su quirk a pesar de todo.

Y era cierto, no sabían que tan peligroso podía llegar a ser el poder de la villana. Sobre todo porque tal quirk ya le había dado a unos de ellos, aunque no se ve que haya hecho gran cosa. Más para el endurecimiento de Kirishima.

-oww... Que lindo que te preocupes por esos niños, serías perfecto como...- iba a activar su quirk nuevamente, esta vez en dirección de Fatgum. Pero la reacción del contrario fue más rápida acercándose a ella casi sin ser notado, cosa que la alertó y volvió a volar con sus alas de águila- vaya, a pesar de tu tamaño eres rápido.

-no me subestimes- se quedó ahí quieto esperando un ataque.

La chica voló en dirección hacia el héroe con las intenciones de embestirlo con sus cuernos de toro, pero tal golpe nunca llegó a tocarlo.

Por la distracción que estaba generando el mayor, no se preocupó de los más jóvenes, el pelirrojo le dio un buen golpe botándola en el piso y luego de eso Tamaki la movilizó con sus quirk.

La policía llegó minutos después llevándose a la mujer en un camión, lo bueno es que no pasó nada malo y no hubieron heridos. No civiles por lo menos, un alivio que no había nadie en el edificio que había caido minutos atrás.

Kirineko (Bakushima)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora